COLD HANDS

CAPITULO VIII

"El corazón perdona, pero la mente jamás olvida."
***

Al otro día me desperté tan emocionada, que ni siquiera noté que me había puesto la bata al revés.

Fui a mi primera clase de encantamientos con el profesor Filius Flitwick.

No ocurrió nada interesante, solo lo típico de siempre que ocurre desde que comencé el colegio...
El idiota de Malfoy intentando llamar la atención, se estaba burlando de un compañero por ser obeso.

Terminando las clases fui directo a almorzar. Me encontré con Hermione en la entrada así que me acerqué.

—Hola — Dije vagamente mientras bostezaba.

No respondió así que deje de bostezar y la mire atentamente con un gesto confuso.

—Oh h-hola. — Respondió en un tono cortado. Noté que no paraba de darle pequeños golpes al marco de su libro, parecía nerviosa.

—¿Estas bien?

—Harry me ignoró toda la tarde. — Respondió sería y con una mirada baja, parecía avergonzada de tener que confesar que no pudo sacar ninguna información sobre lo que ocurrió ayer.

—¿En serio? Eso es raro.

Sabía que no era común de Harry ignorarla, es su mejor amiga; probablemente la evade por que le incomoda hablar del tema o simplemente sabe qué Hermione me lo contará y no está de acuerdo con eso.

—¡Lo se! Eso sería muy esperado de Ronald, ¿pero de Harry?. — Dijo levantando un poco el tono.

Deje escapar un pequeño suspiro.

—Mañana quizás hable con el. — Intente calmarla.

No puedo seguir metiendo a gente en esto.

—¿Por que mañana?.

—Estoy muy alegre como para que un varón me arruine el día. — Anuncie mirando a la gente que pasaba.

—D-I-G-G-O-R-Y — Deletreó mientras tosía y hizo fuerza con sus labios intentando no reírse.

—¡Oh es cierto! —Recordé—. Casi lo olvido.

—¿Que cosa? — Antes de que Hermione pudiera terminar de preguntar comencé a relatarle todo lo ocurrido con Diggory el día anterior.

Le conté todo, desde el encuentro con Riddle hasta la ultima palabra que compartimos.
Ella y yo teníamos tanta confianza, que hasta le hice una demostración de como me beso.

—¡Wow! en serio sabe como manejarse contigo. — Dijo mientras planteaba una sonrisa en su rostro.

—Supongo.

Era raro, me sentía rara, era como si...no lo se, me faltaba algo más.

—Aún que ciertamente hay algo que no me cierra de el. — Continúe y baje la mirada.

—¿Algo como que? Yo creo que hacen buena pareja.

Giré mis ojos hacia ella, iba a continuar hablando.