Capítulo 54

482 25 2
                                    

Narra Sam:

Mi puño siguió sangrando pero ninguno de los dos le dimos importancia. Aunque para ser sinceros, el dolor de mi muñeca cada vez era mayor.

No queríamos movernos más de casa, así que para aguantar un poco más antes de tener que ir al hospital, ____ buscó en su cómoda y encontró una muñequera de cuando se le abrió a ella la muñeca. Me la colocó con sumo cuidado.

Estábamos acostados en la cama. Ella estaba entre mis brazos, la protegía de nuevo. Yo daba cabezazos, apenas era capaz de mantener mis ojos abiertos, estaba taaaaan cansado, que lo único en lo que pensaba era en dormir.

_____:"Sam...".-

____ no me iba a dejar dormir sin antes volver a entablar otra conversación estúpida sobre que esto no era lo que tendría que estar pasando... Seguro.

Sammy:"Dime tesoro.".-

_____ se dio la vuelta quedando cara a cara, antes estábamos en "cucharita". Me miraba a los ojos fijamente, todavía había algo en ellos que no era capaz de descifrar.

Alzó su mano y empezó a acariciarme la mejilla suavemente.

_____:"Sammy.".-En mi cara se formó una sonrisa que me llegaba de oreja a oreja, hacía tanto que no escuchaba de sus labios ese nombre...-."cariño, no puedes dejar todo así de golpe tan solo porque yo te haya dicho que sí. ¿Vale? Vamos a tomarlo con calma. Y me refiero a todo.".-

Simplemente asentí y junté nuestros labios en un tierno y dulce beso.

La abracé tal cual estaba y la pegué aún más a mi y por fin nos quedamos dormidos.

Narra _____:

Eran las seis de la mañana, y ya no aguantaba más rato durmiendo.

Sam, me tenía agarrada por la cintura, parecía que tuviera miedo por que me fuera a ir de nuevo, cosa que ya no volvería a pasar.

De verdad, me agradecí como nunca el perdonarme a mi misma y darme otra oportunidad.

Necesitaba levantarme, así que con toda la delicadeza que conseguí reunir deshice el agarre que me tenía hecho. Ni se inmutó, anoche se le notaba realmente cansado, y con lo que duerme no me extraña.

Me senté en la cama y me quedé observándole. Ninguna de sus facciones ha cambiado, nada de él ha cambiado. Sigue siendo el mismo chico del cual yo me enamoré, al cual dejé y el cual me ha estado esperando y buscando hasta encontrarme.

En mi cara se dibujó una verdadera sonrisa, una que hacía ya muchos años no aparecía. Él es el único que es capaz de hacerme sentir bien, feliz, contenta, positiva, él es el único que hace que quiera seguir viviendo.

Le debo la vida literalmente, y me da igual que por un momento en el pasado por su culpa casi me la quito. Lo que importa es el ahora. Y ahora está de nuevo a mi lado.

El problema es que no puedo dejar de pensar en que él tiene una familia, y que mientras que eso exista, yo no puedo ser una prioridad. Sé lo que es romper familias... Sé como me siento cada vez que lo he hecho, no queriendo por supuesto,sino siendo utilizada. Ver como una mujer llora desconsoladamente mientras que ve a su querido marido con una puta en su propia cama. Con sus hijos alrededor. Esas miradas acusadoras. Duele demasiado.

Me tiré una media hora viéndole dormir hasta que me levanto para ir a ducharme.

Cojo ropa interior limpia, un jersey holgado y unos skinny jeans vaqueros rotos por las rodillas. Hoy hacia bastante frío e iba a salir así que había que estar calentita.

Las pierdo. ||Sam Wilkinson y tú|| #Wattys2015Donde viven las historias. Descúbrelo ahora