Océano

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Iona:
Me salí de la ducha y me miré al espejo. Sé que lo que me acababa de pasar era duro pero no debía llorar, tenía que ser fuerte. No hay nadie con más resistencia que yo en esta vida. No iba a dejar que esto me afectase en mi día a día, así que me lavé la cara y me fui al salón a fumar.
Sabía perfectamente que ese hombre no merecía estar vivo pero es el que está logrando sacar a mi padre de la cárcel, y además le debía 200€. Esta noche la olvidaría y esto me haría más fuerte lo sé.
También sabía que utilizar mi cuerpo como medio de pago no está bien, pero técnicamente no tengo dinero, mi padre no tiene acceso a dinero aquí en los Estados Unidos, yo misma me hacía mi ropa por lo que por muy mal que viese yo misma que vender el cuerpo como un objeto estaba mal, lo tenía que hacer. Ya habría tiempos mejores, ahora toca hacer frente a los malos.
Estaba sentada tomándome un té cuando sonó la puerta. Eran las tres de la mañana, ¿quién podría ser?

-Iona, tengo que contarte algo- entró Rafe apurado
-Dime- le dije en un tono tranquilo
-Mi padre quiere que me prometa con Claudia- me contó
-Bueno pues que bien, ¿no?- dije, por dentro me estaba muriendo, mis esperanzas de tener una relación con Rafe habían muerto
-Claro que no IONA- dijo revolviendose el pelo- Yo te quiero a ti no a ella. ¿Qué hago? Yo quiero estar a tu lado día a día y que nunca te pase nada malo, no quiero estar con ella y menos casarme- se sinceró
-Rafe tienes que hacer lo correcto, tú mismo lo dijiste ayer mereces alguien de buena familia y no una puta como yo- comencé a llorar
-Iona olvida todo lo que te dije ayer, iba muy colocado y borracho, la ira me pudo. Yo solo te quiero a ti no te puedo sacar de mi puta cabeza- dijo- Si tengo que irme a otro país por ti, lo haré una o quinientas veces. Yo solo quiero estar contigo- no me salían las palabras, estaba llorando de felicidad por lo que dijo- No me voy a casar con Claudia, vamos a escaparnos, tú y yo juntos. Empezaremos una nueva vida, en otra ciudad, sí eso es. Tendremos 4 hijos y todos seremos felices- me reí ante su comentario
-Rafe lo siento, no quiero arruinarte la vida. Aunque me duela debes hacerle caso a tu padre- le dije
-No puedo Iona. Si me caso con ella que sepas que te vendré a ver siempre, todos los días- me contestó- El día tiene 24 horas pues yo pasaré 20 contigo, mínimo- juntó nuestras cabezas y me agarró la cara- Siempre estaremos juntos, sino Rafe e Iona, Iona y Rafe- me dió un beso suave
-Te quiero Rafe- le dije
-Yo te amo- me contestó dándome otro beso
-¿Te quedas a dormir?- le pregunté
-Claro que sí- me contestó siguiéndome hasta la habitación

Nos metimos en la cama, me abrazó y nos quedamos dormidos. Con Rafe me sentía segura, él me daba esa alegría que necesitaba, esa fuerza. Si se llegase a casar yo sabía que lo que me había dicho lo haría y que me vendría a ver todos los días, porque eso es lo que está haciendo ahora. Y estemos con el que estamos siempre seremos él y yo.

Rafe:
Me levanté y vi a Iona dormida, parecía un ángel, era perfecta. Mientras la miraba ví que mi móvil se iluminó. Eran las 12 y tenía 9 llamadas perdidas de Claudia y 7 de mi padre, toda la felicidad que tenía se desvaneció. Eran insoportables, ví que tenía muchísimos mensajes de Claudia

Claudia:
*Rafe voy a tu casa, vamos a comer con mis padres*
*¿Vale?*
*Rafe*
*Ábreme*
*¿Estás dormido?*
*¿Dónde estás?
*Rafe*
*Rafe*
*Rafe*
*Rafe*
*Tu padre y yo estamos muy preocupados*
*¿Dónde narices estás*
*Topper me ha dicho que no estás en su casa*
*¿Estás con otra?*
*Contestame*
*Rafee*
*¿Dónde estás?*

yo:
*ya voy*

No quería que Iona se despertase y no me viese. Así que le di un beso en la frente y comencé a hacerle cosquillas.

Infierno-Rafe Cameron Donde viven las historias. Descúbrelo ahora