A Través De La Máscara // Adaptación Larry

Capítulo 12

1 mes atrás

Louis

Cuando dieron las 12 tomé mi máscara blanca y de puntitas me dirigí a la puerta del departamento. A éstas horas Liam ya debería estar dormido, pero aún así no quería tentar a la suerte.

Me contó que tenía una nueva inversión y eso lo tenía todo el día ocupado.

Abrí la puerta y la cerré con mi llave.

Eddie.♡

Ya estamos abajo -

Ví el mensaje y aceleré el paso. Pronto pude ver a mis 2 mejores amigos, ambos estaban en el coche de Eddie, los saludé y me subí en la parte de atrás.

- ¿Estás listo, peque? - preguntó Eddie con ese ridículo apodo, él era mayor sólo por 3 años.

- Sip - respondí sin más. Me recosté en el asiento.

- ¿Recibieron el mensaje del jefe diciendo que nos quería en la habitación de las niñas? - preguntó Niall, él venía en el asiento del copiloto centrado en su celular.

- Yo sí, pero no sé para que - le respondí.

- A mí me dijo que es una ocasión especial, que nos luciéramos - habló Eddie, tenía la mirada puesta en el camino.

- Siempre lo hacemos - mencioné.

En todo el camino me dediqué a ver las estrellas, eran muy bonitas, estaban siempre adornando la noche con su luz y a mí me encantaba admirarlas.

- Bueno, ya llegamos, así que pónganse sus mascarás. Yo entraré por detrás.

- Yo te sigo - le dijo Niall.

- Pues yo voy por la entrada - Eddie se detuvo antes de salir de su auto y me miró.

- Ten cuidado, los clientes cuándo te ven se vuelven un poco....dementes - habló a través de su máscara negra, Eddie era muy protector conmigo.

- Nadie me reconocerá, ahora andando, que ya vamos tarde - los 2 asintieron sin más.

Niall y Eddie se fueron por la entrada trasera y yo por la central.

Los guardias me dejaron pasar mientras les lanzaba la clave secreta del lugar.

Through the Mask

Las puertas se abrieron y la música se filtró por mis oídos. El lugar estaba a reventar, la mayoría eran inversionistas, sólo personas que en realidad pudieran pagar para entrar tenían que ser empresarios ó personas que malgastan el dinero sólo por diversión.

Dejé que mi vista viajara por todo el lugar hasta que mis ojos se encontraron con otro par de ojos.

Sentí mi cuerpo temblar, sabía que mi vestimenta era demasiado provocativa, sólo ropa pegada a mi cuerpo.

El hombre tenía a 126 en su regazo, la chica se le estaba ofreciendo y el hombre sólo tenía sus ojos puestos en mí. Noté sus chinos rebeldes, sueltos y muy largos. Sus penetrantes ojos verdes.

Dios.

Se parecía tanto a él.

Nuestras miradas seguían puestas en el otro, así que decidí girar mi rostro restándole importancia. No podía mirar a un cliente así. Comencé a caminar entre la gente hasta llegar a las puertas dónde estaban las habitaciones especiales, aún sentía cierta mirada en mi espalda.

Sin duda tenía un efecto en los hombres.

Sonreí y volteé encontrándome con su mirada verdosa. Alcé mi mano y con uno de mis dedos le pedí que se acercara a mí luciendo juguetón. Me encantaba jugar con sus mentes. Bajé mi mano y después entré.