Souvenir- Juan Pablo Isaza

veinticuatro

Estoy despierta

Pero no abro los ojos, porque siento que puedo seguir durmiendo por unos tres meses más

Suspiro cuando noto que, pasados los minutos, ya me despabilé y que el sueño se me escapa de las manos

Sin embargo, me acurruco en la cama y me doy cuenta de que estoy abrazando algo

Isaza está en la misma cama que yo

Dios, ¿Me escuchas?

Por favor, que no sea él lo que estoy abrazando, por favor

Con un poco de temor, y después de murmurar internamente treinta padres nuestros, entreabro los ojos, lo suficiente para observar el panorama

Mis brazos se encuentran abrazando una almohada y agradezco al cielo por eso

Subo un poco la vista y veo a Juan Pablo, ya despierto y con el celular entre sus manos. Su dedo pulgar se movía desde arriba de la pantalla hacia abajo, y logro divisar fotos, así que probablemente esté en Instagram

-¿Está despierta?- pregunta susurrando, aún sin sacar su vista de allí

-Eso creo- digo de igual forma y ríe bloqueando el móvil, luego lo deja arriba de su pecho

-¿Creo?- cuestiona riendo bajito- Me parece que su papá sigue en la casa

-¿Qué hora es?- pregunto

-Nueve cuarenta y cinco- responde y asiento abriendo más mis ojos 

-Se va en quince minutos- afirmo, porque así es de estructurado mi papá con sus horarios

Vuelve su vista del techo hacia mí y sonríe

-Me siento mal estando aquí a escondidas- comenta

-Te podes ir si no estas cómodo- digo, porque decirle a mi padre que Isaza está durmiendo acá, no era una opción

En sofá de la sala de estar quizás lo aceptaba

En mi habitación no

En mi cama mucho menos

-¿Y perderme de usted durmiendo? Ni loco- habla divertido y alzo mis cejas

-¿Dije o hice muchas bobadas?

-No, lamentablemente- contesta

-¿Lamentablemente?

-Me hubiera gustado ser el primero- dice refiriéndose a nuestra charla de anoche

-No es para tanto, soy mucho más divertida despierta- aseguro

-No lo dudo- levanta sus hombros- Pero me alegra no haber sentenciado mi muerte, entonces

-Te gusta el peligro, Isaza. Eso fue arriesgado- bromeo y ríe

Le tapo la boca cuando su risa suena un poco fuerte y alza su mano en forma de disculpa. Toma de mi muñeca suavemente, y la saca de su rostro

Pero no la suelta, y empieza a jugar con los dijes de mis pulseras

-Ayer no estaba dormida cuando me pidió que viniera a su cama

Las mejillas me empiezan a arder, y aunque esté tratando de ocultarla, una pequeña sonrisa aparece en su rostro

-¿Me querés hacer pasar vergüenza?- cuestiono y vuelve a reír en voz baja

-No sé ¿Usted quiere?

-No- respondo obvia

-Entonces si- bromea y le pego en un hombro- ¿Qué haremos hoy?

-¿Qué querés hacer?

-¿No que usted era local aquí?

-Hoy te dejo elegir a vos, por ser tu último día en Medellín

-Me da igual a donde ir, siempre y cuando venga conmigo

Los dos nos miramos al mismo tiempo por lo cursi que sonó eso y reímos

Aunque esté gritando por dentro, sólo puedo reír para alivianar la vergüenza

-Isaza- lo llamo cuando las risas cesan

-Diga

-¿Duermo feo?- pregunto y sonríe

-No, duerme bonito- contesta- Hasta le saque fotos por tierna

Dejo de sonreír cuando noto sinceridad en sus palabras y abro mis ojos de par en par

-¿Estás bromeando, no?

-No, es de verdad- niega con su cabeza y me siento rápidamente en la cama

Veo su celular resposado en su pecho y lo agarro rápidamente, antes de que pudiera pararme. Así que se sienta a mi lado de un golpe

-Agostina...- advierte mientras toco el botón de inicio

Contraseña, cuatro números

Se ríe

Lo miro y señala el celular con sus ojos, desafiandome a desbloquearlo

No creo que sea el aniversario de Morat

No creo que sea tan tonto para poner 1234

Tiene que ser un cumpleaños, tiene que serlo

Pero no puede ser el suyo, ni el año en el que nació, sería muy básico

Sus hermanas

Susana cumple un 10

Angela un 17

1710

Incorrecto

1017

Desbloqueado

-¿Que carajos?- susurra sorprendido

Abro mi boca con sorpresa a la vez que siento las manos de Isaza comenzar una guerra contra las mías

Acabo de hackear a Juan Pablo Isaza

Que genial

Lo logra sacar de mi agarre y sonríe triunfante, porque lo alza hacia arriba de su cabeza y lo deja fuera de mi alcance. Pero, ser insistente es parte de mi, así que tomo impulso y trato de volver a obtenerlo 

Las cosas no salieron como esperaba

Porque mientras yo voy hacia arriba, él también lo hace, y nos encontramos a una distancia muy poco prudente. Tan así que siento su respiración cerca de la mía

Vuelvo a intentar agarrarlo, pero pone una mano en mi cintura y tira el celular hacia el colchón en el que estaba acostado hace unas horas

Mi respiración está acelerada, y siento que se vuelve peor aún cuándo observo que sus ojos caen a mi boca

Y yo, sin poder evitarlo, también lo hago

Se apoya en el respaldo de mi cama y su agarre fuerte me hace ir con él hacia atrás, por instinto apoyo mis manos en su pecho

-¿Cómo lo hizo?- pregunta y niego

-Los cumpleaños de tus hermanas- contesto a puras penas y asiente

-Me conoce más de lo que pensé- cuestiona y roza su nariz con la mía

Dios mío

-¿Podes borrar esas fotos?- pido casi que en un hilo de voz

-Quiero algo a cambio- dice con una leve sonrisa

Trago fuerte cuando siento su otra mano en mi nuca, haciendo caricias debajo de mi pelo rubio

-¿Qué?

-Un beso