Saving You.(Part2)

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Cuando entre a la habitación que compartían Kinn y Porsche, lo que vi me dejó helado, mi hermano tenia en el suelo a un lastimado y lloroso Porsche.

-¡¿Estás loco Kinn?!, ¡No te atrevas a ponerle una mano encima a Porsche!-
No podía creer que Kinn hubiera golpeado a Porsche.

-Ustedes- señalando a los recién llegados -Ayuden a Pete a quitarle de encima de Porsche a Kinn-

Entre los tres guardaespaldas alejaron a Kinn del indefenso Porsche.

-¡Quitenme las manos de encima, esto no les incumbe a ninguno de ustedes!-
Kinn gritaba y forcejeaba con los tres guardaespaldas y yo solo pensaba en lo horrible persona que estaba siendo.

Pero no podía determe a pensar tanto, tenía que ayudar a Porsche, así que corrí a dónde estaba para ayudarlo a ponerse de pie.

-¡Porsche, Porsche!, Aquí estoy Porsche-
Me temblaba la voz cada que pronunciaba su nombre, no podía unir la imágen de este Porsche sangrando y lastimado con la de mi amigo que siempre sonreía y se veía fuerte.

-Vas a estar bien, primero déjame sacarte de aqui-
Le susurraba mientras le pasaba un brazo por su cintura y con mi otra mano colocaba su brazo por encima de mis hombros.

Kinn seguía vociferando y amenazandome para que no me llevará a Porsche.

-¡Cállate Kinn!, Solo cállate, tu cabrón- lo señale con un dedo - te las veraz seriamente conmigo después de esto, ahora me llevaré a Porsche a cualquier lugar lejos de ti!!!-

Era un cabrón si creía que dejaría que tratara así a mi amigo, ya hablaría más tarde con él y le pediría una explicación y si no me satisfacía lo que dijera, le contaría todo a Po.

Antes de que todo se saliera más de control, saque rápidamente a Porsche y tome rumbo hacia el frente de la casa, por la reunión de Po no había subordinados dentro de la casa, todos se encontraban vigilando los alrededores.

Porsche estaba hablando pero no podía dejar se pensar que lo que iba hacer era tal vez una mala idea.

-Ay como lo odio pero se que ahora es la única persona que cuidará de ti, ojalá se lo comieran los peces pero estos últimos meses eh visto su genuino interés por ti y de que le importa tu bienestar-
Empecé a susurrar para mí mismo sin esperar a que Porsche entendiera lo que decía.

Sentía pesado el cuerpo de Porsche, ya empezaba a sudar por llevarlo conmigo pero debía apresurarme, no fuera que se les ocurriera soltar a Kinn y esté viniese corriendo a llevarse a Porsche.

Cuando llegamos a la entrada de la casa, la puerta ya estaba abierta y la persona que más odiaba pero que hoy bendecía su presencia, estaba ya esperando por nosotros.

-Khun, gracias por avisarme-

Vegas salió de entre las sombras y se acerco a nosotros.

-Bueno, si no fuera porque se trata de Porsche, nunca te hubiese hablado-

Hice una mueca de desdén ante sus palabras.

Road TripDonde viven las historias. Descúbrelo ahora