Ride With Me +18 [Completada]

25

Ya habían pasado tres días viviendo con su hija y aunque ninguno de los dos estaba acostumbrado antes a vivir juntos, a Ellie le gusta más estar con su papá que con su mamá y hoy Jungkook la sacó para que viera las motos, él corre mientras la niña lo ve desde las gradas junto a Namjoon.

Jungkook sigue sin hablarle a Namjoon como lo hacía antes, no puede evitar seguir molesto por lo que él le dijo a Mirae y ahora no puede verla. Después de correr por la pista decide darse una ducha para luego salir a vestirse, su celular brilla y vibra llamando la atención de Jungkook.

Llamada

—Dime... —dice Jungkook, la llamada es de Taehyung.

—Ya averiguamos dónde está, pasaré por tu casa en la noche para dejarte todas las fotos y la información.

—Perfecto, les haré el pago a ambos, gracias por tu trabajo —despues de eso él cuelga.

Por fin, el momento que Jungkook había estado esperando, el saber cómo está actualmente Mirae, ¿Qué está haciendo? ¿Qué es de su vida? Y si está o no con alguien en estos momentos. Al llegar a casa Jungkook pone su energía en hacer la cena, está feliz debido a que tendrá información de Mirae en cualquier momento así que la felicidad le sale por los poros. Y no puede evitar dar un pequeño brinco cuando escucha el timbre de la casa.

—Viniste corriendo, ¿Cierto? —dice Tae riéndose para recibir un golpe de parte de Jungkook.

—Hyung, cállate y pásame los papeles —él los toma rápido y se sienta en el sofá.

—Solo te digo que te prepares para lo que verás allí —eso hizo que él se detuviera en la primera foto.

Ella estaba sonriendo con un hombre de cabello negro y una sonrisa hermosa, él agachado frente a ella dándole un beso en la boca y se nota que ella le está devolviendo el beso. Ella tiene su cabello más largo y se ve más adulta, este hombre tiene una bata blanca.

—Así que... ¿Ella está en Busan en este momento? —él sigue sosteniendo las fotos en sus manos.

—Ella asiste a una institución de rehabilitación, ella está yendo tres veces a la semana, a veces va más seguido, trabaja desde casa y viene a Seúl solo para reuniones de la compañía —Jungkook presta cuidadosa atención.

—¿Él trabaja allí? —es lo único que a él se le ocurre preguntar, hasta que algo peor le llega a la cabeza— ¿Viven juntos?

—Ellos se ven allí en la clínica, él es un doctor y es fisioterapeuta así que la está tratando desde que te fuiste, ella inmediatamente se mudó a los tres veces de irte y entro allí un mes de estar en Busan, ellos también se ven fuera de lo laboral, creo que son novios —Jungkook revisaba las demás fotos que Taehyung le había entregado, y en todas ellos parecían ser pareja, su corazón se rompía cada vez que pasaba una de esas fotos.

—Lo siento, Jungkook —es lo único que Tae puede decir.

—Está bien, gracias por tu trabajo, Hyung —Tae se despide y Jungkook trata de forzar una sonrisa para su hija, así que durante toda la cena trata de crear un buen ambiente, pero cuando llega a su habitación después de haber puesto en la cama a Ellie, rompe a llorar.

*

—Cada vez estás mejor, Mirae —Jimin dice anotando sus evaluaciones— Te dije que no necesitas transplante, que solo rehabilitarte podrías caminar de nuevo, ahora, llámame como me gusta en agradecimiento.

—Oppa —ella no puede evitar reír al ver el rostro emocionado de Jimin, pero a ella se le borra rápidamente la sonrisa cuando en uno de los anuncios, aparece Jungkook.

Jungkook se veía más apuesto, más masculino, su cabello había crecido un poco, estaba más musculoso, supone Mirae que por el boxeo.

—¿Sucede algo? —Jimin pregunta por la cara que Mirae colocó.

—No, para nada, todo está bien conmigo, de hecho, estoy feliz que cada vez más siento como puedo caminar mejor, como cada vez siento más mis piernas, en poco tiempo creo que podré caminar sin nada que me sostenga —él asiente.

—Ya verás que sí, entonces... ¿Este fin de semana vemos una película en tu casa? —Jimin está totalmente sonrojado aquello le parece a Mirae adorable pero en sus pensamientos Jungkook aparece de nuevo, ella se obliga a sacarlo de su cabeza.

Jimin ha Sido un hombre amable y paciente con ella y ella solo quiere devolver todo ese amor que él le ha estado dando hasta ahora, se siente como en deuda, y él no es difícil de amar, ella lo quiere y lo admite pero solo hasta allí, no es amor y ella lo sabe, él no es Jungkook y no quiere decirle porque no quiere romperle el corazón, además de que tiene que olvidar a Jungkook lo quiera o no.

—Me parece perfecto, una película de terror me encantaría.

—Yo buscaré una buena, así te mantendré pegadita a mí —esa frase hacer sonreír a Mirae, Jimin siempre está pendiente de ella, de que no se lastime, de que esté junto a él, de pasar el más tiempo juntos, pero ella, aún así, no está enamorada de él, ella si cree que puede llegar a enamorarse de él, pero el tiempo pasa y ella sigue imaginando a Jungkook.

Maldito sexy hombre.

Jungkook se había metido en lo más profundo de sus pensamientos, le costaba mucho sacarlo de allí, cualquier cosa que ella hiciera le hacía recordar lo que hacía con él, con Jimin ya había estado varias veces pero se sentía incompleta, si llegaba al orgasmo, Jimin es bueno en la cama y apuesto y sexy así que no le cuesta llegar al clímax, pero la conexión que había cuando lo hacía con Jungkook no está, ella evita a todo lo que tiene que ver con él por eso mismo, Mirae ya no confía ni en ella misma, pero a la vez lo quiere olvidar y sabe que Jimin es él hombre que ella había deseado, lo que no entiende es...

¿Por qué su corazón desea a Jungkook?