NUESTRA REALIDAD © M-PREG

Parte 22

La primera semana del año fue caótica, Stiles pasó casi todos los días trabajando por la cantidad de casos que surgieron luego del año nuevo. Era fin de semana, por fín había podido llegar a casa antes del anochecer, y al hacerlo encontró a Derek preparando la cena con Leo sentado en la silla para bebé mientras comía trozos de verduras. 

—Llegas temprano —dice el lobo apenas lo ve

—Pude escaparme antes, realmente necesito un descanso —se queja mientras va directo a su bebé —¿Cómo está el bebé más hermoso de este planeta? —pregunta llenándolo de besos mientras el niño ríe. Derek sonríe ante la escena e involuntariamente dirije su mirada al trasero del ojimiel. 

—Stiles —llama y este hace un sonido con la garganta —Ven aquí un momento —llama soltando lo que tenía en la mano y espera a que el castaño llegue a él con la mirada completamente confundida —¿Estás embarazado? —pregunta y puede ver la mirada del castaño aterrarse por un momento. —Maldita sea —murmura negando

—Derek...

—¿Cuánto tiempo tienes? —pregunta respirando profundo. Stiles siente sus manos temblar automáticamente y traga saliva alejándose un par de pasos —¿Hace cuánto lo sabes? —repite y Stiles sabe que está enojado y su mundo acaba simplemente de venirse abajo. 

—Lo siento, yo... creí que... —su voz se quiebra y su pecho duele —Lo siento mucho Derek... —

—Stiles 

—No, yo... iba a hablar contigo, pero no creí que pudiera ser un problema, no creí... —se aleja unos pasos más sin mirarle y contiene las lágrimas con todas sus fuerzas —Creí que por fín estabamos en la misma página, que esto era lo que queríamos ambos y yo... solo estaba esperando el mejor momento para decírtelo —

—Stiles yo no

—Sí, lo sé, sé que probablemente te basta con uno y... —apuntó a Leo quien lo miraba fijamente con la boquita abierta y no pudo contener más el llanto, de nuevo estaba echándolo todo a perder. 

Sintió los brazos de Derek a su alrededor y luego dejó de sentir el suelo bajo sus pies y pronto sintió algo blando y cómodo, pero el pecho del alfa nunca se alejó. —¿Por qué no me lo dijiste?—pregunta el lobo luego de un rato

—Yo solo... tenía miedo de cómo fueras a reaccionar —admite y Derek cierra los ojos sintiendo su sangre arder, pero ni siquiera podía hablar —No quiero obligarte a nada, pero cuando me enteré que... cuando lo sentí, yo... —se detiene con un nudo en la garganta y abraza al mayor con fuerza —No quería perderte de nuevo Der... lo siento —

—No vas a perderme nunca más Stiles —dice rotundo y se aleja a mirar al castaño —Nunca más ¿está bien? —

—¿Estás seguro?—

—Te pedí matrimonio Stiles —

—Pero otro cachorro es...—

—No lo es, y... entiendo que tengas miedo porque fui un completo imbécil contigo en el pasado y es totalmente comprensible y aunque me siento herido sé que me lo merezco, pero aun así, por favor no me ocultes nada más nunca —dice casi rogando y Stiles aprieta los labios y asiente, y las lágrimas vuelven a brotar —¿Qué sucede? —

—Yo... realmente quería decirtelo —dice entre hipidos —Por eso tengo tanta hambre y no estoy bebiendo alcohol y... probablemente estoy engordando... —

Derek no puede evitar besarle en ese momento porque su cara toda llena de lágrimas y sonrojada es simplemente encantadora. Y sonríe en medio del beso y le abraza muy fuerte. 

—Me haces muy feliz Stiles —murmura sintiendo un inminente miedo a perder esa felicidad en cualquier momento. —Tu trasero está más grande también, pero no me quejo en absoluto —dice de pronto y ambos comienzan a reir fuertemente.

Fin.