Capítulo 10.

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Me llevé a mi hermano a la enfermería. Allí una vez más tranquilos intenté explicarle la situación con Will.

-Te agradecería que me explicaras qué tienes con William Tanner.-Se levantó de la silla.

-Somos compañeros de clase,nada más.

-Y lo del hospital?Y ahora?Te gust...-Sabía lo que iba a decir así que le interrumpí.

-No. No Elliot,no me gusta. Me parecía simpático nada más.

-Simpático? Un Tanner,simpático?

-Elliot ya está.

-No Kate,no está.

-Sí Elliot. No quiero hablar más de esto y me quiero ir a casa por favor.

Elliot cogió mi mochila y la suya y salió de la sala,le seguí hasta que llegamos al coche.

Él subió,pero yo me quedé fuera.

-Subes o qué?-Me abrió la puerta desde dentro.

-Me vas a dar la charla?

-Sube si quieres ir a casa.

-Elliot!

-Sube!-Hice caso y subí al coche.

Todo el camino hasta casa fue en silencio,gracias a Dios.

Entramos a la casa y me dirigí a las escaleras.

-No vas a comer nada?-Cerré la puerta de mi habitación de un golpe. A la vez que pegaba un grito de desesperación.

-Estas loca!-Fue lo último que escuché de mi hermano.

Mi teléfono comenzó a sonar,pero corté la llamada,no quería hablar con nadie. Ni siquiera miré quién llamaba.

Me cambié,me puse unos shorts grises como sports y una blusa de tirantes negra. Me tumbé en mi cama,me puse mi música y me quedé dormida al son de Two trees de mi querido Ludovico;es mi pianista favorito. Hace magia con sus manos...

La puerta sonó a eso de las 5.30,pero la ignoré;y no volvió a sonar hasta las 8.54 de la noche. Había dormido casi siete horas...esta noche no dormiría.

-Kate.-Abrí la puerta

-Mamá ha llamado?

-Sí.

-Y bien?

-Esta preocupada por ti. Hace días que no habla contigo y quería saber cómo estas.

-Gracias. Algo más?

-No soy tu recadero. Podrías salir de esta maldita habitación en algún momento no?

-Déjame en paz.-Iba a cerrar pero Elliot puso su pie en medio y entró.

-Qué has hecho todo este tiempo eh?-Caminaba hacia atrás ya que él avanzaba hacia mí.

-Lárgate!-Seguía yendo de espaldas.

-Qué has hecho aquí eh?! Dime!-Su tono de voz subía poco a poco.

-Elliot!

-Te has estado rajando?!-Me agarró el brazo,pero yo tiré de este para que no viera nada.-Has estado vomitando.-Me golpeó el estómago.

-Elliot!-Comencé a llorar.

-Cómo te atreves a si quiera nombrar mi nombre?Con esa boca sucia de vómito.-Me choqué con la pared y él me agarró la cara con una mano por las mejillas.

-Elliot!-Le empujé llorando con rabia. Intenté avanzar hacia la puerta,pero el me agarró por la cintura y me tiró al suelo.

-Eres una puta!No te mereces estar en esta familia!Estas sucia. Has manchado nuestro nombre. Te vas acostando con cualquiera. Como para no.

ELLIOT!-Me levanté.-Para!-Cogí aire ya que el ataque de ansiedad que estaba teniendo no me permitía respirar bien.-Por qué me dices estas cosas?-Lloraba desesperadamente.

-Me da asco mirarte. Hazme un favor y por el resto de nuestras vidas haz como si no fueras mi hermana.-Se marchó y cerró la puerta.

Mi respiración no era normal. De hecho creo que respirar era los más complicado en este momento. Sentía como mis pulmones se cerraban y como mi cerebro se colapsaba. Quería gritar y golpear cosas. Pero a la vez sentía que mis fuerzas eran las mínimas.

Entré rápidamente al baño y me senté en la bañera. Accioné el agua y dejé que cayera sobre mí. Cogí mis pastillas y me tomé tres. Sé que son más de lo normal,pero quería pararlo ya.

Cerré mis ojos y me tumbé en la bañera;sentía como el agua caía sobre mis ojos cerrados y se derramaba por todo mi cuerpo. No me importó mojar la ropa. Nada me importaba en este momento. Solo quería parar el dolor.

Y así fue,después de una media hora o un poco más,mi respiración se había normalizado,y mis ojos ya no derramaban lágrimas. Pero yo seguía tumbada,el agua ya no caía directamente a mis ojos así que los tenía abiertos. Miraba el techo mientras pensaba en todo lo que mi hermano me había dicho. Y tenía razón...no debería estar aquí. Yo solo traigo problemas...

Por mi mente pasaba todo tipo de pensamiento. Me sentía horrible...y quería que parara.

-solo quiero dejar de sentirme triste o mal todo el tiempo...-Dije en un hilo de voz.-Cuándo se volvió todo tan complicado?

Mis pensamientos suicidas habían vuelto...los cuales traían mis acciones suicidas...

Me levanté como pude y cogí mi cuchilla del cajón del armario. Me volví a sentar y saqué mi brazo de la bañera. No dejaba de mirar el último corte que me hice. Estaba muy cerca de la vena principal en la muñeca...pero no había profundizado lo suficiente.

Comencé a seguir el camino que recorrían las venas con la cuchilla,pero sin hacer presión. Era como si estuviera jugando...con mi vida...

Acerqué de nuevo la cuchilla a la vena principal,e hice la presión justa como para que la sangre comenzara a salir. Ya no se hacía las tres burbujas de sangre que se hacían antes cuando el corte era menos profundo. Ahora mi brazo se había manchado por completo de sangre. Pero era raro...ya no sentía ningún alivio...ni dolor que detuviese otro dolor...

Volví a hacer otro corte,este un poco más arriba. Pero nada. Solté la cuchilla,la cual se quedó flotando en el agua.

No sabía como parar. De pronto empecé a rascar mi brazo,y cada vez lo hacía más fuerte,hasta que conseguí que saliera sangre. Esto sí me tranquilizó un poco más,hice uno más y me tumbé de nuevo en la bañera,la cual estaba llena de agua.. y de sangre.

Lo primero que pensé fue. Por qué me estoy haciendo esto a mi misma. Y luego. Gracias por parar el dolor...gracias. Quiero pararlo para siempre...y la única manera es...

Mis ojos se cerraban lentamente. Pero escuché una voz proveniente de mi habitación. Mierda. No he cerrado la puerta del baño. Pero ahora mismo no me importa. Por fin me estaba yendo,y esta vez no habría nadie para detenerlo.

-Déjame verla!-Se oían gritos del otro lado.

-Lárgate de aquí!-Eran ambos,gritos masculinos.

-No!Kate!

-Que te largues!

-Kate!-La puerta se abrió de golpe y mis ojos ya estaban cerrados. Solo oía,pero poco a poco dejaba de hacerlo.-KATE!

-KATE!

Sentí que movían mi cuerpo ya casi muerto para sacarme del agua. No sabía quién lo hacía. Pero quería decirle que ya era tarde.

Hubo un instante en el que abrí mis ojos muy poco y vi a...Will?cargándome,y sobre él unas luces blancas que se iban quedando atrás según íbamos avanzando.

Pero ya era demasiado tarde...cerré mis ojos y no los volví a abrir...

Por fin. Ya era feliz. Ya podría dejar de estar...rota por dentro.

Broken insideDonde viven las historias. Descúbrelo ahora