Epílogo

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Un año más tarde.

Con un Botas completamente curado ronroneando alrededor de sus tobillos, Taehyung se sacó la corbata y la tiró a un lado. Se sentía tan bien salir del trabajo ahora. Su nuevo Vicepresidente de Operaciones le había echado la bronca. Había estado en funciones durante casi nueve meses y tenía grandes planes para cambiar la forma en que Kim's Tree hacía negocios. Ella estaba muy orientada a los empleados. La mujer ya había abierto un jardín maternal en el lugar, le había convencido de un mejor plan de seguro médico y le forzó a construir mejores instalaciones en el sitio de Alaska. Tenía cabeza para los negocios y podría discutir durante todo el día cuando creía en algo.

Por supuesto, él siempre se lo daba porque ella se veía muy bien en bikini.

—¡Oye, saliste temprano! —Jimin entraba desde la piscina—. Jungkook estaba a punto de prender la parrilla. ¿Quieres una cerveza?

—Por supuesto. Estoy de vacaciones después de todo. ¿Lo sabe ella? —Taehyung miró hacia el exterior donde Ivy chapoteaba en la piscina, el cabello rubio en un montón desordenado en la parte superior de su cabeza. Su panza de embarazada no se notaba todavía, pero en unas pocas semanas más, lo haría. Saber que pronto se vería la evidencia de su pasión, de la vida que ellos habían creado, creciendo dentro de ella, lo excitó.

Jimin sonrió.

—Ella no tiene idea. Cree que mañana es la reunión con el jefe de tecnología.

—Excelente. —Taehyung se quitó la chaqueta con un movimiento de hombros. Namjoon había demostrado no solo ser un gran gerente, sino un conspirador exitoso—. Todo está en su sitio. El avión está listo. Wendy sabe que vamos. ¿Los contratistas han finalizado el cuarto de juegos?

—Sí, hoy mismo. Te envié las fotos. Te aseguro que ahora tenemos el espacio perfecto para jugar con nuestra esposa durante el próximo mes. Y Jungkook decidió que esta vez la va a atar. Va a entrar en la sala de conferencia y va a enlazarla antes de que la levantemos y la saquemos. Sabes que a ella le gusta la cosa vaquera.

Taehyung echó hacia atrás la cabeza y se rió. Su dulce Ivy tenía una imaginación muy vívida. Se había encariñado con jugar como un pato con el agua.

Él esperaba pasar el mes concentrado en ella nada más.

Ivy levantó la mirada y Taehyung supo en el momento en que lo vio. Sus ojos claros se iluminaron. Ella corrió a la orilla de la piscina y subió de prisa por las escalinatas. Jungkook se apartó de la parrilla y lo saludó con la cabeza a su paso.

Jungkook. Su hermano. Todo era legal ahora. Él se sonrió. Ivy caminaba hacia él, sus pechos apenas cubiertos por un biquini amarillo. Ella nunca usaba ese traje en público, pero a él le encantaba vérselo en privado.

—Ten cuidado —dijo Jimin al empujar una cerveza en su mano—. Ella va a arrojarse en tus brazos. Y si no quieres mojar estas ropas, me escaparía.

Ella simplemente lo perseguiría hasta encontrarlo. Su esposa nunca lo dejaba ir muy lejos. Cada vez que la presión podía con él, lo arrastraba de regreso con el sol de su sonrisa. Su mundo finalmente tenía un centro y estaba contento de orbitar en torno a ella. Ivy hizo lo que Jimin le había prometido. Se arrojó en sus brazos, aplastando su cuerpo contra el de él.

—Bienvenido a casa, señor Kim. —Ella le presionó un pequeño beso en los labios—. Te extrañé.

Le echaba de menos cada minuto que él no estaba en su presencia.

—Yo también, cariño. ¿Está lista para su reunión de mañana, señora Vicepresidenta?

—Por supuesto, jefe. —Ivy amaba sus nuevas responsabilidades y los empleados la adoraban.

—Asegúrate de no llegar tarde.

Ella frunció el ceño y arrugó la nariz.

—Nunca llego tarde, señor Kim. ¿Vas a venir a nadar conmigo? El agua está genial.

—Como ya estoy mojado, creo que lo haré. —Le palmeó el culo de manera juguetona mientras ella regresaba a la piscina.

Taehyung se quitó la camisa.

—¿Ha tomado un tono claramente adulto nuestra pequeña fiesta en la piscina? —preguntó Jungkook con una sonrisa amplia en el rostro.

—A Ivy le gusta jugar a los vaqueros y prisioneros, ¿verdad? —preguntó Taehyung—. Creo que la pandilla Kim va a montar esta noche.

—La cena puede esperar—dijo Jungkook y se zambulló en la piscina.

—Aleluya. Me mata cuando ella usa ese bikini. Siempre quiero quitárselo. —Jimin siguió a su hermano.

Taehyung se quitó el resto de la ropa. No la necesitaba.

La pandilla Kim tenía una prisionera y nunca iban a dejarla ir.

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Cautiva - jjk; kth; pjm [✔]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora