Marcy, que había colocado a Shasha en el suelo, se dio cuenta de que esta había perdido el ojo izquierdo en el combate contra Sonia, dejándola inconsciente por el dolor. La azabache usó agua para limpiar la herida, y tranquilizó a la moribunda rubita.
Sonia mientras tanto, jugeteaba con el ojo de cristal de Grime, aprovechando que este no podía defenderse.
- Capitán Grime, es una pena que me encontrarás de frente- comentó el demonio.
El sapo no respondió,ofendido y humillado a no poder más.
Cuando el cambia formas se hubo aburrido de molestar a Grime, se arrimo a una terriblemente inexpresiva Marcy.
- Oye, ¿Te has muerto por dentro o qué te ocurre? - preguntó sentándose junto a ella.
La azabache afirmó y puso cara de tristeza.
El demonio se la llevo a un lugar apartado y señaló a la asiática que se colocara con las piernas cruzadas, para luego sentarse delante de esta.
- Voy a hacer un ritual para devolverte la alegría- explicó Sonia- Puede que pierda la mía, pero total, me conviene ser una asesina sería.
Marcy la miró extrañada, aunque se encogió de hombros.
Sonia empezó a recitar algo en un idioma desconocido, mientras las piedras empezaban a levantarse. Un aura empezó a ser emitida desde el cuerpo del demonio, pasando del amarillo al rojo, del rojo a un azul intenso, de este a un morado y del morado a una densa aura negra. El aura se expandió hasta Marcy, y, tras una onda expansiva, el ritual acabó.
La joven asiática, se sentía genial, aunque se fijó en la sería cara del demonio.
-¿Estás bien? - le preguntó acercándose.
- Genial, MarMar, anda, vete a cuidar de tu amiga- respondió este dándole una palmadita de apoyo en la espalda.
Cuando la joven ranger se hubo ido, Markus se presentó al lado de Sonia.
-¿Que has hecho, Claymore?- preguntó intrigado.
- Le he dado energía, simplemente ella lo ha transformado en algo que la beneficie emocionalmente- Explicó la pelirroja.
-No se que has dicho pero capto el concepto, gracias Claymore- dijo Markus.
Marcy se había dirigido a donde estaba Shasha, que seguía delirando. La azabache recordó como ella había tenido que fabricarse un vendaje para el arañazo del Scorpileo, y fabricó uno utilizando la agilidad de Yunnan para recogerla por sí se caía, que ocurrió.
- Eres torpe, chiquilla- se mofó la salamandra.
La azabache le guiñó el ojo y corrió hacia la alemana. Cuando llegó junto a esta, le colocó el vendaje y le echó agua en la cara para despertarla. La ahora tuerta Shash la observó sin hablar.
-Estarás bien, no te preocupes- afirmó Marcy acariciándola con timidez- vas a salir de esta, no te preocupes, me encargaré de que todo salga bien.
La asiática se reunió con sus tres compañeros.
- ¿Cuándo partiremos? - preguntó Sonia
- Mañana por la mañana, y respecto a los prisioneros, ahora que ya pueden andar ya no cargaremos con ellos- anunció Yunnan.
- Así que ya sabéis, nos vamos a dormir y mañana empezamos el viaje- comentó Markus.
Los cuatro asistieron y se fueron a dormir.
Al día siguiente empezaron la marcha.
Markus lideraba la marcha, seguida de Yunnan y Sonia escoltando a un maniatado Grime y en la cola se situaba Marcy, que vigilaba y ayudaba a Shasha.
Poco después de empezar el viaje la rubita se dirigió a la azabache.
-¿Por qué intentas ayudarme ahora? - preguntó.
- Supongo que en el fondo sigues siendo mi amiga- respondió Marcy sonriendo.
Shasha aún no estaba segura de si podía volver a confiar en MarMar, así que la alemana decidió actuar como si confiara en su amiga.
Tras una larga caminata bajo la lluvia, los cuatro viajeros pasaron un momento por Ribbitbale, aunque no pudieron parar para comer algo debido a los elevados precios de absolutamente todo en aquel pueblo de pijos, como lo calificó Shasha.
Después de una parada en un pueblo pequeño, con una visita incluida a la cabaña del misterio, Shasha vomitó y se desplomó en el duelo, débil e indefensa. Esto provocó una reacción violenta en Grime, que apenas pudo ser controlado por Yunnan, mientras Marcy y Markus ayudaban a la alemana a levantarse. La rubia se sentía horriblemente mareada y sentía dolor en cada centímetro de su cuerpo, pero era demasiado orgullosa como para admitir como se sentía.
Markus se dio cuenta del estado de Shasha y la cargó en su espalda con algunas complicaciones.
Pese al incidente, Sonia estaba pensando en otras cosas. Había analizado la Caja, pero Calamity no había aparecido en ningún momento para molestar. La pecosa mujer decidió estar alerta durante la noche, por sí Calamity o Andreas hacen algo en contra del Grupo.
Markus y Yunnan no encontraron ningún refugio más cómodo y seco que debajo de un árbol, así que el sexteto no tuvo de otra que dormir bajo el árbol.
Al no poder dormir, Marcy se alejó del árbol, y se unió al vigilante demonio, que estaba ocupado mirando las estrellas.
-¿Qué haces, Sonia? - preguntó la azabache.
-Pensar en la caja- replicó esta- ¿puedes pasármela? - preguntó dirigiendo su mirada a la chica.
Esta se la dio tras rebuscar un poco en su mochila.
El demonio la analizó de nuevo.
- Así no podrás usarla, está descargada-sentenció el demonio- además, no deberías usar esta caja.
- ¿Por qué? - Preguntó la azabache extrañada.
-Mira, la Caja se ha ido corrompiendo debido a un uso excesivo, y está emanando un poderosa aura oscura- dijo Sonia soltando asqueada la caja- te aviso, probablemente el próximo que la usé termine mal, muy mal.
La joven asiática recogió la Caja y le restó importancia
- No te preocupes, no pasará nada.
La pecosa se encogió de hombros y siguió mirando a las estrellas.
- Ya lo veremos.
946 palabras
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Desventuras de una Azabache (En Reescritura)
FanfictionEn este universo alternativo de la serie de Amphibia se explora el que hubiera pasado si Marcy Wu hubiera caído en una zona un poco menos favorecedora...y con algunos cambios en la caja de la calamidad
