Capítulo I

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-Sir Nicholas, tenemos noticias que nos informó su padre sobre el reino vecino- dijo Evan, el sirviente -al parecer su padre ha invitado al próximo sucesor al trono, Karl Jacobs.

-Wow, que interesante noticia- dijo con un tono sarcástico -y no me digas "Sir Nicholas", dime Nick.

-Si lo siento, su alteza- rápidamente se calló al ver la cara de su superior -digo, Nick.

Nick tan solo se rió y fue a ver a su madre que estaba en el jardín, no quería ser grosero o algo por el estilo, pero siendo sinceros ese tal Karl no iba a ser de su agrado, por simples razones:

Se casaría con su hermana y el pelinegro siempre fué el típico hermano protector. Sin hablar de que su hermana tampoco estaba muy entusiasmada de casarse con Jacobs, ella anteriormente había escuchado hablar de que Karl era un encanto y muy -muy- hermoso.

Mentiría si dijese que no le llamaba la atención, quería conocerlo y quizás tratar de conquistarlo. Pero luego le dieron la noticia de que el castaño sería su esposo. Así es, todo por conveniencia -cabe aclarar que Karl ni siquiera estaba enterado de esto, sus padres arreglaron todo con los padres de Nicholas- y si bien, Rue antes quería tener algo con ese príncipe, ahora no quería ni siquiera conocerlo, que pasaría si no se caían bien y se casarán? Todo sería como el matrimonio de sus padres y no es algo que Rue quiera. Si ella se enamora quiere que sea algo especial, no que sea todo por conveniencia -igual no descarta la idea de enamorarse del castaño.

Pero ahora veamos el porque a Karl no parece agradarle Nick.

Anteriormente -muy anteriormente- Nick ya había escuchado de Karl, de sus ideales y de donde provenía el y su familia pero le pareció todo muy aburrido. Quiero decir, un chico que vive en el medio de la nieve y que -según sus conocidos- no sale nunca al exterior, ¿qué podría saber el de mantener a un reino?.

-Mamá, ¿te puedo hacer una pregunta?- la mujer sin siquiera observarlo asintió -¿por qué han invitado a Karl Jacobs a Draigonske?- dijo con un tono serio que a cualquier persona intimidaria, pero su madre lo conocía bien y sabía que solo tenía la duda.

-Cariño, sabes que ellos son un reino muy poderoso y con tu padre pensamos que lo mejor sería hacer una alianza. Somos un reino poderoso y fuerte, pero es mejor estar aliados con ellos a que en un futuro estar en guerra con ellos- dijo tranquilamente su madre, Anne.

El pelinegro tan solo asintió pero parecía perdido en su cabeza, algo que Anne captó como la finalización de esta -corta- charla.

-Ahora- empezó diciendo Anne -si ya no hay más preguntas, mis docellas me estan esperando para prepararme para la bienvenida de hoy a la noche.

-Espera, madre ¿quién viene hoy?- preguntó Nick sin entender mucho la situación.

-Ay cariño nos olvidamos de decirte, Karl estará viniendo hoy!- dijo entusiasmada -ahora si querido, debo ir a prepararme.

Y sin decir una sola palabra, su madre se había ido y el estaba solo en el jardín. Después de varios minutos, se empezó a preguntarse como se vería Karl, y digamos que al parecer ese chico habría "llamado su atención", pero después Nick lo pensó mejor y se dijo a si mismo que no podría estar interesado en alguien que ni siquiera había visto.

Se fué del lugar todavía pensando en sus asuntos y llegó a la sala de reuniones en dónde estaba su padre y sus caballeros, al parecer estaban haciendo estrategias y un plan táctico para atacar a lo que parecía un reino. Todo esto era extraño, Nick casi siempre se enteraba de todas las estrategias y más si eran para combatir, el era muy bueno en eso, pero ¿por qué ahora todo era diferente? No entendía el porque su padre no le había comunicado sobre esta -misteriosa- reunión.

The crown || KarlnapDonde viven las historias. Descúbrelo ahora