6 Jul 2022

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13:43 p.m.

Hola diario, DIS a vuelto para desahogar sus penas, porque sí mientras no estuve aquí anduve ocupada con las clases y la búsqueda de prácticas. Podría decirse que estuve bien por un tiempo, realizando mis proyecto de instituto tanto en grupo como personales, pero tan asistir a un feria laboral virtual, me di cuenta que ahora debía postular para mis prácticas, al inicio me dio flojera, pero luego con la plataforma de Lindkelin puede entender el porque la pagina era tan comentada y usada en la feria laboral.

Era más sencillo encontrar empleo y practicas por ese sitio que por la bolsa de trabajo que dan las instituciones (algunas lo tiene otras no) entonces llego mi primera llamada, se agendo la entrevista y al final no la pase, yo creo que se debió a lo nerviosa que me encontraba y porque no poseía un portafolio. Intente de nuevo postulando a otro lugar, me llamaron, se agendo la entrevista y esta vez si la pase, pude soltarme más y como no pedían un portafolio estaba a salvo... por ahora.

Entonces, ya están por cumplirse 2 semanas desde que estoy como practicante en mi departamento, soy la única diseñadora gráfica y aunque mi compañeros me guía y me apoyan, no tengo un guía como diseñador para que me oriente a mejorar, ya que las decisiones deben ser mías y a veces no puedo con toda esa responsabilidad, me preocupa hacerlo mal y que me digan que no esta bien hecho mis diseños.

El jefe de la empresa me da miedo, no di la mejor primera impresión cuando me pidió que explicará mi avance, me volví un manojo de nervios y al final me dijo que este lunes (que ya paso) debía presentarle una lista de cosas que siendo sincera, era demasiado en poco tiempo, prácticamente mi fin de semana se volvió una asfixia constante que solo se me pasa cuando ya no tenia que pensar en lo que me esperaba para el lunes.

Aún así la jefa de mi departamento me dijo que solo presentará unas cuantas cosas de la extensa lista y ella le diría al jefe que era demasiado para mí y más siendo nueva.

Cuando llego el lunes, en la mañana aún practicaba en lo que debía decir para convencer al jefe de elegir mi diseño, por momentos lloraba y me quedaba en pánico. Al final, tuve que pedir apoyo y consuelo a mi madre, le explique mi preocupación, me escucho, me dio palabras de aliento y se quedo conmigo para ayudarme a practicar mi "explicación" (no sé como llamarlo).

De todo esto, al final el jefe no fue a verme para la presentación y mandaron a otra persona para que me evaluará, fue ahí que me tranquilice y puse explicar mejor.

Oh querido diario, aún hay más cosas, pero te las contaré en otro momento. 

Debo terminar el trabajo que debo hacer y por eso solo he podido tomarme unos minutos para contarte toda esta primera parte. Espero que este mejor que yo en los siguientes días.

Nos vemos.

El Diario de DIS - Libro 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora