Reina de Reyes

CAPÍTULO 12

El palacio se encontraba en un completo caos, el ruido de gente corriendo y gritando era lo que más resaltaba de todo. Con el anuncio de que el Rey estaba de regreso, la Reina quiso hacerle un banquete de bienvenida y debido al poco tiempo, todos están con prisa en tener todo listo.

-Y recuerden, todos las clases de etiqueta que se les han dado las deberán aplicar aquí. Como prueba, esta noche trabajarán como sirvientas en el palacio Damonrod, tienen prohibido acercarse a los Reyes y de no obedecer, se les impondrá un castigo.- Mencionó lo último en dirección a mí.

Miss Margot había pasado toda la mañana dando órdenes sobre nuestras tareas en el palacio, unas se encargarían de limpiar y las demás, esto me incluye a mí, tendremos que servir en el banquete . Incluso nos obligaron a utilizar uniforme.

-Esto es horrible, no creo que la Reina entrene limpiando y llevando comida.- Se queja Ciel en voz alta.

-Más bien quieren complacer a los Duques y Condes de Derfel, escuché a la señora Margot alardear que las aspirantes al trono servirían en el banquete.- Comenta Issy en voz baja.

-¿Qué tienen que ver ellos con nosotras?- Ambas me miraron como si mi pregunta hubiese sido estúpida.- No me miren así, todo esto es nuevo para mi.- Las miré mal.

-Este banquete no solo es una bienvenida para el Rey, es la oportunidad para que esos vejestorios encuentren esposa.- Mis ojos se abren por lo que acabo de escuchar.

-Pero todas las que están lo hacen por Evegolia.- Todas son aspirantes a la corona.- ¿Cómo escogerán una esposa si no se sabe quién es la Primera Consorte?.-

-No se llevarán a nadie, simplemente observarán el mercado y esperarán a la coronación para saber cuál escogerán, es como si fuese una subasta, muchos sacan provecho de esto ya que todas son hijas de familias nobles, ya sea influencia política o riquezas.- Issy explica con cara de asco.- Es por eso que el Rey no se relaciona con ninguno, al contrario, siente mucho desprecio por ellos.

-¿Y tú cómo sabes eso?- Pregunta Ciel con su atención fija en Issy.- Hablas como si lo conocieras bien.

-Nuestros padres eran amigos, y nos conocemos desde niños, era obvio que nuestros destinos estaban unidos.- Declara orgullosa.

-Sin embargo, la Reina no te soporta.-Solté lo dicho antes de pensarlo y su mirada de odio no tardó en aparecer.

Ciel me observa con una mirada orgullosa.

-Te advertí que no te entrometas.- El tono de voz de Issy cambió por completo.

-Y no lo hago, no es como si me importara tu relación imaginaria con el Rey.- Torcí mis ojos en respuesta a su mirada.

Issy no dijo nada y se fue a gran paso en dirección a la habitación.

-Hasta que por fin sacas las garras con ella, me estaba preocupando que te dominara.- Bromea Ciel, aunque siento que lo dijo enserio.

-Todos tenemos un límite, aunque yo todavía no lo alcanzo.

Miss Margot dio el aviso que era hora de prepararnos.

Me dirigí a la habitación y por suerte Issy ya no estaba, pasé a cambiarme de ropa y prepararme, hoy sería una noche larga.

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El banquete marchaba de maravilla, el salón estaba hermoso y se notaba la elegancia de esta familia. Hemos estado de un lado a otro sirviendo los diversos platillos, ver tanta comida ha hecho que mi estómago truene. Ciel por otro lado, mete un dedo en cada plato en que tiene oportunidad.