NEGRO AZABACHE

LIBERTAD E ILUSIÓN

CAPÍTULO X

—No lo entiendes, Cris, joder, déjame libre—digo de nuevo sentado en la cama, ella organiza su armario colocando mi ropa, nos acabamos de mudar, pasamos un mes en la casa de su padre, nos ha dejado marcharnos cuando me gradué, hubiese deseado ver a esa peli negra con esa sonrisa y el diploma en su mano, celebrarlo con una noche loca y terminar juntos en la cama... pero eso no paso, solo sucedió en mi mente, y se quedó allí.

Por que siempre pienso en ella, por que Nuestra historia debió ser diferente, no merecía terminar así, tal vez nos faltaron ganas y sobraron miedos, pero no era Justo que doliera, por que a pesar de que cada quien se fue por su camino, yo seguí, pensando en ti.
Jairo Guerrero.

—Hablas como si estuvieras prisionero—comenta Cris mirando un vestido que no sabia que tenia.

—¿Y no lo estoy?—

—No, no lo estas, estamos formando una familia, pronto nos casaremos, hemos aplazado la boda , por ti—dice sentándose delante de mi

—¿No lo entiendes? No soy feliz, había encontrado la felicidad, podría dejarte perfectamente pero tu padre mataría al mio, sus amenazas son reales y no quiero perder también a mi padre—digo desesperado.

—¿Encontraste la felicidad? ¿Con quien? ¿Esa peli negra bajita, morena y ridícula.?—

—No hables así de ella.—Gruño con frialdad—A ella la amo, joder, Cris hemos estado un año juntos, me dejaste, lo agradecí gracias a eso supe lo que quería, pero llegaste de nuevo, cuado más necesitaba el dinero y aun no la conocía... lo firme, eso lo acepto, pero mierda, ¿no me ves? Yo ya no soy ese, deje todo, deje la venta de drogas, las peleas, los problemas.—

—¿Pediste tu esencia, cariño?—pregunta y me levanto furioso y frustrado.

—Ella saca la mejor parte de mi, déjame ir, si realmente me amas como lo dices déjame ir, déjame ser feliz—miro por la gran ventana del piso 23.

—No puedo, no quiero que seas feliz con otra ¿Has olvidado nuestros momentos? Éramos felices,  ni siquiera se por que te deje, fue el peor error de mi vida—

—Cris, no más, no sigas con esa visión, estábamos juntos por el dinero, lo sabias: yo estaba contigo por dinero y tu por presumir. Oh vamos, no nos mintamos, no habia amor, no hasta que te enamoraste.—

—Si, ¿y que? Me enamore, ahora podemos estar juntos—insiste y me giro a ella que se ha puesto tras de mi.

—Pero yo no estoy enamorado, no de ti. Cris, no te odio, no me hagas hacerlo, no me prives de la libertad, no me prives de la felicidad, no quiero vivir toda mi vida fingiendo que somos una pareja feliz cuando yo no siento nada por ti. Es fácil: me dejas ir, le explicas a tu padre que no me quieres a mi, yo te lo agradeceré de por vida y ambos seremos felices, encontraras a alguien que te ame, por que no mereces las sobras de amor, mereces a alguien que te ame más o de igual manera que tu a mi. Yo no puedo fingir lo que no,  no puedes vivir engañada, por que cada vez que me beses estaré pensando que beso a otra, cada vez que nos acostemos deseare que seas otra, y tu no mereces eso, no lo mereces eres buena persona, no nos hagas esto—

—¿Y si te dejo ir? ¿Yo que gano?—dice con lagrimasen los ojos por las crueles y verdaderas palabras.

—No ganas nada, pero te liberas del sufrimiento, no creo que sea bonito amar a alguien que no quiere ser amado.—le limpio la lagrima

—No quiero hacerlo, pero debo—solloza—Por favor miénteme, dime que me amas, dame la ultima noche, dame los últimos besos y te dejare libre... no quiero retenerte, no quiero que me odies.—