CAPÍTULO XVIII
ALASKATres toques en la puerta, dos ladridos tras esta y un par de zapatillas, la puerta se abre.
—Alaska...— murmura y se ve tan mal... joder, solo han pasado dos semanas ¿lo hace a propósito para que lo escuche? O ¿realmente lo está?
¿La razón por la cual estoy aquí? Abrí la carta en el fondo de mi cajón:
"No se como empezar... tal vez con un hola. Pero no estamos para eso, mira, Alaska, yo a ti te amo, eres lo mejor que tengo en mi vida y siento haberte roto así, se que no se excusa pero necesitaba el dinero. Sabes que mi vida no ha sido fácil, antes de conocerte solo me interesaba el dinero salir de la mierda de vida que tenía... pero eso no da la felicidad ¿sabes? Puede que la felicidad sea un efecto secundario, temporal, pero la real felicidad es cuando alguien te hace sonreír con tan solo tenerla cerca o simplemente saber que cuando llegarás la verás... cuando con una simple mirada haces que sienta miles de cosas en tan solo un segundo, por que tienes esa capacidad: ver siempre a través de mi, tu ves todo lo que soy y a pesar de toda mi mierda me ayudaste, me apoyaste y, joder, no sabes lo feliz que me hace sentir eso.... Que alguien me eligió a mi, que juzgo tras saber la verdad, que busco la razón y juzgo la realidad, por que así de buena eres, ves a través de todo para encontrar lo que es realmente justo, la verdad...
Te quiero, Alaska, y si nos hubiésemos conocido un poco antes... solo un poco, jamás abría pasado esto, pero tal vez no hubiese pasado nada, y no me arrepiento de conocerte, de mentirte por que si no te hubiese mentido nada entre nosotros hubiese pasado y, joder, eres lo más hermoso que me ha pasado, "eres mi rayo de luz en la tormenta" así como Hasley es para Luke, por que si, me lo leí, solo por ti.
Jamas me arrepentiría, y te juro que volveré, volveré así me hayas dicho "no te esperaré" por que no necesito que me esperes, por que nuestro amor es más fuerte ¿no? Al menos el mío lo es. Por que si hace falta, si me has olvidado, volveré a enamórate las veces que sea necesario por que yo no encontraría la fuerza para poder enamorarme de alguien más y no se si tú lo harías... pero te aseguro, te prometo, que mi corazón solo te pertenece a ti, que yo solo estoy atado a ti con el "hilo rojo" y por favor, cuando vuelva déjame explicarte la verdad. Te conozco: y se que estarás tan a la defensiva y te harás miles de escenarios en la cabeza, pero que no te siegue el dolor, siempre buscas la verdad y juzgas la realidad, escúchame y luego has lo que creas, te esperaré, te recuperaré y te enamorare si es necesario."
—He venido a "buscar la verdad y juzgar la realidad"— digo sin ninguna expresión.
—Yo... yo no... mierda, ¿Quieres pasar?— pregunta y se escucha tan nervioso, ansioso y de alguna manera lo hace ver tan tierno.
—Te escuchó— digo cerrando la puerta con el pie y siguiéndolo a la cocina.
—Vamos a mi habitación, papá está durmiendo en el sofá, día agotador en el muelle de cargas...— habla tan normal... como si no se hubiese ido.
Le sigo hasta su habitación y me siento en el borde de la cama, donde me quede tantas tardes después de ayudar a reparar la casa, cuando él no estaba.
Él empieza a organizar su escritorio lleno de cosas, y veo un folleto de universidad sobre la cama, lo cojo , una universidad buena, de artes cerca de la mía.
—¿Estudiarás artes?— preguntó mirando el folleto
—Quería hacer algo de artes... no se tal vez musica, o fotografía, o tal vez Diseño gráfico— dice organizando
—Para de organizar, ambos sabemos que he visto este cuarto más desordenado— digo entregándole el folleto
—Yo... perdón, estoy nervioso— se disculpa y no digo nada pese a que me parece una bobada que se disculpe.
—¿Empiezas o me voy?— pregunto señalando la puerta.
¿Podrías dejar de ser tan cruel?
¿Podrías ponerte de mi lado?—No se por donde empezar..— se rasca la nuca nervioso y jamas le había visto así, tan ansioso, tan cansado...
