Empecé a dudar, no era normal. Ambos no nos tratábamos como una simple amistad. Todo empezó aquella vez que hablamos de nuestro futuro. Más de una hora..."¿Qué quieres estudiar?" "¿En qué trabajarás?" "¿Qué piensas hacer?"
Respondí todas tus preguntas sintiendo tanto a la vez, realmente te importaban mis respuestas, y me pedías más.
Más preguntas sin respuestas, como si supiéramos realmente lo que haríamos.
Pero una de tus preguntas, en concreto, me llamó la atención:
"¿Qué quieres ser?"
No me lo pensé dos veces.
"Feliz, Jaden", respondí, "Seguir siendo feliz".
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Todo lo que ya no te diré
Short StoryEmma y Jaden. Sí, esos eran sus nombres. ¿Su historia? Un nudo. Un hilo enredado con muchos intentos de ser cortado para siempre. Un hilo probablemente destinado en convertirse otra cosa más dentro de un cajón con llave. Pero algunos aún dicen que e...