Capítulo 19.

373 62 15
                                    

Cuando salieron de Miroh con sus manos entrelazadas, Seung Min dejó salir un suspiro de alivio e incluso sonrió de lado. El interior del restaurante se había vuelto muy incómodo para él debido a la presencia de Lia.

—¿Está todo bien?

—Tu exnovia me detesta. ¿No te diste cuenta de cómo me miró mientas comíamos?

—Sólo está celosa —aseguró el pelinegro, usando su pulgar para darle caricias suaves en el dorso de la mano a su novio—. Creo que tenía intenciones de pedirme que volviera a estar con ella porque ahora me va mejor con la música, pero sus planes se arruinaron.

—¿Por mi culpa?

—No, por la mía. Yo no aceptaría volver a ser su novio. ¡Ni loco! —Rio Hyun Jin de manera simpática—. Incluso si jamás hubieras llegado a mi vida, yo preferiría estar solo antes que con ella, una persona que no creyó en mí o en mi sueño de ser músico y que no hizo nada más que utilizarme.

Seung Min se acercó al más alto y le dio un beso en la mejilla con cierta timidez antes de dedicarle una sonrisa. No sabía cómo expresar con palabras simples lo mucho que deseaba apoyar al contrario en cualquier cosa que se propusiera, pero eso estaba bien, pues a Hyun Jin no le hacían falta para comprender el mensaje... O eso parecía. Aunque no veía al contrario como un chico capaz de aprovecharse de otros, tenía miedo de no poder hacerlo completamente feliz.

El día del concurso en el cual Woozi había inscrito a Healing Voices pareció llegar en un parpadeo. Todos en la banda se sentían preparados, aunque algo nerviosos al mismo tiempo. Seung Min tuvo apartado un sitio en la primera fila para gritar y emocionarse cuando subieran al escenario. Fue muy divertido y, a pesar de que no ganaron el primer lugar, su vida como artistas empezó a cambiar desde ahí.

Mientras los chicos terminaban de guardar y recoger sus pertenencias, se les acercó un hombre de 175 centímetros de alto con corto cabello negro que se presentó como Mark Tuan e inmediatamente le entregó una tarjeta con su información de contacto al guitarrista. Con una sonrisa agregó que disfrutó escucharlos, que tenían mucho talento y que estaría encantado de conversar con ellos después, en un lugar más tranquilo. El pelirrojo se quedó paralizado cuando leyó que aquel hombre trabajaba en una compañía discográfica reconocida.

Esa misma noche, Healing Voices y Seung Min se sentaron a hablar acerca de lo ocurrido.

—A ver... Si esto no se trata de una broma, lo que está ante nosotros es una oportunidad única de alcanzar a más personas con nuestra música —dijo Jeong Han—. Hasta podríamos conseguir un representante y tener más presentaciones.

—Ya estoy investigando —contestó el pelirrojo, quien recién terminaba de buscar el nombre "Mark Tuan" en Google.

—Pues yo digo que deberíamos correr el riesgo —opinó el baterista—. Será genial si todo sale bien. Y bueno, si sale mal, simplemente lo superaremos y con el tiempo vamos a terminar recordándolo entre risas.

—¡Claro que no! Debemos tener cuidado —habló Hyun Jin, cruzando los brazos por encima de su pecho—. Podrían estafarnos, eso no sería ni un poco gracioso, Woozi.

Lee Know pasó los siguientes diez minutos buscando más información sobre el tal Mark Tuan. Su nombre no aparecía en ninguna de las listas de estafadores que había encontrado, su perfil se veía auténtico y, según varios artículos en páginas confiables, ya había descubierto talentos y colaborado con otras bandas antes.

Fue así como finalmente decidieron marcar el número en la tarjeta y agendar una cita.

Mark Tuan fue amable con ellos en todo momento, mostró interés genuino y tardó poco en conseguirles un espacio para grabar un par de canciones e incluso un viaje todo pagado a otra ciudad para que se presentaran ante una audiencia pequeña. Su promesa fue que Healing Voices iba a crecer.

Canciones escritas con el corazón [HyunMin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora