28

1K 133 46
                                    

Una punzada de desconfianza se apoderó de Hueningkai a la hora de querer tocar la puerta de Beomgyu y la encontró abierta, abriéndose apenas posó su nudillo sobre ella.

Y esa inquietud aumentó cuando al momento de ingresar y dejar sus zapatos en la entrada, no vió rastro alguno de su amigo por el lugar. Mierda... Putamadre, ¿Taehyun lo había vuelto a secuestrar nuevamente?

—¿Huyng? —Hueningkai llamó dudoso, ingresando lentamente al departamento, donde fue conducido hacia la puerta entreabierta del baño, donde se escucharon varios ruidos extraños —¿Hyung?

Para su sorpresa, la cabeza de Yeonjun se asomó por la puerta con un cepillo de dientes en la boca —Beomgyu está en el baño —El mayor respondió, quitándose el cepillo de la boca, cerrando la puerta detrás de él para darle privacidad al castaño —¿Estabas llorando?

Lejos de estar sorprendido por esa escena, Hueningkai pasó el brazo por su rostro, limpiando el rastro de lágrimas que su llorada en medio ascensor hasta llegar al piso de su amigo le había dejado. Había olvidado ese detallito gracias a la sorpresa de ingresar al departamento aparentemente vacío.

—Ahh, qué buena cagada, por Dios —El suspiro complacido de Beomgyu interrumpió el incómodo intercambio de miradas entre los dos, abriendo la puerta repentinamente, haciendo a Yeonjun apartarse —Hey, ¿qué pasó cabeza de huevo? —Sus ojos, tal como los de Yeonjun, fueron a parar en el ahora apenas borrado, rastro de lágrimas en las mejillas del menor.

—¿Estabas cagando mientras Yeonjun sunbae se lavaba los dientes? —La pregunta se deslizó sola por los labios de Hueningkai.

—Claro, ¿tu no haces eso con Soobin sunbae? —El tono de Beomgyu fue demasiado sorprendido para su propio bien.

—No menciones ese nombre —La sorpresa de Beomgyu ante las palabras del rubio fue opacada por el sonido del celular de Yeonjun sonando, lo que hizo a ambos voltearse hacia el.

—Soobin hyung me está llamando —Yeonjun miró la pantalla antes de mirar a Beomgyu, quien asintió en señal de que respondiera —Quiere que vaya a casa, me necesita —Luego de un momento en silencio, Yeonjun avisó, cortando la llamada con una expresión desconcertada.

—¿Qué pasó entre ustedes dos? —Beomgyu no tardó en atar cabos en su cabeza, compartiendo una expresión preocupada con su novio.

—Que el tonto de Soobin te cuente su versión —Sus palabras se dirigieron a Yeonjun, era increíble que aún enojado, Hueningkai no era capaz de insultar verdaderamente a alguien —Yo te contaré la mía.

Los ojos de Yeonjun volvieron a ver a Beomgyu en busca de ayuda ante las palabras de Hueningkai, a lo que Beomgyu gesticuló un gesto para que se fuera.

—Me iré entonces —Yeonjun asintió con la cabeza, despidiéndose de ambos con un asentimiento. Beomgyu sabía a ciencia cierta que si Hueningkai no estuviera allí mismo, el mayor probablemente se hubiera acercado a recibir un abrazo, sin embargo, la timidez le ganaba.

—Cuéntame que carajo pasó, ustedes dos son como mis padres —Tan pronto como se escuchó la puerta cerrarse, Beomgyu se apresuró a arrastrar a Hueningkai a un sofá, sentándose junto a él en posición de terapeuta.

—Soobin siente celos y no lo quiere aceptar, entonces tuvimos una pelea y me fui —Hueningkai soltó, aumentando más la confusión de Beomgyu, ¿qué clase de explicación había sido esa? ¿Y los detalles?

—¿Por qué crees que se siente celoso?

—Por la cita a ciegas de la facultad de Psicología —La expresión perpleja de Beomgyu se mantuvo —¿No lo recuerdas? Tu también te inscribiste, fue a inicios de año, un chico se nos acercó con el formulado de inscripción y tu me obligaste diciendo que querías conseguir nuevas citas.

Serendipia | Yeongyu Donde viven las historias. Descúbrelo ahora