Te veo en línea y no sabes las ganas que tengo de llamarte, de escribirte nuevamente sin importarme que tú hayas sido el que me dejaras en visto, de decirte que extraño y que me haces falta.
Te veo en línea y no paro de preguntarme si he hecho lo correcto aquel día en que dije que lo nuestro debía terminar o que aquel día luego de año nuevo te pidiera que no fueras injusto conmigo al decirme que la idea de pensarme te prendía.
Te veo en línea nuevamente y decido escribir un mensaje diciéndote que "te extraño", pero nuevamente me acobardo porque de nuevo me llega a la mente que frenarte en esta especie de bucle entre nosotros sobre mandarnos mensaje cuando nos necesitamos porque sé que está mal de una y mil maneras. Y es que te prometo que no tienes una idea de lo mucho que quiero escribirte y decirte que he vuelto a pensar en ti, que tu nombre, los recuerdos y tú imagen me persiguen a modo de cuestionarme una y otra vez si he hecho lo correcto; sin embargo, sé que he hecho lo correcto al frenar lo nuestro y al decirte adiós.
Entonces te he visto en línea una y otra vez y no sabes cuanto extraño que me escribas, pero supongo que seguirá siendo de esa manera yo extrañando las memorias de lo que tuvimos.
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Antología de Relatos Mundanos para Sentir (libro Completo)
Ficción GeneralNo diré que es una sinopsis sin antes decir que es una sinopsis... Relatos mundanos para sentir es una colección de pequeñas historias que narran la realidad del alma y del corazón. Es la rebelión contra el estereotipo de ser feliz y seguir las regl...
