• I'll find you • [ Kaeluc | Genshin Impact ]

• Chapter 6: Together •

» Chapter 6: Together.　
　 　　　 　　 　
　 　　　 　　 　
　 　　　 　　 　
Las semanas transcurrieron con rapidez y la amistad que había creado con Diluc comenzó a fortalecerse desde aquel día en que todo había cambiado.
　 　　　 　　 　

Era cierto que a veces lucía un tanto distante cuando se encontraban en clases, pues había descubierto que no le gustaba que le interrumpieran mientras estudiaba, pero ahora compartía asiento en el comedor con sus amigos, y conversaba con ellos activamente.
　 　　　 　　 　

El tema sobre Omegas y Alfas fue evitado a propósito.
　 　　　 　　 　

Kaeya le había rogado a Childe que no hiciera comentarios con respecto a ello por el momento, ya que aún no eran tan cercanos para cruzar esa confianza y si seguía presionando con ese tema, lo único que lograría era que fuera encerrándose en sí mismo cada vez más.
　 　　　 　　 　

Por otro lado, los entrenamientos del equipo de fútbol iniciaron y para sorpresa de los dos Alfas y de todos los integrantes del team, Diluc era bastante atlético.
　 　　　 　　 　

Les impresionaba enormemente que fuera capaz de correr con una velocidad tan vertiginosa, tanto así que Kaeya dudó si hubiera sido una buena decisión que ingresara al equipo.
　 　　　 　　 　

Quizá estaría mejor si estuviera formando parte del club de Atletismo.
　 　　　 　　 　

-¡¿Estás loco?! -Ajax tenía una botella de agua en la mano mientras veía a Diluc correr, sonriendo como un idiota al descubrir que había aceptado en el club a un diamante en bruto. -Entrenaremos su habilidad con el balón, si logra hacer un par de movimientos, será imparable.
　 　　　 　　 　

Kaeya solo rodó los ojos mientras fijaba su atención en la figura delgada del Omega.
　 　　　 　　 　

Su largo cabello rojizo indomable había sido atado en una cola alta para mayor comodidad y ese elegante moño podría haber permitido una buena vista de su nuca, si no fuera porque Diluc fue bastante cuidadoso en cubrir esa zona tan vulnerable para los Omegas.
　 　　　 　　 　

Debajo de su ropa deportiva decidió usar una camiseta con cuello alto, que cubría toda la porción de piel que normalmente sería visible para cualquiera.
　 　　　 　　 　

Algunos Alfas se habían quejado cuando lo vieron llegar a las prácticas con esa ropa, pues parecían emocionados con la idea de ver un poco de piel expuesta en un Omega, pero Tartaglia había detenido todo tipo de comentarios desde el primer día para el menor no se sintiera incómodo.
　 　　　 　　 　

-Ese Omega está protegido, ni se les ocurra colocarles sus garras encima. -Había dicho con voz de capitán, provocando que Kaeya se sintiera enormemente agradecido por la manera en como su amigo había manejado la situación.
　 　　　 　　 　

Porque la verdad es que estaba lo suficientemente ansioso como para tener que aguantar frases doble sentido que fueran dirigidos a Diluc.
　 　　　 　　 　

Nuevamente ese sentido de protección se hacía latente en su interior y pese a que deseaba controlarlo con todas sus fuerzas, era imposible.
　 　　　 　　 　

Era una necesidad que se colaba debajo de sus venas hasta tal punto que sentía que su corazón se sobrecogía de agonía si no era capaz de decir algo o de gruñir en voz baja a sus compañeros de equipo.
　 　　　 　　 　

Era frustrante.
　 　　　 　　 　

-¿Cómo te sientes? ¿Muy agotado? -Diluc trotó lentamente en su dirección, deteniendo sus leves saltos hasta llegar a su lado y recibir, con una diminuta sonrisa en su pálido rostro, la botella de agua que el moreno le tendía.