—Por donde sea más rápido de explicar.— sugiero
—Pasó antes de venir, teníamos deudas, nos habían quitado la casa, papá había despertado de un coma elíptico, estaba apunto de vender mi moto, un regalo de ella... pero llego, su padre, me propuso un trato: me casaba con su hija tras terminar el instituto.
>>Él era rico, ella era bonita ¿que perdía en firmar? Al fin y al cabo estábamos en la calle, una simple firma y la vida resuelta. Pero vinimos aquí, a terminar mi último año... el que tuve que terminar hace un año, repetí por faltar tanto a clase, por las ventas y todo eso... yo no sabía que te encontraría, lo que me encontraría aquí.
>>Era fácil: terminar el instituto, casarme y la vida hecha, no conocía la felicidad, no sabía que era sentirse querido por alguien que no fuera tu padre, no sabía que alguien podía quererme por lo que era y no por como me veía... pero llegaste tú, a ver a través de mi, tan fácil... una chica distinta, solitaria e increíble. Yo... yo firme, sabía que esto se acabaría, pero no quería, no quería perderte así que te oculte eso, el resto me lo sacaste tú con tanta facilidad... quería que nos quedáramos así, tú y yo contra el mundo, solo nosotros... pero todo lo bueno se acaba ¿no? Llegó mi condena, por que la verdad siempre termina alcanzándonos siempre cuando creemos que la habíamos dejado atrás.
>>Tenia que cumplir el trato, a menos de que ella me liberara... me costó seis meses y tres semanas, pero lo conseguí, me libero y... joder, Alaska, te amo y nunca he dejado de hacerlo, por favor perdóname... no se... no se que más hacer... mierda me duele la manera en que me miras, como me esquivas... me quema como le sonríes y dudas con el castaño. Lo se, ¿vale? Se que mi desastre no pudo con algo tan grande como tú...
>> lo se pero dame una oportunidad por favor... lo único que tengo para ofrecerte son mis locuras y mis desastres, dame una segunda oportunidad para hacerlo bien... por favor—
Mis ojos húmedos no resisten más y deja que una lagrima ruede por mi mejilla.
—Me hiciste tanto daño... pero no logro odiarte, mierda, no puedo, odio lo que me hiciste, pero no a ti... es frustrante, por que si, me confundo con Zam, siento algo por él pero es insignificante al lado de lo que siento por ti...— digo levantándome de la cama y limpiándome las lagrimas con furia—Me abandonaste cuando prometiste que no, y lo se, fue un trato, una firma, pero me lo ocultaste, sabes que lo hubiésemos solucionado, como solucionamos esto... bueno, realmente YO solucione esto, por que tú no querías, tenías tanto miedo que al final el miedo te consumió, mierda, lo hubiésemos solucionado juntos. Pero me mentiste y me abandonaste, hiciste lo único que sabías que tenía más miedo y me dolía tanto.—
—Yo... lo siento, déjame intentarlo de nuevo, te enamorare las veces que hagan falta, te pertenezco, por favor, encendiste tú las cenizas e hiciste que ardiera todo...— pero antes de que siga lo interrumpo
—No lo entiendes, no hace falta que me enamores porque ya lo estoy, pero tienes que arreglar esto, Ian, por que por más que intenté odiarte, alejarme o tratar de no esperarte, una parte de mi siempre lo hará: te esperara, te amara, tan fiel a ti... aprovecha esa parte para demostrar cuánto valgo para ti, si realmente todo lo que nos dijimos fue cierto. Demuéstralo a esa parte que intenta odiarte, a esa que tanto lastimaste. Pero esa parte que te ama no durará mucho si tardas, hazlo rápido y demuéstralo, hazme creer que realmente todo fue real, cada "te quiero" y cada mirada... no quiero forzar más, no quiero luchar por algo que es inútil y doloroso.— le doy una última mirada y salgo de casa con Muchacho tras de mi.
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NEGRO AZABACHE
Teen FictionLIBRO II DE "MIEL Y TORMENTA" ---------------------- Mientras Alaska corre apurada a su clase, a pesar de que llega veinte minutos tarde. Ian camina por los grandes pasillos del aeropuerto, buscado su número de vuelo. Está tan ansioso, volverá a ve...