emitidos en luz de neon parte 3

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"¿Cuánto tiempo has estado despierto?"

Jinx respondió encogiéndose de hombros en silencio mientras continuaba pasando sus dedos arriba y abajo de la columna vertebral de Lux. Le provocó pequeños escalofríos en la espalda y le puso la piel de gallina en los brazos, pero en el buen sentido. Los dedos de Jinx no eran particularmente suaves, ciertamente no se parecían en nada a las manos de la hija de un noble, o incluso a la hija de un comerciante.

Había una aspereza en ellos que hablaba de una vida de desgaste acumulada en el tiempo que Jinx había vivido, que no podría haber sido mucho más que Lux, y eso asumiendo que Jinx era el mayor de los dos. , de lo que Lux no estaba segura.

"Eres suave." Jinx sonrió. Por lo general, sonreía, pero había algo un poco diferente en la forma en que se formaba la expresión en su rostro cuando miraba a Lux.

Era un poco más suave alrededor de los bordes.

Y, de alguna manera, un poco más desquiciado.

"¿Te gusta 'suave'?" Preguntó Lux.

Jinx asintió, ganándose una sonrisa de la joven a su lado. Jinx, por otro lado, volvió a caer en ese rictus neutral, y Lux frunció el ceño mientras liberaba su brazo, con cierta dificultad, de debajo de la masa de mantas debajo de las cuales habían terminado enterradas en el transcurso de la noche anterior. en la mejilla de Jinx.

"Oye, no hagas eso", dijo Lux en voz baja. "¿Qué ocurre?"

"N-No-"

"No me mientas, Jinx". No quería que eso sonara como una súplica, pero era todo lo que Lux tenía en ella. "No tú. Por favor... por favor, no mientas.

Una densidad se instaló en el aire mientras los temblores recorrían el cuerpo de Jinx, subían y bajaban por su espalda y piernas y a lo largo de sus hombros, y una contracción se apoderó de los músculos justo debajo de su ojo izquierdo.

"Está bien", dijo Lux, inclinándose y rozando sus labios contra los de Jinx, "solo dime".

Jinx tragó saliva varias veces antes de finalmente lamerse los labios y abrir la boca. "Soy... no soy... blando". Una risa como un hipo escapó de sus labios,

Lux resopló una pequeña risa.

"¿Fue eso?"

Acomodándose más firmemente contra Jinx, Lux acarició su cuello y el músculo delgado de sus hombros, depositando besos sobre las cicatrices y muescas que encontró allí antes de volver a mirar a los ojos de Jinx.

"No tienes que ser suave para mí". Lux enredó sus dedos en el cabello de Jinx y tiró de ella hacia abajo hasta que su rostro quedó enterrado contra el cuello de Lux.

Dedos diestros encontraron agarre en la piel suave, agarrando la cintura de Lux y Jinx arrastrando profundas corrientes de aire. Mientras tanto, Lux clavó sus uñas lentamente en la nuca de Jinx, rascando líneas rojas entre sus omóplatos con una mano mientras la otra se clavaba en la parte baja de su espalda.

Un siseo escapó de los labios de Jinx y una sonrisa se dibujó en el rostro de Lux mientras mordisqueaba la oreja de Jinx.

Presionando a Jinx con más fuerza contra su cuello, Lux presionó sus labios en un rastro de besos por la mejilla de Jinx, su mandíbula y su cuello, y sonrió contra la piel tensa que encontró allí. No había ni una pulgada de 'suave' en Jinx. Nada que le recordara a Lux a Demacia y su fachada brillante y reluciente. Sin máscaras en absoluto.

"Te mostraré", susurró Lux.

Y mordió, suavemente, el músculo firme donde los delgados hombros de Jinx se unían a la columna de su cuello. Jinx se estremeció cuando Lux chupó la piel antes de pasar la lengua por el moretón que se estaba formando rápidamente y depositar un beso sobre él como un lazo en un regalo.

Destelloz y Granadas de FragmentacionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora