Abigail
Pasados tres días de estar aquí encerrada, encadenada y a oscuras Colby no ha vuelto al sótano después de traerme ropa, la cual consistia en ropa interior femenina, o sea, un brasiér y un culotte negros también un conjunto, camisa y falda de color rojo.
No tenía idea de la hora, escuché un timbrado de celular, ¡Es mi celular! Hoy es mi cita con el dentista, era el tono de mi recordatorio.
Las cadenas impedían alcanzar mi celular, tuve que hacer un gran esfuerzo para alcanzarlos. Ví una escobeta larga, lo suficientemente larga para alcanzar mi celular que sonaba desde el saco que Colby olvidó aquí. La escobeta estaba a mi alcance, así que no tuve problemas en alcanzarla. Estiré la escobeta hacia mi celular, o sea, hacia el saco de Colby acercándolo a mí. Tomé el saco con la escobeta tratando de levantarlo en el aire con la misma, la atraje hacia mí y ¡shazam! La tengo.
Saco mi celular que aún suena de su bolsillo, hay otro celular en el otro bolsillo ¡Es su celular! No es que sea curiosa ni chismosa, sólo necesito saber que quiere de mí este desgraciado. Lanzo el saco al suelo cerca mío y reviso mi celular.
Modo avión activado. Ahora entiendo porqué nadie ha intentado llamarme. Abro el recordatorio para que deje de sonar, desactivo el modo avión y reviso mis mensajes. Demonios, están todos leídos! Él leyó mis mensajes y ha revisado más allá. Oh dios mío! Ojala no haya visto aquel video que tengo de Jonathan!! Mama mía.
Sigo revisando... 21 mensajes de voz! Todos de Jonathan!! Borré todo sin querer, sólo me quedó uno... El último.
"Abigail, ya van tres días que no apareces. Dónde estás? Qué ha pasado de tí? Dame alguna señal de que estás bien por lo menos. Sólo eso necesito saber. Sé que estoy empezando a molestarte mucho pero es porque me importas y ... - se oye un suspiro - tal parece que haces esto para evadirme, verdad? Has leído la carta? Está en tu bolso rojo, el bolso que tanto te gusta y lo llevas a todas partes contigo. Si la leíste, no importa... y si es que no, tampoco. Sólo quiero saber si estás bien, por favor!" Se oye un sollozo y termina el mensaje - Fin del mensaje - habló la voz femenina.
Me quedé en shock! Tan tierno mi Jonathan. Lágrimas fugaces resbalan mis mejillas. Recuerdo que dijo que quería saber si estoy bien y que le importo.. Esperen! Una carta? En mi bolso? Oh no! Mi bolso lo dejé sobre la mesa del escritorio de Colby. Sólo espero no la haya leído o no haya hecho nada con mi bolso favorito porque lo arrastro de los huevos de aquí hasta mi casa, lo juro.
Me empiezo a preocupar por la carta, y si Colby lo encontró y lo leyó? Qué haré ahora yo? Le responderé a Jonathan. Muchos pitidos que indican que no contesta su celular.
"HEY! Soy Jonathan. Deja un mensaje y te responderé dependiendo del asunto... después del tono"
- Jonathan, soy Abigail. Estoy atrapada, encadenada en el sótano de la mansión del señor Colby López. Por favor, manda a la policía porque este señor está mal de la cabeza, me hirió la pierna izquierda cortándome con el filo de un cuchillo y... - aguanto un grito ahogado - me violó! - sollozo - Por favor, haz lo más rápido posible! Te quiero mucho! - exclamo y cuelgo.
Espero impaciente a que Jonathan responda pero nada. De repente, gritos provenientes de arriba llegan a mis oídos.
- Abigail! Abigail, dónde estás? - es Jonathan, pero qué hace aquí?
- JONATHAN! - grito a todo pulmón - JONATHAN, AQUÍ ESTOY! - parece que lo hago en vano porque no me escucha.
Luego recuerdo las palabras de Colby: "Estarás encerrada, encadenada en un sótano dónde nadie te oirá gritar". Empiezo a llorar, dejo caer mi celular en el suelo y cubro mi rostro con mis dos manos para llorar.
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I am machine
FanfictionColby López, un hombre multimillonario que tiene una extraña afición hacia los objetos punzantes y las cadenas. Abigail Nichols, una jóven estudiante de periodismo a punto de graduarse. Colby cree ser una máquina que no siente dolor, no siente amor...