Cap 28

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Alex

Salgo de la habitación dejándolo con mil dudas, puedo sentirlo, pero no me detengo y camino por los pasillo de piedra.

Es increíble todo lo que puedo percibir y sentir, es como si cada celula a mi alrededor formara parte de mí. Estaba obnubilada.

Al llegar a la sala común donde cientos de personas compartían y hacían actividades juntos pude ver los hilos de luz que lo unía a todos, pude sentir sus emociones y era excitante, tan vibrante que me hacía querer más.

- Alex. ¿Estás bien? - Sentí la mano de Cooper tocar mi hombro sacándome de mi ensueño.

- Si. ¿Por qué? - Pregunté mirándolo y concentrándome en él. Se veía tan... radiante.

- No sé, es que te ves.... diferente. - Frunció el ceño y yo ladeé la cabeza.

- Me siento diferente. - Respondí siguiendo su hilo en dirección a la chica que estaba arreglando unas cosas con otras mujeres de la manada. Su compañera.

- Alice es un sol, deberías conocerla de cerca. - Lo miré por el rabillo del ojo.

- Seguro que si. Necesito hablar con Matthew. ¿Sabes donde está? - Asintió.

- Justo detrás de ti. - Me volteo y es cierto, Matt se dirige a mí al lado de Chris y entro en sus pensamientos bajando el bloqueo para saber que ha hecho. Lo que escucho no me gusta para nada.

- Alex. - Saluda Matt cruzando los brazos serio.

- Traidor, así que eso es lo que piensas. - Me dirijo a Chris.

- Alex, lo que pasó hace rato no está bien. Vladimir entró en tu cabeza, lo pude sentir. - Se excusó.

- No sabes nada. - La ira empezó a crecer dentro de mí a pasó agigantados, era como un torrente, un vendaval, un tsunami que arrasaba con todo su paso.

- Alex, es sabido que ustedes están conectados, tú y Vladimir son como el mismo ser. - Empezó Matthew, pero yo solo sentía ganas de romper todo. - Chris me dijo que ambos bebieron de la sangre del otro, la sangre es un pacto de muerte y de unión irrompible, pero las veces que se hace acaba con los involucrados si no son almas gemelas. Debo suponer que en seres tan poderosos como tú y Vladimir... - Lo interrumpí antes de que pudiera decir otra absurdes.

- No es nada de lo que creen, esto es asombroso, puedo ver y sentir todo a mi alrededor, cada partícula, nunca estuve tan viva. - Negué. Ellos se miraron entre sí.

- Exacto, no puedes dejar que te quiten esto. - Escuché su voz en mi cabeza. - Son inferiores a nosotros, Alex, ver un ser más poderoso que ellos los hace querer destruirlo.

- Sal de mi cabeza. - Susurré.

- Alex, escuchame. - Chris se acercó, pero lo alejé.

- ¡No te acerques! - Los que estaban allí empezaron a mirarnos. - ¡No tienen nada que ver aquí, larguense! - Grité.

- Alex, te queremos ayudar. - Esa era la voz de Matthew.

- ¡¡NO!! - Volví a gritar y las ráfagas de poder salieron de mí empujandolos a todos. Era una energía que no había sentido antes. Ni siquiera me había esforzado, pero allí estaba el poder.

- ¡Alex, detente! - Gritó Cooper en compañía de Aranna y Aria que recién llegaban.

La energía salía de mi por todos lados, y ellos sufrían, eso me hacía sentir bien así que no la detuve.

Una onda sonora muy fuerte llegó a mis oídos y reconocí la habilidad de Aria, no me iba a detener, yo era más fuerte que todos ellos juntos.

Moví mi mano y el hielo salio de esta creando estacas que lancé en su dirección.

Mordida De Licántropo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora