Déjà Vu

Capitulo 1

Lo consultaré con la
almohada.
.

.

.

Camila Thompson.

Pero todos me dicen Cami, bueno, solo las personas que me caen bien que son muy pocas en mi vida.

Vivo en Vancouver, Canadá, llevo una vida sencilla, o al menos la vida que alguien de mi edad debería llevar.

No soy la persona más sociable del mundo pero me las arreglo para convivir con los pocos amigos que tengo, que para mí son más que suficiente.

Ahora estoy en mi cuarto, tratando de alejarme del ruido de mis hermanos y mis primos. Es domingo y toda la familia se reúne en mi casa y no me gusta estar rodeada de tanta gente.

Estoy viendo mi celular hablando con mis mejores amigas, Isabella Stefan y Ángela Davis, pero todos les dicen Isa y Angie, sobre un tema que ya me tiene un poco cansada.

Angie: ¿Pero porque no me escribe?

Ya no sé cuántas veces a hecho la misma pregunta hoy.

Isa: Tal vez porque tiene otras cosas que hacer, recuerda que hay gente que tiene vida.

Cami: Yo nisiquiera se porque todavía estás pendiente de él, no lo vale.

Es lo mismo que le digo todo el tiempo.

Si no saben porque Angie está pendiente de un chico les explico: hace dos semanas fuimos a una fiesta, estamos las tres sentadas conversando y un chico cruzó miradas con Angie, y bueno... Ellos bailaron, bebieron y se divirtieron y ahora él no le responde los mensajes, la ignora totalmente. Angie a tenido una mal suerte con los chicos desde siempre, ellos se sienten atraídos a ella pero nunca mantiene una relación seria, es algo de solo un momento.

Angie: Quizás tengas razón Cami, pero duele que siempre pase lo mismo, solo quiero tener a alguien que esté loco por mí y ya.

Isa: Todas queremos eso, algún día nos llegará alguien que haga que estemos en la nubes.

Cami: Chicas, enserio no entiendo su locura por conseguir novio, o sea no es lo más importante en la vida.

Isa: Se que no es lo más importante, pero quiero algo así.

Isa es de esas chicas que es bonita pero no llama la atención, siempre que salimos, las miradas se las lleva Angie, esto no quiere decir que Isa no, pero son pocas las veces que un chico es atraído por Isa.

Un estruendo me asustó, me incorpore derrepente, quedando sentada en mi cama, era mi hermano Aaron que entró a mi habitación.

—¡Sabes que existe algo que se llama tocar!—le grite, pero el no me prestó atención a lo que le dije.

—Solo vengo a buscar algo— dijo mientras revisaba mis cajones.

—Aqui no hay nada tuyo, y si lo hubiera, ya estaría en la basura— le dije mientras me colocaba de pie.

—¡Lo encontré!—exclamó, mire lo que tenía en la mano y eran sus audífonos.