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A la mañana siguiente el pelinegro toma una ducha y decide preparar algo para que él y Liam puedan desayunar, fué Louis quién le llamo para avisarle que Liam había "aceptado" el trabajo, cuando por la noche llegó y trató de conversar con Liam lo encontró en la pequeña sala, dormido rodeado de varias notas, sonrió y lo  llevo a la habitación.

Recién estába sirviendo el café, cuando Liam pasa por la cocina apresurado colocándose los zapatos.

— Zee! Se me ha hecho tarde, — explica Liam mirando al pelinegro, deja un rápido beso en sus labios y agrega,— me voy, deséame suerte!— pero antes de que el pelinegro diga algo Liam ya está saliendo del departamento.

Zayn sonríe, ama ver al castaño motivado, — Suerte!— dice aunque sabe que el castaño no lo escuchá ya.

[...]

Cuando Liam llega a la estación es recibido por Louis quién le ofrece un poco de café mientras inician, el en verdad trata de ponerle buena actitud a su nuevo trabajo, ayer fué un buen día, sin embargo también recuerda lo mucho que le costó pensar en un tema que abordar para el público, hizo notas pero ahora sentía que ningúna servía, comienza a sentirse mal y no sabe con qué cara decirle a Louis que no tiene nada para el día de hoy.

<<De nada sirve que uno tenga la mejor actitud, piensa, cómo si con una buena actitud se me fueran a ocurrir más ideas, ayer me mantuve positivo y de nada sirvió, no se me ocurrió nada importante, nisiquiera sé porque le pedí a Zayn que me deseara suerte ...>>

Louis ya está saludando a la audiencia, y entonces Liam no tiene de otra que ir junto a él, entonces el ojiazul se dirige al castaño.

— Hoy también nos acompaña Liam, ¿Cómo estás Liam?— pregunta el ojiazul.

— Mal, — suelta sincero, y el ojiazul rie.

— ¿Mal?—pregunta.

— Sí, mal, — dice Liam, —para que te voy a mentir.

— Bien, cuéntanos, ¿Qué te ocurre?— continúa Louis.

— Pasa que, — Liam hace una pausa, no piensa decir al aire que no tiene nada preparado, — odio el optimismo, — suelta, — me parece una forma estúpida de encarar la vida, digo, no siempre por mantenerte ahí positivo te va a salir todo bien, — se desvía un poco pero continúa hablando, —el otro día me encontré a un compañero de la Universidad, al cuál le chocaron el coche, el otro tipo se pasó el semáforo y le destrozó el auto, él se fracturó la pierna, imagínate la suerte de éste tipo que incluso estuvo a punto de perder la mano porque la tenía recargada en la ventana, cuando lo encontré yo le dije, — oye que pena con lo de tu accidente, y el me dice, — no Liam, fué una desgracia con suerte, — el castaño hace una pausa, —— yo quiero que alguien me explique el componente de suerte en éste contexto, ¿No? Porque yo la verdad no encuentro a qué se refiere, digo, cuando te va mal, pues lo menos que uno puede hacer es quejarse.

— Si algo no te está gustando dilo, a mí la gente que se queja me cae bien, de verdad no permitas las cosas que no te gustan, quejate.

Louis ríe, y toma su turno para hablar, — Buen punto Liam, pero aquí cabe resaltar que aquí nosotros si tuvimos una gran suerte, — Liam lo mirá,— es una suerte de que hayas llegado a está estación de radio.

El castaño no sabe exactamente qué responder, incluso a él le parece un poco absurdo que con temas poco preparados haya logrado "conectar con el público" — palabras de Louis.

— En un momento continuamos, — dice el ojiazul antes de enviar a corte y aprovecha para charlar un poco con Liam. Las redes sociales de la estación estuvieron muy activas el día anterior, el público quiere conocer a Liam, así que quiere consultarlo con el castaño, lo que menos quiere es molestarlo.

Del otro lado de la radio, Zayn toma un café en su oficina mientras escucha a Liam, la sonrisa nunca abandona su rostro, Daniaal que entró para llevarle unos documentos también se queda un momento escuchando al castaño, el pelinegro le hace señas para que lo deje sólo.

Por otra parte Harry también ha encendido la radio, mientras termina su desayuno sonríe con las anécdotas que cuenta el castaño a lo largo del programa, suele desviarse cada vez del tema pero puede darse cuenta de lo auténtico que está siendo Liam.

[...]

— ¿Y esa sonrisa Zayn?— pregunta Daniaal más tarde, — ¿es porque tú plan va a la perfección?

— No, yo, — Zayn trata de ponerse serio, solo han pasado un par de días y aunque él castaño no es el mismo de antes, ve cierta chispa en él que no le permiten estar seguro de su decisión, — tengo mucho trabajo, y tú también, así que apresúrate a enviar las estadísticas del último trimestre, las necesito.

Daniaal rueda los ojos pero se va.
Zayn lo agradece, y retoma sus actividades, entonces su teléfono comienza a sonar, es Liam, su corazón no puede evitar acelerarse.

— Zayn, — ¿Suena alegre? Eso lo sorprende pero sonríe para sí— voy saliendo de la emisora, ¿Comemos juntos en algún lugar? Si quieres yo invito.

El pelinegro está tentado a aceptar pero recuerda el trabajo que tiene que enviar, duda antes de negarse, — Liam, no puedo, tengo que preparar un reporte para hoy, en un par de horas llegan unos clientes importantes, debemos convencerlos de que inviertan en la empresa, sabes cómo es esto, — hace una pausa, — de verdad lo siento.

— No ni hablar, — dice el castaño, — no te preocupes, te veo en la noche, espero que las cosas salgan bien con los clientes.

Se despiden y Liam decide buscar algún restaurante, de verdad tiene hambre y pocas ganas de cocinar. Piensa en ir por sushi, así le puede dejar un poco a Zayn para la cena.

Apenas va a ordenar que se lo pongan para llevar cuando una figura conocida se detiene justo a su lado.

— ¿Otra vez tú?¿Qué hacés aquí?— dice mirando a Harry.

— Solo tenía hambre, — dice el rizado, — ¿Vienes sólo? Sí es así, podemos comer juntos.

— No, gracias, — dice el castaño.

— Vamos, — insiste Harry, — me gustaría hablar contigo.

— ¿De qué?— lo cuestiona Liam.

— Uhm, ¿Tema libre?— dice el rizado, — quiero saber más de ti.

— Mira, pierdes tu tiempo, soy casado.

— Y yo soy acuario.

Liam ríe, — ¿Porqué no mejor te vas a comer con mis vecinas? Les encanta todo esto de los horóscopos.

Harry niega, — Difícil que a alguien cómo tú le vaya bien el pesimismo, — dice el rizado, — quiero comer contigo porque necesito compartir con alguien mi odio a los gandallas, a los hipócritas, y a los optimistas, no los soporto.

Liam lo mirá, — Por supuesto, — rueda los ojos, — escuchaste mi programa.

— Sí, — sonríe Harry, — te reconocí por la voz, — miente, — ya qué no me dijiste tú nombre, y sabes ahora es mi programa favorito...

Liam ríe pero aún duda,
— Está bien, comamos juntos, pero cada quién paga lo suyo— advierte.

Harry rie, pero asiente y lo sigue hasta la mesa qué el castaño elige, estába buscando está oportunidad y la va a aprovechar al máximo...






¿Qué tal el cap? 🤭

Buscando un novio para Liam Donde viven las historias. Descúbrelo ahora