Destelloz y Granadas de Fragmentacion

mas oscuro antes de la luz parte 1

Casi sería demasiado fácil matar a Vi Kiramman.

Ella era presa fácil. Tenía la cabeza gacha y la guardia también, y estaba tan comprometida emocionalmente que Lux dudaba que Vi fuera capaz de reaccionar a un ataque lo suficientemente rápido.

¿Cómo lo haría Jinx? Así es. Bajo y al costado. Los zaunites siempre vienen por debajo y hacia un lado. Cuchilla hacia atrás, a la izquierda de la columna y cuarta lumbar hacia abajo. Vi se desangraría como un cerdo clavado encima de la perra de su esposa. Le tomaría el tiempo suficiente morir para que Lux pudiera susurrar el nombre de Jinx en el oído de Vi, para que supiera por qué se estaba muriendo.

Pero eso sería demasiado fácil. Demasiado fácil y demasiado rápido.

"Vine tan pronto como me enteré", dijo Lux en voz baja mientras cerraba la puerta detrás de ella. "¿Cómo lo llevas?"

Pommel en la parte posterior del cráneo tal vez. Aturdirla y atarlo. Quizá cortarle la mano. No. El de Caitlyn. Corta ese miserable dedo del gatillo y haz que Vi mire.

“Soy, eh…”, comenzó Vi, luego se apagó y negó con la cabeza. “Joder, lo siento, uhm, no sé. Lo siento, Cupcake es mejor en este tipo de cosas que yo”.

"Está bien no estar bien, ya sabes", dijo Lux mientras se movía para sentarse en la silla libre frente a Vi. 

Sonreír. Sonríe como si fuera enserio.

“Nadie espera que estés bien cuando la persona que más amas se lastima”.

Vi la miró y Lux rezó para que su sonrisa fuera al menos algo que se aproximara a la normalidad. Por lo que sabía, estaba sonriendo como Jinx; de oreja a oreja, con los ojos muy abiertos y la violencia iluminándolos por detrás.

Lux luchó por no suspirar de alivio cuando Vi le devolvió la sonrisa. Ella debe verse por lo menos semi-normal.

"Sí, yo eh, supongo que eso es cierto, ¿eh?" Vi negó con la cabeza y miró a Caitlyn. Vi nunca soltó su mano.

Caitlyn se veía mal, no había forma de evitarlo, pero los médicos les habían asegurado tanto a Vi como a Piltover que el Sheriff se recuperaría por completo. Aunque no sin una cicatriz desagradable. La herida en su costado había sido brutal, Lux podía decir eso por la cantidad de empaques manchados en ella.

“En total, tiene bastante suerte”, continuó Lux, ganándose el ceño fruncido de Vi. Lux le dedicó una sonrisa pálida y señaló la herida. "¿Ver? Si las inyecciones la hubieran llevado incluso una pulgada más adentro de su abdomen, habría perforado los intestinos o algo peor. La sepsis habría aparecido rápido, demasiado rápido para los médicos de Piltovan. Tal vez incluso demasiado rápido para un maestro cirujano demaciano.

Con cada palabra, Vi se ponía más pálida y el rostro de Lux dolía mientras se obligaba a mantener su sonrisa beatífica pegada. Sin embargo, el dolor que llevaba Vi no era suficiente para Lux.

"Mi familia ha sido militar demaciana durante generaciones, recuerda, así que he visto toda la gama", dijo Lux suavemente.

“S-Sí, supongo que sí”, respondió Vi, aunque su voz había adquirido un tono especialmente hueco.

Sin embargo, tú también lo has visto empeorar, ¿no es así? ¿Crecer en Zaun?

Vi asintió. "Sí", dijo en voz baja. "Bueno, más o menos... era solo Entrañas en ese entonces, y crecí mucho más en Stillwater que en Zaun".

¿La prisión? Eso era nuevo. "¿Qué hiciste?" Preguntó Lux.

“Nada”, dijo Vi. “Era el viejo sheriff, un idiota sin agallas que lamió las botas de un sociópata asesino llamado Silco”. El rostro de Vi se retorció de dolor y rabia cuando se volvió hacia la forma comatosa boca abajo de Caitlyn. "El mismo bastardo que tomó a mi hermana pequeña y la convirtió en... en Jinx".