NEGRO AZABACHE

SORPRESAS

CAPÍTULO IV

—Ahhgh— gruño estirando mis músculos, se me han dormido, mala posición para dormir y más si es en un sofá y con un chico apoyado en tu hombro.—Cono, levanta— lo empujó haciendo que caiga al suelo pero como su brazo estaba en mi cintura se aferra haciendo que caiga con él.

Quedo encima de su pecho y él con los ojos abiertos y una sonrisa de lado envuelve mi cintura.

—Buenos días— dice con la voz ronca de recién levantando.

—Suéltame, de verdad está relación de amistad se acaba si sigues coqueteando, te he dejado las cosas claras, Connor y me prometiste que lo harías, que solo amigos.— me levanto como puedo y me paso las manos por el pelo.

—Eso de que me dejes en la friendzone me sigue doliendo— dice y ruedo los ojos

—Te juro que si sigues así hasta de la friendzone te saco— amenazo y él suspira tirándose de nuevo al sofá.

—Vale, vale.— levanta los brazos en son de paz haciendo que los músculos se marquen, su abdomen es marcado y su V es un poco visible, la de Ian si estaba marcaba y eran un pco más grandes los músculos...

¡Deja de comparar!

—Para querer sólo ser amigos esa mirada me dice lo que quieres—dice y le miro mal

—¿No has pensado en hacerte un tatuaje?— preguntó sentándome junto a él, nuestros brazos se rozan pero no siento nada, solo que está sin camisa.

—No me gustan las agujas.— responde y le miro burlona

—¿En serio?— preguntó graciosa y el rueda los ojos cruzándose de brazos

—Le tengo fobia a las agujas— se sincera

—Y yo que pensé que no te daba miedo nada, que mentiroso eres, Cono— me levanto hacia la cocina, sirvo un vaso de agua y me lo tomo de un trago.—¿Donde hay toallas?— pregunto

—En el baño, el armario pequeño el último cajón.— explica

—Vale, gracias, me ducharé y me voy.— aviso

—Si quieres te puedo ayudar a enjabonarte— dice

—¡No!— gritó cerrando la puerta del baño, me quito la ropa quedando desnuda y busco la toalla, pero no la encuentro, abro un poco la puerta solo para que se escuche mi voz.—¡No encuentro las toallas!— gritó y escucho el bufido de Connor acercándose, me meto a la ducha y me cubro con la cortina Justo cuando Connor toca la puerta.

—Pasa pero no mires— amenazo y él entra con una sonrisa de badboy en los labios, se agacha y saca una toalla azul oscuro, la deja en el lavabo.—Gracias— me mira y asiente para luego salir.

Me ducho rápidamente y me lavo los dientes con mi dedo, salgo vestida y bajo a la cocina atraída por un olor delicioso.

—He hecho tortitas ¿te gustan?— pregunta y cojo una del plato, me meto un trozo a la boca y creo que mi cara lo dice todo, están buenísimas.

—Están súper redonditas, me sorprendes cada vez más, Cono— le hago un cumplido y sus mejillas se encienden un poco haciéndolo parecer.. ¿tierno?.

—Eres el mejor amigo y el único que tengo— lo halago.

—Si quieres te puedo acompañar a casa, así saludo a tu hermano.— dice

—He venido en la camioneta de mi hermano, te puedo llevar pero no quiero que quieras volver caminando— explico mientras me como otra tortita.

—Estaré todo el finde solo, esto es aburrido y según tu soy tu único amigo, no quiero ser pesado..—

—No eres pesado, has hecho que tu compañía me agrade, ya eres uno más del grupo.— explico y él sonríe

—No quiero molestar..— insiste

—Que no molestas, solo cuando intentas coquetear, eso si molesta, pero de resto no— digo y él sonríe apagando la estufa.

—Me iré a duchar y luego nos vamos.— dice y se va, yo por cortesía organizo un poco la cocina y el salón dejando todo en orden, según sale Connor nos vamos guardando las tortitas en un taper.

Ponemos música y cantamos hasta llegar a casa, subimos y cuando abrimos la puerta la escena que los encontramos es increíble, Connor y yo nos volteamos a mirar y estamos igual de impactados.

—¡Si!— dice emocionada Has con las manos en la boca, empezamos a aplaudir llamando la atención de ambos, mi hermano arrodillado con la caja de terciopelo en las manos y Has de pie llorando de emoción.

—Pero ponle el anillo— dice Connor y Dereck se levanta abrazando a Has, le pone el anillo y la levanta para girar.

—¡Y no me lo dijiste! Eres un cabron— me quejo llegando junto a él—Has, ¿estás segura? ¿Te sientes preparada para aguantar a este chico de aquí a mi lado?— pregunto poniendo una mano en el hombro de Has, ella ríe

—Y para un mini él— comenta y mi sonrisa se borra siento perder el color en mi cara.

—¿Que? Dime que no lo malinterprétamos—dice Connor por ambos.

—Estoy embarazada— dice Has y Dereck cae al suelo llamando la atención.

—¡Se ha desmayado!— dice Has y yo me arrodillo junto a él.

—levántale los pies— ordenó a Connor que me hace caso

—Trae agua, Has— digo mientras le hago aire a Dereck —Mierda hermano, yo me sorprendí pero tampoco.— digo según abre los ojos.

—¿En serio estás embarazada?— pregunta Connor cuando sentamos a Dereck en el sofá

—Si, lo se desde antes de ayer.— dice y la abrazo sorprendiéndola.

—Te quiero, Has.— digo y ella sorprendida me abraza.

—¡Alguien se puso sentimental!— dice Dereck y le fulmino con la mirada.

—Tu solo cállate— digo y le cojo la mano a Has para mirar el anillo.

—Demasiadas sorpresas— dice Cono.

—Menos mal llegamos a tiempo— digo sentándome junto a Dereck.—Hermanito, vas a ser papá.—

—Y sigo sin procesarlo— se levanta para abrazar a Has y besarla en toda la cara, ella ríe feliz y yo sonrió mientras una oleada de alegría y melancolía me recorren.

A ver, a mi no me gustaría quedar embarazada, eso no... prefería adoptar, eso de que algo crezca en mi interior... eso como que no.

—Bueno futuros papas ¿a quien le apetece ir a celebrarlo? Podríamos ir al centro comercial— sugiero

—Vale.—conectan todos.

—Invitaré a Jon para darle la gran noticia.— dice Dereck y sonrió, Jon en definitiva se ha convertido en nuestra figura paterna, sip, el padre de mi ex.