✧: ・──── NO ME DEJES.
. ⌲◟⿻. - ،، . . . And I think this is the
beginning of my end... Or
maybe it is the beginning
of my new life . . . ❍ ༚ཻ*⋆
﹀﹀﹀﹀﹀﹀﹀﹝📖 ;; ﹀﹀﹀﹀﹀﹀﹀
₊❏❜...
🌁💔˚₊ 𓏲࣪◜NO ME DEJES presents to us ━━ Act three: chapter four
──── ・: ✧ ∙ ✦ ∙ ✧: ・ ────
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
──── ・: ✧ ∙ ✦ ∙ ✧: ・ ────
Narra Melissa
Tiene el mapa en las manos así que tiro las cosas que se encuentran en la mesa para que Thomas lo estampe encima.
—Aquí, es aquí —señala el sitio y alza su vista directo a Vince—. Son algunos kilómetros, basado en las vías y en todo lo que nos dijo Aris deben dirigirse allá.
—Ahí es a donde llevan a Minho —añado como si eso fuera a convencerlo, aunque sé que no será así.
—Llevaremos a quien pueda pelear, usaremos caminos donde se pueda, volveremos en una semana.
—¿Qué cosa? —rechista con voz áspera como si no nos entendiera—. Nos llevó seis meses llegar aquí. Ahora tenemos a más de cien jóvenes, no podemos quedarnos aquí para siempre, después de lo que logramos tú quieres... deambular hacia un punto al azar en el mapa. ¡Ni siquiera sabes que hay ahí!
—Yo si —su figura aparece al inicio de la puerta y se va adentrando al sitio a paso lento, aunque decidido—. Fui hace algunos años, pero... Estuve ahí. The last city, así la llamo CRUEL. Era su base de operaciones.
Va posando sus ojos en cada uno de nosotros hasta detenerse en Thomas.
—Si esa ciudad sigue ahí —termina de caminar y lo observa severo—. Es el último lugar al que quieres ir, hermano.
Siguen sin entender que: si a Thomas le dicen algo, siempre va a hacer lo contrario.
—Es la boca del lobo —espera que con eso terminemos asustados y demos por zanjada la conversación.
Pero lo que no sabe es que nosotros nos estamos convirtiendo, literalmente, en el lobo.
—No es nada que no hayamos hecho antes —intenta fanfarronear consiguiendo que los dos adultos lo fulminen con la mirada.
—Si, pero con meses de planeación e información confiable —dice a modo de regaño como si se tratara de un niño pidiendo una piruleta—. El elemento sorpresa, ¡no tenemos nada de eso!
—Vince, ya lo pensé, solo escúchame...
—¡Oye! La última vez que salimos sin preparación yo lo perdí todo —no deja que termine de hablar y vocifera hastiado, entona la última palabra—. ¿Lo olvidaste?
Bajamos la cabeza avergonzados al recordar la situación.
Todo esto que estamos intentando hacer es por Minho.
