Fase 2

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Steve, Robin y Nancy habían logrado entrar en la mansión Creel, pero al abrir la puerta notaron que estaba llena de ventosas, por lo que debían tener muchísimo cuidado de no pisar alguna, así que empezaron a saltar y esquivarlas.

Por otro lado Max, había estado manteniendo a Vecna ocupado, logrando escapar de él pensando en recuerdos felices, aunque él le seguía el paso rápidamente.
Lucas cuidaba de Max lo más que podía, se prometió a él mismo que si en algún momento ella empezaba a levitar terminaría con todo y le colocaría los auriculares.

Para mala suerte de todos, Jason junto con sus amigos habían encontrado a Lucas y tenían retenida a Ericka.
Cuando Lucas volteó, miró a Jason, quien se veía muy mal.

-Jason, no puedes estar aquí. -Le indicó Lucas lo más tranquilo que podía.

Jason miró a Max, quien seguía en el trance.

-¿Qué le hiciste? -Dijo en tono nervioso.

-Jason, tienes que irte. -Dijo Lucas mientras se acercaba a él.

-¿Eso es lo que le hiciste a Chrissy? -Volteó a ver a Lucas y segundos después se colocó en cuclillas junto a Max.

-Escucha Jason, tienes que irte.

-Oye ¿Puedes oírme? -Le habló Jason a Max.

-No la toques. -Dijo mientras se acercaba más a ellos. -¡Esto no es una broma! ¡Jason! ¡Por favor!

-¡Hey! ¡Para atrás! -Gritó Jason y con un ágil movimiento saco un arma y apuntó a Lucas.

Lucas rápidamente se hizo hacía atrás y levantó ambas manos.

-Oye oye, no tenemos que hacer esto. -Intentó Lucas tranquilizar a Jason. -No tenemos que hacerlo.

-Espero que no. -Respondió Jason sin dejar de apuntar a Lucas. -¿Hay alguien más en la casa?

-No.

-Voltéate y suelta la linterna. -Ordenó Jason a Lucas.

Lucas obedeció.

-Esto es lo que vamos hacer, yo me voy a quedar allá cerca de las escaleras y voy a ver cómo la despiertas de lo que sea que le hayas hecho. -Explicó Jason.

-No puedo. -Se volteó Lucas. -Jason, si la despierto antes de tiempo, moriremos.

-Si no la despiertas, tú morirás Sainclair.

-Si no la despiertas, tú morirás Sainclair

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[...]

Emma, Eddie y Dustin estaban en posición de ataque y atentos ante cualquier movimiento extraño de los murciélagos.
Los tres se encontraban muy nerviosos, ya se escuchaban a los murciélagos afuera intentado entrar.

-¡Hijos de puta! -Grito Dustin. -¿Ya se dieron por vencidos?

-Shhh. -Dijo Emma.

-Tenias que decir eso. -Murmuró Eddie.

La maldición de Vecna (¿Eddie Munson o Steve Harrington?)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora