Rem (Young Justice)

Capítulo 4

Una vez Batman le hubo mostrado dónde se hospedaría le explicó las normas (una lista muy muy larga de ellas pero había cuatro principales. La primera: No podía salir de la montaña sin compañía y, si lo intentaba, su collar le dejaría inconsciente, la segunda: Por la noche no podía salir de su cuarto, la tercera: Nada de armas si no es durante una misión y la cuarta: No podía tocar en ningún momento aparatos electrónicos a no ser, que fuera indispensable para llevar a cabo una misión de forma exitosa).

-Equipo- dijo con voz profunda cuando se reunieron- este es Rem. A partir de ahora formará parte de Young Justice, supongo que podréis hacer las presentaciones- dicho esto, y antes de que cualquiera pudiera objetar, desapareció por los Tubos Z.

-Yo soy...- comenzó M'gann con una sonrisa amable.

-Lo sé. Mejillas verdes, bote de mostaza, rubita, Supergruñón y Patas de pescado- enumeró mientras señalaba a cada uno de ellos con sus respectivos apodos. La marciana se quedó parada, flotando con cara de no saber cómo reaccionar a eso. Conner parecía querer arrancarle la cabeza al igual que Artemis, Wally parecía divertido por los apodos de los otros y un poco ofendido por el suyo y Kaldur... Estaba molestamente sereno- Que conste que tengo las mismas ganas que vosotros de estar aquí... No tenía opción y sé que lo sabéis.

-Podías haber ido a la celda de aislamiento...- Dijo Artemis- Lo habríamos agradecido- murmuró la última parte pero aún así Rem lo escuchó. Él, que había avanzado hacia la cocina para agarrar algo para picar se paró en seco y la miró por encima del hombro.

-Mira, Rubita, solo tenía la burla de una elección, estar encerrado no es lo mejor para mí. Además, ¿Crees que me llevarían a una cárcel con ese tipo de celdas? Se arriesgarían a que hubiera un intento de fuga como el de Belle Reve, probablemente estaría aquí o en su base del espacio, la Atalaya.

-¿Cómo sabes todo eso?- preguntó Wally.

-¿Tienes pérdidas de memoria a corto plazo, Wally? Es mi trabajo saberlo- abrió la nevera y sus ojos se abrieron como platos- ¿Tanta comida tenéis? Ya lo sé, ya lo sé, velocistas y todo eso pero... Es más de lo que he comido en mis años en la calle- sin mediar más palabra agarró uno de los cartones de leche, un bol, una cuchara y unos cereales. Vertió la leche y echó los cereales.

-¿¡Estás loco?! ¿¡Cómo eres capaz de echar primero la leche?!- preguntó Kid Flash con incredulidad mientras Rem se sentaba en la encimera de la cocina con las piernas cruzadas..

-¿En serio, Wally? ¿De todo esto es eso lo que te parece una locura?- dijo Artemis. Menos de dos segundos después ya estaban enzarzados en una discusión, algo no muy novedoso.

-¿Es siempre así?- interrogó el nuevo miembro del equipo lo que provocó un suspiro resignado de Kaldur.

-Me temo que sí- contestó el atlante.

-Creo que tengo la solución- dijo con una sonrisa pícara mientras apoyaba la cuchara de la que había estado comiendo contra el borde del bol- ¡Ay, ya, besaos de una vez!- Exclamó. Cuando esas palabras abandonaron la boca de Rem la discusión se detuvo de inmediato. Tanto Artemis como Wally le miraron furiosos, sin embargo, sus caras estaban más rojas que el pelo de Wally.

-¿¡Yo?! ¿¡Con él?!

-¿¡Yo?! ¿¡Con ella?!- dijeron ambos al unísono- ¡Ni de broma!

-¡Qué asco!- dijo Artemis mientras cada uno salía en direcciones opuestas, probablemente Artemis al gimnasio y Wally a su cuarto.

-Et voilà- dijo el más joven del equipo mientras señalaba con las palmas de las manos las puertas por donde había salido la pareja.

-Nadie había conseguido eso antes- dijo Megan impresionada- A parte de Batman- añadió como una ocurrencia tardía.

-Nadie es más astroso que yo, ni siquiera el gran murciélago malo- Rem captó la mirada desconcertada de no solo la marciana si no del resto de los presentes- ¿Si lo contrario de disgustar es gustar lo contrario de desastre es astre?- se encogió de hombros, bajó de la encimera en la que había estado sentado, dejó el plato en el fregadero y se fue a su cuarto a pensar cómo podía meterse con los héroes. Además, había consultado un reloj y había visto que era hora de su "encierro nocturno" tampoco es que tuviera otra opción.

-Ugh- dijo Rem con frustración, llevaba dos horas tumbado en la cama boca arriba lanzando al aire y atrapando una pelota de tenis que había en su habitación (supuso que era por si estaba aburrido en algún momento, también dedujo que había sido Black Canary, Bats no lo hubiera permitido).

Su habitación no es que fuera pequeña, era de un tamaño aceptable para una persona de su tamaño y edad. Era simple, había una cama, un escritorio vacío con una silla y un baño pequeño que tenía una ducha de obra y básicamente todo lo que tiene un baño exceptuando cosas puntiagudas que se puedan usar como armas.

Se sentó y lanzó la pelota hacia la cámara (sabiendo que ésta no se iba a romper) expresando su frustración y un claro "Jódete Batman". Se levantó, se enjuagó la cara con un poco de agua fría y se miró al espejo. Miró a su alrededor (pese a que ya había comprobado la ausencia de cámaras en ese cuarto) y se quitó la máscara negra de la cara. Se había quitado la chaqueta y se había quedado con una camiseta gris de manga corta.

Observó sus ojos, la piel que había estado oculta bajo la máscara estaba roja pero en cuanto pasara la irritación se vería claramente que estaba notablemente más pálido por esa parte (más de lo que lo está el resto de su piel dado que Gotham es de las ciudades más oscuras que puedas encontrar). La verdad es que hacía mucho que no se la quitaba. Como recibía las visitas en su casa no quería arriesgarse a que lo encontraran sin la máscara y por ello no se la quitaba.

Pasó los dedos por la zona enrojecida y suspiró levemente. Se mojó la cara de nuevo y poco a poco la zona dejó de estar irritada.

-El insomnio es un asco- murmuró entre dientes. Pero repentinamente la puerta metálica de su cuarto se abrió. Agarró su máscara y se la puso más rápido de lo que lo hubiera hecho Flash (una clara exageración por parte del chico).

-Así que son las 5:00- murmuró, esa era la hora a la que acababa su encierro nocturno. Salió de la habitación y notó que nadie estaba despierto. Sonrió con malicia mientras una idea se formaba lentamente en su cabeza- Tal vez pueda preparar ahora mis bromas e ir a su gimnasio un rato- (tenía acceso a uno en el que no había ninguna clase de armas y solo máquinas de ejercicio, algo más que suficiente para el joven) dijo mientras se frotaba ambas manos.

-Se van a cagar.