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Me levanto temprano al día siguiente para ir hasta la compañía Woo, subo en mi moto y conduzco hasta allá dónde me esperan todo el equipo de maquillaje y vestuario paraa sesión de fotos.

—Hola fea, ¿Cómo estás? —le doy un pequeño golpe en la frente.

—Idiota, llegaste temprano. Yo estoy bien solo algo adolorida, pero espero acostumbrarme a cada vez correr más rápido y mis brazos me duelen más que las piernas —solo me río de ella.

—Debe ser divertido verte intentando usar tus brazos —ella me pega en la cabeza.

—De verdad que eres un idiota —ella cruza sus brazos y entonces me acerco hasta su oído.

—Pues este idiota si que haces que te mojes rápido, nena, tanto quiere que te folle, ¿Verdad?

Ella iba a pegarme pero rápidamente lamo su cuello y ella suelta un pequeño gemido, con una sonrisa victoriosa decido entrar en el camerino para comenzar a vestirme y luego maquillarme. Durante el tiempo que duran maquillandome no veo a Mirae en ninguna parte.

—Otra vez le está gritando —dice una de las chicas del staff a otra.

—Y lo peor es que él no se muestra como es ante el señor Woo —habla la otra así que me les acerco.

—¿De quién hablan? —ellas me miran sorprendidas dudando si decirme o no— ¿No piensan decirme?

—Es la señorita Woo, está allí con su prometido y ese tipo es un idiota que la golpea y sino queremos perder nuestro trabajo tenemos que callarnos —ellas se miran.

Camino con paso firme hacía la recámara dónde está, podía oír las horribles palabras que él le decía a ella y las amenazas, así que abrí la puerta sin siquiera tocar.

—Mirae, ¿Qué sucede? —ella estaba en el suelo con su mano en la mejilla. Corro hasta su lado ayudándola a levantarse— ¿¡Qué crees que estás haciendo!?

—¿Tú quién eres? ¿Y por qué te metes en una conversación entre esposos? —levanto la ceja.

—¿Esposos? —la miro a ella— Amor, ¿Aún no les has dicho a nadie de nuestra relación? —sus ojos se abren de manera descomunal.

—No, perdóname, es que hasta que no me libere de este idiota no puedo estar contigo públicamente y lo sabes —ella se abraza.

—Pero lo que si no te voy a perdonar es que la hayas tocado y menos lastimado —me sueno los dedos— ¿Debería golpearte cómo tú lo has hecho con ella?

—¿¡Qué es lo que está pasando aquí!? —el señor Woo llega al estudio.

—Este hombre golpeó a su hija, mi novia, señor Woo —se que me estoy ahorcando con este mentira pero será algo que tendremos que pretender por un tiempo— Todos aquí son testigos de lo que pasó con Mirae.

Él mira alrededor y todos asienten con la cabeza.

—¿Así que la estabas golpeando?

—No, señor, eso es mentira —este tipo debo golpearlo, suelto a Mirae y lo golpeo con todas mis fuerzas.

—Ya que Mirae jamás se defendió de lo que tú le hacías, esto no es nada, así que deja de llorar como niña, infeliz —le doy otro golpe y cuando estoy a punto de darle un tercero Mirae me detiene.

—Jungkook, déjalo, no vale la pena —ella solo se aferra a mí.

—Te quiero lejos de mi hija, ahora vete antes de que llame a la policía —este tipo cruje sus dientes antes de irse.

—Y ustedes, la verdad es que no sabía que estaban saliendo, pues me alegra mucho que esto esté pasando, hay que ver la fecha de la boda.

—Wow, wow, señor Woo, cálmese por favor, apenas llevo poco tiempo, debemos conocernos mejor antes de llegar a ese punto, ¿Verdad? —mis ojos se van a los de ella.

—Es cierto, papá, como te dije una vez, aún estoy jóven para casarme, por ahora Jungkook y yo estamos bien así —ella toma mi mano y no entiendo porque si sé que todo esto es mentira.

—Está bien, dejaré que ustedes sean los que decidan —le tomo de la mano, él se retira y quedamos solo ella y yo.

—Quiero pedirte disculpas por haber dicho que somos novios, de verdad que no... —ella se lanza a mis labios besándome apasionadamente.

Me sorprende tanto que caigo hacía atrás en el escritorio, sus manos están en mis cuellos y cuando mete su lengua es cuando me vuelvo loco y continúo el beso, la escucho gemir y entonces yo gruño al oírla, ella quita mi chaqueta y está cae al suelo y cuando vuelvo a mis sentidos, estamos en la compañía, así que lentamente detengo el beso, ambos nos mirábamos él uno al otro, sin decir nada.

—Mirae debemos continuar con la sesión de fotos.

—Si, voy... Digo, vamos Jungkook —ella está exactamente igual que yo. Estamos impactados, no sé porque ella hizo eso, pero lo que más me impacta es que me gustó el beso.

Ambos volvemos al estudio y continuamos con la sesión de fotos. Luego Namjoon vino por mí para ir a otro lugar dónde teníamos cita previa, pero mientras salía de allí, no podía dejar de mirarla.

Necesito saber qué rayos paso allá dentro, ¿Por qué lo hizo?

—¿Te pasa algo? —me pregunta Namjoon Hyung, estábamos en el auto después de haber terminado con la reunión.

—Mirae me besó —el frena de golpe, casi me salgo del auto, menos mal tenía el cinturón— ¿¡Casi nos matas!?

—No puedo creerlo —su rostro es entre sorpresa y felicidad.

—Pues yo menos, aún no sé porque lo hizo —él cruza los brazos.

—Es obvio que ambos se gustan, ¿Acaso solo yo lo noté? Vayan ustedes si que son lentos.

—Yo no le gusto a Mirae y ella no me gusta —vuelvo a mirar por la ventana.

—¿Y si es así, por qué te ves tan pensativo? —mis ojos se abren ante la pregunta. Entonces me llega un mensaje de texto.

Bandeja de entrada

Mirae
Tengo que hablar contigo.

MiraeTengo que hablar contigo

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Ride With Me +18 [Completada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora