Tentación. No te enamores de tu hermanastro ©

Capítulo 17

Hello!

Primero de todo, siento este tiempo sin capítulo. Quería subir rápido de esta historia pero lo cierto es que el estudio, las prácticas y la realidad se me echó encima...

¡Pero aquí está el siguiente capítulo! Que espero que os guste :D SIn vosotras esta historia no tendría vida ♥

Recapitulando lo sucedido en anteriores capítulos...

Erin pelea con Jaden porque ella interfiere en una pelea. Eso la hace darse cuenta de que ya tiene suficiente y lo suyo con él jamás podrá ser, decidiendo cortar "Jerin" por siempre. Evan, su ex, acude en su ayuda, y para salir de un problema con su padre le besa, diciendole que vuelven a estar juntos. De alguna forma Evan y Erin deciden volver a estar juntos.

Hay un rumor por el instituto de que Jaden y Erin están saliendo juntos, esparcido por Jodie, una medio ex de Jaden. Evan le dice a Erin en el último capítulo que se encargará de disipar dicho rumor...

Y con esto y un bizcocho...

CAPITULO 17

A la mañana siguiente chequeé mi ropa dos veces en el espejo antes de salir, buscando cualquier distracción que me evitara bajar a la cocina y enfrentar a Jaden. Me daba cuenta de que tenía miedo y nerviosismo por verle, pero al mismo tiempo sabía que tarde o temprano debía enfrentarlo y quitármelo de encima.

Esa era una de las razones por las que había decidido pasar página y seguir con mi vida sin él en ella. Bueno, al menos todo lo que se pueda sacar de tu vida a alguien con el que compartes vivienda. Nunca podía estar en buenos términos con él. Siempre era un tira y afloja que nos hacía daño a los dos. Esta era la mejor decisión, estaba segura.

Me coloqué los cuellos de la chaqueta y alisé mi camisa blanca, tomé una profunda respiración, aparté el pelo rizado de mi cara salí de la habitación, dispuesta a enfrentar el día con una gran taza de café que hiciera de sustituto del vodka que mi cuerpo me pedía.

Notaba mi estúpido corazón palpitando en la garganta por cada paso que daba acercándome a la cocina. Mis zapatillas de tela parecían demasiado ruidosas contra la madera crujiendo del suelo. Escuchaba ruido de voces en la cocina, y podía diferenciar claramente a Kyna y Jaden hablando sobre el castigo que mi padre nos había puesto a él y a mí y que ambos nos habíamos saltado.

—No es tan difícil —aseguraba Kyna—. Tan sólo quédate en tu cuarto escribiendo y la semana se te pasará más rápido.

—Nunca he estado castigado —rectificó él, con tono enfadado y arisco—. Y sólo es una fiesta, ni siquiera se dará cuenta.

Torcí el gesto terminando de acercarme a la cocina y parándome en la entrada. Si estaba planeando ir a una fiesta durante la semana, con mi padre y su castigo recientemente impuestos, iba a tener que jugar muy bien al escondite. Al menos yo contaba con la distracción de Evan.

Sentí la sangre drenarse de mi rostro al acordarme de Evan. Saqué el teléfono del bolsillo de mis vaqueros para consultar la hora. En menos de diez minutos estaría en la puerta de casa, esperándome con la moto encendida y un casco en la mano. Hasta ahí todo bien, el problema recaía en que no quería que Jaden nos viera. Ayer mismo le había dicho que lo nuestro, lo que quiera que hubiese, o fuese a haber en un futuro, jamás volvería a existir. No me parecía correcto restregarle por las narices que ahora Evan y yo volvíamos a salir. O al menos a intentarlo.

Una mano batiéndose hacía mí desde la mesa de la cocina me hizo salir de mi ensoñación. Kelly, la prima de Jaden, estaba mirándome y sonriendo ante mi confusión. Me recompuse rápidamente, guardando de nuevo el teléfono en el bolsillo y devolviéndola el saludo. Había conversado con ella la noche anterior durante la cena, parecía una chica agradable, y por lo que sabía había estudiado en nuestro instituto.