Un Rey Viejo

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El olor de la humedad cubriendo la sala invadía la atmósfera de un lugar al parecer olvidado por el tiempo, entre la soledad y el musgo brillante que colgaba de las ya desgastadas columnas de piedra qué sostenían el techo de la rudimentaria habitación, se pudo oir suaves golpes impactar contra el suelo.

— Hace frío.

Dijo una de las personas que avían aparecido en medio de el lugar mientras se frotaba sus manos. Está llevaba puesta una túnica de aspecto sucia y desgastada, dándole la impresión a todo el que lo viera de ser un mendigo que vagaba por la completa oscuridad en Busca de un lugar en donde calentarse.

— Si, hace mucho frío.

Dijo el viejo con una gran barba que estaba a su lado, mientras  imitaba sus gestos con expresión ería.

— ¿Que hora es ya?.

Dijo una mujer con una capucha que cubría su rostro, a pesar de la completa oscuridad que cubría toda la zona.

— No lo se. Me parece que aún no es media noche.

Respondió la persona qué daba la impresión de ser alguna especie de mago teñido de de un fuerte color carmesí, mientras parte de su desgastado atuendo desprendía un olor similar a de la carne prodrida.

— No, ya andado.

Mirando en dirección a el anciano de baja estatura con dos cuernos negro saliendo de su blanca frente, una nueva duda surgió en la mente de el chico con manchas de sangre seca por toda su ropa.

— Como sea... porque me hicieron bajar a un lugar tan lúgubre. Acaso nuestro objetivo no era eliminar a las tropas humanas que atacaron la ciudad de Bullet? porque perdemos el tiempo en un lugar vacío y sin presas decentes como este,...

— cállate sucio nigromante. No tienes que saber nada más que nuestras órdenes, apresurarse y dinos cuántos humanos lograste capturar de caminó aquí y no nos hagas esperar más; esas ropas tuyas están empapadas con su sucio olor.

el viejo de aspecto demoníaco dijo eso mientras apuntaba una de sus garras cargada de poder mágico en dirección a nigromante. Recibiendo la mirada de muerte por parte del viejo demonio el nigromante se limitó a responder.

— calma, no me mires de esa forma o creeré que mi virginidad corre peligro ante un viejo de aspecto asqueroso como tu, no puede reunir mucho en solo tres días, así que espero que dos mil, sean suficiente para complacer las órdenes de su majestad.

— serán suficientes. De hecho no esperaba que trajeras tantos.

Dijo la mujer de aspecto misterio para para poco después quitarse la capucha revelando su rostro.

Viendo esto, el nigromante quedó estupefacto antes de arrodillarse en el suelo ante la persona ante sus ojos.

Sin siquiera prestarle atención, la suave voz de la mujer antes encapuchada resonó en un tono melodioso por todo el lugar mientras motas de luz púrpura aparecían en el lugar.

— Del día más brillante a la noche más oscura; solitarias como las mazmorras más profundas e inertes como la noción del tiempo en el vacío.... Confieso ante ti mis deseos y doy mil almas como intercambio. Promoción.

Rompiendo la quietud dentro de la edificación subterránea, una columna de aire barrio con el polvo del lugar, dificultando en gran medida la capacidad para respirar de las personas alrededor. Tenue pero constante, un sonido similar a un silbido provino desde lo más profundo de la habitación en la que se encontraban estas tres presencias, antes de que el inquietante silencio, volviera de forma repentina a la sala.

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⏰ Última actualización: Dec 04, 2022 ⏰

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Konosuba: Un Bandido Para Este ReinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora