𝗩𝗲𝗶𝗻𝘁𝗶𝘀𝗲𝗶𝘀

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𝕯𝖎𝖘𝖙𝖆𝖓𝖈𝖎𝖆



El amor es fugaz, como el fuego en infierno, los rayos de luz resplandecientes nos demuestran que siempre hay esperanza en el mundo, incluso cuando es un mundo de cenizas.

La primera semana sin Tamika fue difícil, Sakumo pasaba mucho tiempo en silencio, cosa poco común en el, recorría los pasillos de la casa esperando poder encontrar algo que le recordara a ella, oler su perfume o encontrar un hilo de su cabello rojizo.

Kakashi estaba casi igual, nuevamente en un caparazón para evitar a las personas a su alrededor , se sentía oprimido en su propia cabeza. Las cosas en casa se volvían grises al igual que su padre

Tsunade insistía en que Tamika era una traidora y que ella siempre lo supo, pero realmente nadie le había estado prestado suficiente atención; Sakumo finalmente había aceptado aquella peligrosa misión que Jiraiya le había encomendado, y está sería su última noche en familia antes de partir.

La mesa estaba puesta, la comida emanaba olores deliciosos, mientras que el clima agradable daba una sensación de paz, pero no para la familia Hatake. Ambos estaban sentados, mirando al plato frente a ellos, tenían tanto que decir pero no había tiempo u oportunidad.

-Esta rico, ¿Verdad hijo?

-Si, delicioso

Las palabras sonaban tan lejanas entre ellos mismos, la dificultad de la situación era extenuante para ambos.

-Partire a una misión mañana -el adulto trato de iniciar nuevamente la conversación -no sé cuándo volveré con exactitud

-Esta bien

-Es un poco peligrosa, pero volveré a casa seguro

-Ok

-Kakashi, por favor -finalmente el niño lo observo- Se que te duele que Tamika se fuera, podemos hablar de ellos si quieres

-No quiero

-Cerrarse no es correcto hijo, tu corazón es joven para aquello

-¿A quien diablos le importa?, Ella se fue, se acabó, nos abandono

-Ella no los abandono, idiotas, cuanta ignorancia

Una voz esposa respondió, Sakumo se puso en guardia para proteger a su hijo, una mujer pelinegra salió de la cocina, tenía cara de aburrimiento y se veía muy lastimada.

-¿Cómo entraste, quien eres?

-Ustedes deben ser los Hatake, aquellos prodigios, Tami-chan me habló de ambos

Traía un libro en su mano izquierda, mientras que evitaba el contacto visual a toda costa, era delgada, tal vez demasiado, a simple vista se veía tan débil que parecía de porcelana.

-Respondenos -Sakumo perdía la paciencia - ¿Cómo conoces a Tamika?

-Tamika me envió, para saber de ustedes, está preocupada -la mujer se sentó en el piso de madera- Me llamo Amaya, soy una forastera, no tengo una aldea en si, soy cazarrecompensas , hace unas semanas, tu esposa me salvó la vida y ahora estoy en deuda con ella, por ende eh jurado seguirla hasta el final.

-No es su esposa -la mujer poso la vista en la voz que respondió- ella no es nadie

-¡Kakashi! -solto una carcajada- Tamika me habló de ti, su pequeño gruñón, quiere que comas bien, te des una ducha caliente y no seas gruñón -desvio su vista a sakumo- le sorprende que no la buscarás

-Lo hice, por todas partes

-Te dejó pistas en la casa, muchísimas, esperando a que la buscarás.

Sakumo dudo ¿Si había revisado bien la casa?, Tamika dejo pistas y el no fue capaz de notarlas, miro de reojo a su pequeño hijo, el cual mantenía el ceño fruncido, Kakashi ya había sufrido mucho debido a la ausencia de la mujer y hacer que recordara esta situación no le agradaba.

-Sakumo -la extraña mujer sonrío- ella vendrá en unos días, a buscarte, pero debes ser inteligente, Konoha no la quiere viva.

-¿A que te refieres?

Por primera vez Kakashi demostró interés en la conversión, al momento de hacer esa pregunta, su entre cejo se volvió dócil y amable.

-Tamika es la heredera maldita, las leyendas del clan Uzumaki son muchas, entre ellas destacan dos, la de la heredera y la bruja, se dice que una de ellas masacrara el mundo como lo conocemos y la otra lo hará más hermoso, sin embargo nunca se especificó quien era quien. Con los años las teorías solo se han mantenido como mitos, pero Konoha entre otras naciones, no desean correr riesgos.

-Mamá no dañaría a nadie

-Kakashi -esta vez, el tono de la joven era más grueso- ten cuidado con lo que afirmas, jovenzuelo, que no te haya lastimado no significa que no lo haga; Tamika es impredecible, bipolar e inestable, no hay duda de que los quiere a ambos pero no deberían confiarse tanto, ella haría lo que fuera por protegerlos.

-¿Cuando vendrá? -el albino se veía más emocionados de lo usual- ¿Esta bien?

-Si claro, ella vendrá en tres días, veanla en el claro de luna azul

Dicho aquello, la intrusa dejo la casa Hatake, con más preguntas que respuestas, por un lado, un ansioso Sakumo idealizado su reencuentro con su amor y por el otro el pequeño Kakashi, analizando que sucedía realmente.

Konoha nunca había sido de confiar, todos sabían con claridad aquello, pero las leyendas del clan Uzumaki y su extinción siempre habían sido un tema prohibido. Uzumaki Tamika, la heredera maldita, aquella prestigiosa leyenda nació de ella.

 Uzumaki Tamika, la heredera maldita, aquella prestigiosa leyenda nació de ella

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||𝙁𝙖𝙢𝙞𝙡𝙞𝙖 || Sakumo HatakeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora