Capítulo 43 ~ Quiero que seas mi chica

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Susy

Llego de la biblioteca después de estudiar con mis amigas para la exposición sobre el sistema solar en mi colegio, y me encuentro con que mi hermano leía mi diario. Lo peor de todo es que él al leer la parte en la que digo que me gusta, me besa y me dice "este será nuestro pequeño secreto". Ahora es cuando me pierdo!

Bajo al comedor para comer, están Papá, Mamá, Abigail y Seth comiendo aún. Mamá me sirve un poco del arroz con carne en mi plato, le sonrío agradecida y empiezo a comer.

Papá y Abigail dejan el comedor y suben las escaleras. Mi abuela le dijo a mi mamá que ella se haría cargo de levantar la mesa y lavar los cubiertos. Me daba pena mi abuela Helena! Ella siempre se hace cargo de todo, como si fuera la empleada de la casa.

Mamá subió también y Abuela fue a lavar los cubiertos en la cocina. Seth y yo estábamos sólos comiendo aún, a cada tanto Seth me miraba sonriente, cosa que ignoraba.

Cuando comí todo, me levanté de la mesa y subí a mi cuarto otra vez. Al pasar por la oficina de Papá no me gustó lo que escuché.

- Quiero que Lia se vaya, y quedarme con Susy. Es que ella trata de... ya sabes! - le dijo Papá a Abigail.

- No seas tan duro! Imagínate el dolor para la niña si la alejas de su madre. No le hagas a Susy lo que te pasó a tí. - lo regañó Abigail a mi defensiva.

Sin más, corrí a mi habitación y salté en la cama a llorar. Mi papá odia a mi mamá! Escucho pasos acercarse a mí. Y quién se atreve a molestarme ahora?

- No llores, nena. - tenía que ser Seth.

- Púdrete! Tú no sabes nada. - lo repudio. Él toma mis brazos y los saca de mi cara. Me levanta haciéndome sentar en la cama a su lado.

- He dicho que no llores! - exclamó como si me obligara a hacerlo.

- Y yo he dicho que te pudras! - exclamé fastidiada.

- Eso no decía en tu diario. - responde poniendo una expresión pícara en su rostro.

- Sál de mi cuarto! - grito empujándolo de la cama sin moverlo un centímetro. Él me detiene empujándome a la cama, se pone encima mío y acerca su rostro al mío.

- Sé obediente, o tendré que castigarte. - susurra en mi oído. Ese comentario me pareció algo fuerte. La verdad no entiendo a lo que se refiere.

- Quítate, idiota! - exclamo golpeándolo en el pecho.

- Ya verás en la noche! - susurró de vuelta. Se levantó de encima mío, salió de mi cuarto y me sentí más aliviada.

Pero a qué se refería con "ya verás en la noche"? Me limito a no pensar en eso y seguir leyendo el libro que tengo que exponer dentro de cuatro días.

Colby

- No se hable más! Quizá llevar de paseo a Seth y Susy sirva de algo. - le comento a Abigail, con quien hablaba en la oficina.

- Ellos empiezan su adolescencia, Colby. Ya no son los dulces niños que criamos entre todos. - comenta ella en respuesta.

- Crees que a ellos no les gustaría pasear un rato con su padre? - pregunto asqueado.

- Me refiero a que ellos ya no querrán hacer cosas de niños. -.

- En síntesis estás diciendo que pasear con su padre es cosa de niños! - prostesto cruzándome de brazos.

- Tómalo como quieras! Es más, haz el intento y comprobarás lo que te digo. - dice ella abriéndose paso para que salga al pasillo hacia sus habitaciones.

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