Pasó el tiempo. Bastante, en realidad.Sí, ya ha pasado un año. Un año que dejamos de hablar.
Te recuerdo con cariño y sin rencores como una vez me prometí que haría. Estoy cumplimiento mi promesa.
Fui al lugar del que tanto hablábamos, estoy muy feliz. Muchísimo.
Pero no te voy a negar que una pequeña frase rondaba por mi cabeza antes de ir allí los primeros días:
Dijiste que vendrías conmigo.
Gracias por enseñarme que no todos cumplimos lo que prometemos.
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Todo lo que ya no te diré
KurzgeschichtenEmma y Jaden. Sí, esos eran sus nombres. ¿Su historia? Un nudo. Un hilo enredado con muchos intentos de ser cortado para siempre. Un hilo probablemente destinado en convertirse otra cosa más dentro de un cajón con llave. Pero algunos aún dicen que e...