Capítulo 4.

366 73 16
                                    

Con un suspiro, terminó de vestirse y aceptó su destino. Estaba involucrado con Healing Voices al grado de que sin duda se vería extraño el querer dejar de pasar tiempo con ellos sólo porque el concurso ya había terminado. No podía escaparse de acompañarlos en su celebración.

El restaurante que eligieron estaba cerca de la zona céntrica de la ciudad; no era muy grande, pero sí era bastante popular gracias a su comida deliciosa. Tan pronto como entraron, tuvieron que registrarse en una lista y esperar un cuarto de hora antes de que les pudieran asignar una mesa, aunque ni siquiera sintieron el paso del tiempo por estar más ocupados conversando.

—¿Cómo es que hay tanta gente aquí? —Se quejó Do Kyeom en voz baja mientras seguían al amable mesero que los guiaba hacia su mesa—. Les dije que hubiera sido mejor ir al lugar donde trabaja Hyun Jin. Tiene más espacio.

—Nadie quiere ir a su lugar de trabajo en su día libre —señaló Jeong Han entre risas.

—Estoy de acuerdo —habló Hyun Jin—. Aunque me gusta mucho tocar y cantar, hoy estamos aquí para celebrar que ganamos.

Se sentaron, pidieron unas bebidas frías para comenzar y se quedaron hojeando el menú. Seung Min ni siquiera tenía mucha hambre, sólo quería que todo terminara pronto para así regresar a su apartamento y dormir, pues no estaba muy cómodo desde que Lee Know admitió sus sentimientos por su mejor amigo y era obvio que estar cerca de la banda sólo empeoraba las cosas.

Veía de reojo a su compañero de renta y a Hyun Jin. Sólo hablaban y reían cuando alguno mencionaba una cosa graciosa, se comportaban tal y como lo hacían durante los descansos en los ensayos que él pudo apreciar. En pocas palabras, todo parecía normal entre ellos, como si el beso al final del concurso nunca hubiera pasado. Tal vez Lee Know decía la verdad cuando le explicó que esa unión de sus labios había sido una tontería causada por la emoción y ya.

Aun así, Seung Min se arrepintió momentáneamente de no haber visto cuál fue la reacción del bajista esa noche. ¿Le había correspondido? ¿Se había apartado?

—No puede ser... —La voz de Woozi lo sacó de sus pensamientos—. Chicos, miren hacia mi izquierda de la manera más discreta que puedan.

El pelirrojo fue el primero en obedecer, sorprendiéndose al ver que a unas cuantas mesas de distancia estaban los integrantes de 3Racha. Parecía ser que ellos también habían decidido salir a celebrar.

—¿Y ahora qué? —Preguntó Jeong Han tranquilamente—. ¿Deberíamos acercarnos a saludar o algo así?

—No es necesario, ¿o sí? Ayer los felicitamos por haber ganado el primer lugar del concurso —le recordó el vocalista—, ni siquiera tendríamos un buen tema de conversación.

—El de cabello oscuro y rizado es CB97, ¿verdad? —Hyun Jin quiso asegurarse—. No podría acostumbrarme a verlo en lugares como éste. Ya saben, por todos esos rumores de que se la vive encerrado en su estudio para producir música y que duerme sólo tres horas al día. Nadie lo ve hasta que 3Racha tiene una presentación.

—Bueno, eso explicaría por qué siempre tienen canciones nuevas —comentó Woozi.

—Vamos a saludarlos —Lee Know sorprendió a todos al pronunciar esas palabras—. Es cierto que ya los felicitamos ayer, pero no tenemos por qué ser tímidos.

En 3Racha había sólo tres integrantes, cuyos nombres artísticos eran CB97, J.One y SpearB.

El primero era el líder del grupo, un chico de veinticinco años, simpático y bastante trabajador, apasionado por la música –desde que tenía uso de razón– y con muchas metas. Tenía piel pálida y cabello castaño oscuro, casi negro, y levemente rizado hasta las orejas. Su verdadero nombre era Christopher Bang, pero en Corea era mejor conocido como Bang Chan. Había viajado desde Australia con la esperanza de hacer sus sueños realidad.

Canciones escritas con el corazón [HyunMin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora