CAMPAMENTO DE VERANO

CAPITULO 1 - EL INICIO

Una leve brisa soplaba lentamente, ondeando las cortinas de mi cuarto, lo que provocaba que algunos rayos de luz entraran por la ventana, dándome de lleno en la cara, lentamente comencé a abrir los ojos, frotándomelos con una mano, mientras al mismo tiempo soltaba un gran bostezo y me estiraba escuchando como algunas articulaciones de mi cuerpo tronaban. Me recosté bocarriba en mi cama mirando hacia el techo pensando en todas las cosas que tenía por hacer, las vacaciones de verano estaban comenzado y tenía planeado hacer muchas cosas con mi mejor amigo para divertirme y/o entretenerme, cuando mi vista se acostumbró mire el reloj el cual marcaba las 7:05AM, me volví a estirar por completo desentumeciendo todo mi cuerpo hasta que decidí levantarme de la cama, me senté en la orilla de ella, aun un poco somnoliento, me acaricie el estómago y baje mi mano un poco hacia mi pubis y también me acaricie un poco entre las piernas buscando por todas partes mis lentes, los cuales estaban sobre la mesita de noche que tenía aun lado de la cama y me los puse.

Me levante de la cama y camine un poco hacia el baño, no sin antes pararme antes frente al espejo, donde pude ver mi reflejo el cual era la de un joven cerdito de cuerpo robusto (gordito) de piel un poco clara pero algo bronceada por el sol, con algunas marcar en él, de cabello oscuro un poco corto, y unas orejas puntiagudas, dándome cuenta de que solo vestía únicamente una trusa clásica blanca, donde se podía notar mucho la típica erección matutina de todos los días, con la cara algo sonrojada y una risa nerviosa pose mis manos sobre mi estómago y lo apreté levemente viéndolo brincar, pensando en lo gordito que estaba, también podía ver como mi erección se movía un poco de arriba abajo, como si tuviera vida propia.

Mire hacia la ventana, donde desde afuera podía escuchar las voces de algunos chicos gritando y riendo, también se escuchaban algunos autos pasar por la calle, y algunos adultos platicando, con una gran exhalación camine hasta la ventana y tomando las cortinas con ambas manos las cerré bien, después de cerrarlas bien me di la vuelta y camine directamente hacia el baño cerrando la puerta detrás de mí y poniéndole seguro, para luego quitarme la trusa que tenía puesta, liberando mi erección, la cual salió disparada hacia arriba, golpeando levemente mi pubis, así que cubrí mi erección con una mano escondiéndola bien para después con la otra dejar la trusa colgada sobre el pomo de la puerta, camine hacia la regadera y abrí la llave de está esperando un rato a que el agua comenzara a salir templada para poder darme una ducha.

Entonces me metí bajo el agua un buen rato bajo el agua sintiendo como recorría todo mi cuerpo relajándome un poco y olvidándome de todo a mi alrededor, esperando que mi erección bajara un poco y se controlara, poco a poco comencé a pasar el jabón por todo mi cuerpo a modo de masajes sin dejar una parte sin enjabonar, los cuales pasaron a ser leves caricias que provocaron que mi cuerpo se estremeciera provocándome otra potente erección, lentamente seguí acariciando partes de mi cuerpo que provocaban que me estremeciera más y más, estaba algo nervioso haciendo que me sonrojara y empezara a exhalar mucho, casi como si estuviera gimiendo ya que eso me gustaba mucho, cerré los ojos y lentamente comencé a pasar una mano sobre mi pecho y estómago, con la otra baje hasta mi pubis donde tome mi pene el cual estaba completamente erecto y soltando algo de pre (lagrimeando como muchos dicen jejeje), seguí masajeándolo por un rato de atrás hacia adelante, entre ratos solo frotaba el glande, hasta que algo me hizo reaccionar de pronto, abrí los ojos de golpe y mi cuerpo se tensó, mis piernas comenzaron a temblarme y de mi pene salieron disparados unos 6 chorros de semen, que cayeron al suelo y se fueron con el agua.

Después de recuperarme un poco, termine de bañarme así que cerré el pase del agua, y busque una toalla limpia para poder secarme, comenzando por la cabeza, después pase por el pecho y brazos, baje por mi estómago y pubis el cual estaba sin nada de vellos secándome bien la entre pierna, después seguí con las nalgas, para al final terminar con las piernas, me envolví bien la toalla a la cintura y abrí la puerta del baño para salir al cuarto a buscar la ropa que iba a ponerme.