Parte sin título 23

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Un mes y medio, con todos sus días y sus noches. Durante ese tiempo habían hablado a diario, habían reído de alguna ocurrencia, habían escrito largos correos electrónicos y se habían intercambiado algunas fotos. No habían intercambiado palabras de amor, no habían querido profundizar en sus sentimientos, solo se habían estado conociendo.

Un mes y medio más tarde, Cais y Jamie estaban en el muelle esperando a que la fragata llegara a puerto.

Ethan permaneció en su puesto ansiando el momento de pisar tierra, a partir de ese momento su vida iba a cambiar para mejor. Cais le había dicho que esperaba su llamada, de modo que tardaría lo justo en desembarcar e ir a buscarla a su ciudad. Cogió el petate y dio un repaso al camarote antes de bajar del buque, iba a echar de menos esta vida pero estaba seguro de que no lo iba a lamentar. Fue despidiéndose de todo el mundo conforme avanzaba en su camino hacia la pasarela, todos se iban deseando un feliz permiso y solo encontraba rostros sonrientes.

Parada al otro lado de la pasarela, Cais Fraser le esperaba acompañada del pequeño Jamie, el corazón se le había acelerado por la sorpresa. Ni en sus mejores fantasías jamás habría imaginado que Cais estuviera esperándolo en ese muelle, había tenido que recorrer muchos kilómetros para llegar hasta allí.

Bajó por la pasarela tratando de no correr, pero se moría por tenerla entre sus brazos. Oh, estaba preciosa, sus recuerdos y las fotos no le hacían justicia, llegó hasta ella y se detuvo a un palmo escaso. Se quedaron quietos un momento hasta que Ethan soltó la bolsa en el suelo y se inclinó sobre ella, atrapó sus labios y se dejó envolver por los brazos de ella que rodearon su cintura.

—Bienvenido a casa —habló sobre sus labios y Ethan se estremeció.

—Vas a pensar que estoy loco, pero... creo que te amo.

Se fundieron en un fuerte abrazo, como si no quisieran separarse jamás, como si no se creyeran que estaban juntos al fin.

—Entonces yo también debo estar loca... porque también te amo.

Estas dos vidas míasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora