2. Friendzone

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Bien, estaba listo. Ya no podía seguir aguantando todo lo que sentía, tenía que expresarlo de alguna forma sino iba a explotar como una puta dinamita. Steve lo volvía loco, sí.

Últimamente, o bueno, durante los últimos meses han estado compartiendo mucho tiempo juntos, Eddie se ha enamorado de Steve, no puede evitar perderse en sus ojos cada vez que lo ve.

- ¡Hey, Eddie! -Steve lo llamaba agitando sus manos frente a su rostro. - ¿Enserio si me estás escuchando? Pareces distraído. -Preguntó un Steve bastante preocupado.

-Ah si, claro, niño bonito. ¿Me decías...? -Respondió un Eddie reaccionando de golpe.

Se había convertido en su mundo, lo ponía completamente de cabeza. Steve tenía demasiadas consideraciones con él, siempre se preocupaba y lo incluía en todos sus planes, parecía haberse convertido en alguien importante para él también, parecía gustarle.

-Últimamente estás así... ido. -Lo miró de forma interrogante. - ¿Te pasa algo Munson? Y no me digas que no porque no creas que no lo he notado, dime que te pasa. -Se acercó.

Narra Eddie

Nervios, angustia y miedo. Eso sentía justo en estos momentos, Steve se ha dado cuenta y no sé cómo demonios decirle lo que en realidad está pasando. ¿Cómo decirle que es él el causante de mis distracciones?, que simplemente no me puedo concentrar en otra cosa que no sea él cuando estamos juntos... que me gusta, que siento amarlo.

Me acomodo sobre el capo del auto, queriendo lucir relajado. Steve me mira con esos ojos preocupados, esos grandes y hermosos ojos y simplemente siento que ya no puedo evitarlo.

-Steve... -Mi corazón late apresuradamente, no encuentro las palabras. -He querido decirte esto durante mucho tiempo, pero no podía, ¿sabes? -Suspiro y tomo aire rápidamente. -Tú me gustas.

Veo su cara de confusión, que pronto se transforma en una aterrada. Dios, no. Siento ganas de llorar.

-No tienes que... -Me apresuro a decir. - ¡Dios! simplemente sucedió, me gustas Steve, tú siempre estás ahí y me ayudas tanto, tienes tantos detalles conmigo que solo sucedió. -Hice una pausa para mirarlo. Está atónito, esto me está matando.

-Eddie yo... lo siento. Perdóname si te di una idea equivocada solo, -Se pasó sus manos por su cabello con frustración. -no puedo corresponderte, no me gustan los hombres, eres mi amigo no te veo como algo más. -Se separó un poco.

Mi corazón se rompía por cada palabra mencionada, sentía que me faltaba el aire y que había cometido un error... no debí enamorarme de él, no debí decírselo. Miré al suelo, sentía mis lagrimas correr por mis mejillas, no me di cuenta cuando comencé a llorar. Todo fue muy apresurado.

Sorbí mi nariz que ya comenzaba a moquear y lo miré, estaba perturbado, preocupado. Sabía que me quería, pero no de la forma que necesitaba. Yo simplemente no sabía qué más decirle, me había expuesto. Yo, Eddie Munson, había confesado mis sentimientos y no son correspondidos.

-Lo entiendo, lamento arruinar todo de esta forma. -Limpié mis lágrimas con el dorso de mi mano. -De verdad creí que tal vez tu sentías lo mismo, me equivoqué y ahora es probable que ni siquiera me quieras como amigo. -No pude evitar decir, de verdad me dolía y sentía mucho miedo.

Steve puso sus manos en sus caderas y miró hacia el cielo, suspirando. -Munson, no llores, nosotros... nuestra amistad no va a cambiar, te lo prometo, solo, no puedo corresponderte. -Me miró angustiado. -Tu... mereces a alguien que te quiera, eres increíble, pero, ese no puedo ser yo.

-Yo... tengo que irme. Perdón, Steve. -Dije ya no aguantando este sentimiento de dolor, de querer abrazarlo y no soltarlo nunca. Tomé mi chaqueta que había caído al suelo minutos atrás y comencé a caminar hacia el bosque, evitando su mirada.

Narradora

Steve se sintió muy mal por Eddie, aunque también consigo mismo, aunque trató de decirle todo de la forma más amable posible se sintió como una basura, Eddie se le había confesado y él no pudo corresponderle. Sentía ganas de seguirlo, de no dejarlo ir, pero no lo hizo, se sintió un cobarde. Había dañado a su amigo, lo había hecho llorar.

Eddie se había ido destrozado y Steve había quedado con un nudo en la garganta. Su amistad con Eddie era una de las más valiosas, no quería perderlo, esperaba poder hablar con el pronto. Quien sabe que pueda suceder...

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Buenooooo, este es mi segundo escrito, me estoy divirtiendo mucho con esto, aunque escribirlo me rompió el corazón ☹Espero poder leer sugerencias pronto, estaré muy atenta. Gracias a todos los que están leyendo, votando y comentando, eso me motiva mucho a seguir escribiendo.

Abrazos y besos XOXOXO 

ONE SHOTS - STEDDIEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora