No Todos los Isekai comienzan de la misma manera, y para nada tu dedo Dorado es tu propia casa moderna.
Raúl no sabe si tiene una Gran Suerte o una de las Peores en su vida, pero el Esta seguro de algo.
Nada ni nadie lo detendrá de progresar... de A...
Hoy me había despertado, con la esperanza que todo lo que paso ayer solo había sido un asombroso sueño, pero lamentablemente para mí no era cierto.
-¡Jefe, despierte!- fue la dulce voz que sonó fuertemente en toda mi habitación.
-Ya voy...- dije en un bostezo mientras maldecía haber instalado un sistema de audio tan bueno en mi habitación.
Después de hacer mi rutina diaria, pero esta vez aumentando unos cuantos balanceos con una espada de madera que tenía por ahí.
Claramente todo esto supervisado por Cortana que se adueño de toda la tecnología de mi casa.
-¡Vamos jefe!- animo Cortana mientras me veía entrenar con pesas de 20 kilos en cada brazo -¡Demuestra que esos músculos no están de adorno!- animaba ella mientras balanceaba imitaba las técnicas que ella hizo para mi.
Durante la noche Cortana había diseñado un programa de entrenamiento para poder llevar mi cuerpo a lo mínimo para un Spartan 4 para que pudiera usar la armadura que estaba tomando polvo.
-Sigue así de bien dentro de 2 años podrá oficialmente llamarse un Spartan- dijo ella mientras calculaba rápidamente mi progreso. -Ahora haga 20 repeticiones con su espada- instruyo ella mientras en la tele de mi Gimnasio se mostraba a un hombre balancear la su espada con técnica y maestría -Trate de emular sus movimientos, yo lo corregiré si hace algo mal- después de eso, seguí con el entrenamiento hasta que había emulado perfectamente cada movimiento 20 veces.
La sesión de entrenamiento duro unas buenas 2 horas ya que jamás había aprendido a usar una espada, pero gracias a que era cinta negra en Karate, no se me fue tan difícil.
-Eso es todo jefe- dijo Cortana mientras finalizaba mi entrenamiento -Usted no está mejorado Genéticamente, así que no podemos hacer nada mas hasta que pasen las 42 horas de la regeneración de sus músculos. - dijo ella mientras salía del Gimnasio después de limpiarlo.
Dando un asentimiento cansado, me dirigía hacia el baño donde tome un relajante baño que tranquilizo mis músculos adoloridos.
Después de media hora de relajación fui por un desayuno ligero, para después sentarme en mi sala.
-Cortana maneja mi dron y dime que vez- dije mientras sacaba un de largas distancias. -En estos momentos agradezco a mis amigos y sus extremos gustos- dije para mi mismo mientras recordaba la vez que ayudo a grabar un video de paracaidismo con este mismo dron.
-En eso- dijo ella mientras tomaba control del dron y su cámara -Jefe... el Dron no gasta su energía- dijo ella haciendo que me sorprendiera.
-Veo... sigue veamos si gasta menos- dije mientras abría una ventana y dejaba que el Dron volar hacia fuera.
El dron funcionaba por vía Internet, que por cierto a pesar de no tener ningún satélite, este aun servía, o por lo menos toda la información de antes de que apareciera aquí.
Sabiendo que Cortana se tardaría un Rato decidí ir a revisar mis autos, mas en concretamente el Camaro modificado.
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