Gris Oscuro

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- Estás imaginando cosas Harry - Hermione negó con la cabeza y Ron asintió sin siquiera estar prestando atención, como era usual.

- Es que, él es diferente - comenzó -... él no molesta a nadie, no estudia en casa con sus compañeros, no pasea por los pasillos a menos que no haya nadie alrededor, está siempre solo, apenas habla, no me ha insultado, ni amenazado, ni empujado, joder ni siquiera me ha mirado! -

- Por qué te irrita? al fin Malfoy no está molestandote, cuál es el problema? - Hermione señaló y Harry titubeó en su respuesta.

- N-no, no lo sé. Es sólo que algo anda mal, algo trama, algo está pasando con él - Los tres suspiraron con diferente pesar.

- Pregúntaselo- Ron aportó brillantemente- Qué? el quiere saber, nosotros no leemos mentes - Miró con obviedad a Hermione.

Harry no esperaba que lo comprendieran, ellos no tenían esa conexión extraña que compartía con el Slytherin, tantísimos años de molestarse no eran equitativos para los tres. Harry mantenía un vínculo profundo, comparable con las intensas miradas que ambos se arrancaban.

La lucha de su custodia en realidad no fue tan corta como hubiese querido, un montón de familias se habían prácticamente peleado por obtener su custodia, una extraña rutina de desvelos fríos acompañaron ese momento de su vida. Estaba aterrado de encontrar un peor lugar en el que se había encontrado pero también estaba aterrado de encontrar un lugar donde se sintiera a gusto para después ser arrancado de esa familia como si no importara nada lo que pudiera llegar a sentir.

El deseaba desde el fondo de su corazón, no tener que compartir mucho tiempo con sus tutores. Pero cuando él a tenido lo que ha querido?

- Señor Potter, el director ha llamado por usted - La profesora mantenía el rostro serio mientras comunicaba aquel mensaje, viéndola de cerca se veía algo agitada como si hubiese corrido a buscarlo lo cual, obviamente, era imposible que pase.

Harry asintió y en medio de la nebulosa en su cabeza y el murmullo incesante de todos los alumnos a su alrededor, se abrió camino andando casi a tientas. Sus dos amigos lo dejaron ir con gestos compungidos, sabían de ante mano que Harry realmente no deseaba irse del colegio más por ordenes de las autoridades, tenía que hacer una vida fuera de ella para "recuperar la cordura"

No es como si nadie supiera que tenía vívidas pesadillas por las noches que lo despertaban atemorizado, nervioso y susceptible. Lo que paso en casa de sus tíos fue producto sel pánico. Parecía un sueño y los momentos felices de su vida derrepente ya no eran suficientes frente al mal, los cálidos recuerdos se emborronaban y tornaban grises espejos rotos que ya no significaban nada.

Que más podía hacer? Estaba solo en un mundo desconocido del cual apenas estaba enterado de las cosas que allí habían, dónde no conocía ni entendía la mayoría de las reglas o la moral que manejaban. Teniendo en cuenta sus años ya debería saberlo sin embargo, batalla tras batalla la gente parecía olvidar que aún era solo un niño, un mocoso sin padres ni pariente mágico que lo guiara fuera de la oscuridad de su mente ya adulta y solidificada.

Había sentido menos de lo que había sufrido, si es que aquello tenía sentido dejandolo fuera de su mente. Honestamente hablando, que tarea tenía la " familia de tutores" que querían darle? Darle una casa donde vivir cuando el colegio acabe, y qué más? Pensaban adoctrinarlo para que no se salga de la fila de ovejas obedientes, ahora que estaba creciendo? O era acaso atontarlo de alguna manera porque en realidad el ministerio estaba enlazado con Voldemort? es que acaso alguna vez había sido diferente a eso?.

Tenía más ideas de la política muggle antes, incluso siendo un niño. Si entonces era igual en el mundo de la magia entonces aquel último pensamiento tendría sentido. Tal vez necesitaban tenerlo vigilado o simplemente lejos.

Dando la vuelta en una esquina lo encontró otra vez, sin embargo el platinado paso por su lado sin voltearlo a ver, Harry apretó la mandíbula y continuó como si aquello no hubiera encendido una hoguera de frustración y rabia en su pecho. Por qué demonios actuaba así con él?

Harry sentía que a la mínima provocación iba a maldecir a alguien y se sorprendió por ese pensamiento repentino. Una vez estuvo en el tranquilo espacio donde su director se paseaba intentó calmarse, el hombre era bueno para leerlo de arriba a abajo con apenas un pequeño vistazo.

-Me llamaba, Señor? -

- Harry! por supuesto, entra -

El prefería no hablar acerca de la nueva apariencia que el anciano había adoptado, si bien entendía que era realmente él solo que más joven , no comprendía porque era importante para el sabio cambiar de esa forma.

Harry se sentó frente a él obviando el lío de libros flotando alrededor y en el suelo, el director se veía más... risueño.

- Te llamaba para saber, si había llegado tu carta - él finalmente se sentó y tomó una pluma del escritorio.

- Lo hizo - Se removió incómodo recordándolo.

- Qué es lo que tu tutor te ha informado? -

-Debo decirle todo lo que hable con mi tutor? -

- No, pero la primera carta es importante, principalmente en éstas fechas donde los alumnos tienen permitido volver a su hogar-

- Esa casa, no es mi hogar -

-Harry-

- No lo es, al menos no aún, y realmente no tengo la obligación de celebrar ninguna fecha con nadie -

- Entiendo -

- Lo hace? - El tono de la conversación se había disparado después de su voz sarcástica llenando la pregunta - En realidad alguien en este mundo me entiende un poco? -

- Harry si lo que deseas es volver con tus tíos-

- No, pero no entiendo porque es tan importante ser el adulto que jala de la correa en mi cuello -

- Confundes las cosas -

- No lo hago, pelearon por mi como si fuera un... un...ni siquiera sé que demonios puede ser comparado conmigo - Harry se levantó de su asiento - Yo fui criado para la guerra, criado para estar rodeado de peligros y usted fue de los primeros que me empujaron al abismo-

- Y-yo no -

-...si tanto querían adoctrinarme me hubieran enviado a una de esas familias pura sangre cuando era un bebé y no con una familia que no me quería-

Dumbledore inhalo y exhalo con cuidado observando la postura del adolescente, levantó el papel que descansaba en su escritorio y relamio sus labios preparándose para romper el silencio tenso.

- L-lo siento - Le gano de ante mano, Harry.

- No debí, responderle de esa manera - finalizó suspirando y sentándose en su silla otra vez.

Albus titubeó al hablar aun cuando sabía que lo que iba a sentenciar iba a ser lo correcto, lo que ese joven necesitaba en ese momento y confiaba, confiada desde el pensamiento más esperanzado que ha tenido en años en que su amigo se iba a encargar de llenar a ese jóven de espíritu otra vez. Se avecinaban tiempos oscuros, y tenían que estar preparados. 

- Señor Potter, irá a la casa Pendragon durante éstas vacaciones -

Harry contuvo el suspiro resignado, y asintió.

2 Coins nd 2 Enemies [Merthur][Drarry]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora