Capítulo 9

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Deslizó un hermoso vestido corto blanco de manta por su piel lechosa y bien cuidada, un vestido hermoso en corte A de cuello cuadrado con un cordón delantero, las mangas farol le daban el toque elegante y fresco, ese toque veraniego pues el tiempo lo ameritaba. Por alguna razón se sentía nervioso y eso es muy extraño para él, saldría con el maldito de su jefe a quien no soportaba para nada ¿por qué se comportaba así? Él no soportaba a su jefe así que no habría razón para que se pusiera nervioso, ansioso y torpe, ¿verdad?.

Jin le hizo un maquillaje suave, no tan cargado y le puso algunos accesorios además de hacerle un peinado que resaltará las hermosas ondas de la peluca que aunque no fuera su cabello real, le quedaba precioso, Jin le hizo un peinado con dos trenzas que dieron media vuelta por su cabeza para juntarlas y hacer un bonito moño con el cabello sobrante, la parte trasera se veía bellísima el pelo suelto formaba rulos bonitos al final estilizo el fleco dejando unos hermosos babyhairs a los costados de sus orejas, sonrió satisfecho al verlo.

—Listo, Kook. —El mencionado se levantó y Jin lo llevo hasta el espejo de cuerpo completo de la habitación.

—Es bellísimo, Jin hyung. —Jungkook sonreía encantado de verse, nunca pensó que vestirse como chica le quedaría tan bien.

—Más bien, te ves bellísimo.

Escuchó el timbre de la suite y fue a ver, sabiendo quien era ya que estaba esperándolo, tomó su bolso que combinaba con sus tacones y rápidamente corrió hacía la puerta, encontrándose con su acompañante de esa noche. Jungkook quedó embelesado al ver la vestimenta costosa de Kim, llevaba una camisa blanca con tres botones sueltos que estaba fajada en un pantalón gris de corte recto, elegante y casual a la vez, muy atractivo.

—¿Lista, señorita Ye In? —Le ofreció su brazo.

—Sí, señor Kim. —Enrolló su mano en el brazo del moreno, no pudo evitar oler la colonia masculina de Taehyung, olía muy bien.

El chófer del mayor les abrio la puerta, entrando el primero y después Taehyung, se sentó cruzando sus piernas mientras el moreno le miraba y se dedicaba a sacarle plática para hacer más entretenido el viaje al lugar al que Kim le llevaría.

—Permitame decirle que se ve muy radiante está noche.

—Gracias, señor Kim a decir verdad usted no se queda atrás, se ve muy apuesto. —Ambos hacían contacto visual, no despegaban sus miradas.

—Gracias aunque me gustaría que nos habláramos de tú, más íntimo.

Jungkook iba a decir algo más pero visualizo que llegaron al lugar, un club en donde la música latina se escuchaba, era como una cabaña en la orilla de la playa, muy tropical.

Taehyung bajó, dándole la mano para que pudiera el seguirlo, posó su mano en el brazo del hombre mayor y se adentraron al club, viendo a las personas bailar animadamente o hablar en grupo en las mesas la mayoría de las personas se notaban extranjeras, lo más seguro es que todos son latinos.

—¿Qué te parece el lugar? —Se estremeció al sentir el aliento del moreno en su oreja.

—Es muy cálido, me gusta. —Muy cerca, demasiado cerca estaban.

—Eso es algo bueno, ¿quieres ir a sentarse y pedir algo o quieres bailar?

—Me encantaría que me enseñaras esos pasos que tanto decías.

Taehyung dio un trago grueso de saliva al verla, le recordaba tanto a Jungkook y eso es lo peor ¿por qué por su mente cruzaba siempre la imagen de él? Desde que pudo ver a detalle a Ye In, veía que las mismos lunares de Jungkook estaban en su rostro, su carácter y su forma de hablar, lo estaba atormentando ¿sería su castigo por tratarlo mal? ¿Tener a Jungkook en su mente las 24/7 es su karma?.

—Sigue mis pies y siente el ritmo.

La tomó de la cintura, haciendo que moviera sus caderas al ritmo de la música, comenzó moverse su pie izquierdo adelante y el derecho atrás, con las indicaciones de Taehyung, él menor hizo lo mismo invirtiendo la secuencia, su pie derecho atrás y el izquierdo adelante.

—Hazlo al ritmo, verás que será fácil. —Le susurró al oído, rozando sus labios en su mejilla, Jungkook sintio los vellos de su piel erizarse.

—¿Lo estoy haciendo bien? —Hacía los mismos pasos que Taehyung pero sus caderas lo hacían de forma suave y sensual pues había visto a las mujeres del lugar hacerlo.

—Aprendes rápido, lo haces bien.

La salsa la música más sensual, pasional y romántica hacia a juego esa noche en donde unieron sus cuerpos al ritmo de sus deseos, ambos no sabían descifrar los sentimientos encontrados que estaban teniendo en ese momento pues la cercanía ensordecía sus emociones y sólo dejaba al exterior sus miradas fugaces, el contacto de sus cuerpos y la fricción de sus manos tocándose en aquel baile.

Ya agotados por haber bailado al menos unas tres horas, quisieron tomar aire fresco afuera y tal vez estar solos un momento.

—A decir verdad, no pensé que me dejarías invitarte a salir.

—¿Por qué? —Preguntó Jungkook juguetón.

—Creo que no te agrado bastante. —Los ojos marrones de Taehyung brillaron bajo la luz de la luna, hipnotizando a Jungkook.

—Pues una persona puede cambiar de opinión. —Caminaban por la orilla, Jungkook tuvo que quitarse los tacones para caminar cómodamente sobre la arena.

Taehyung llevaba las mangas arremangadas pues de tanto bailar se había acalorado, no digieron ni una palabra más solo iban entrelazados de los dedos, de sentían cómodos aunque Taehyung no podía sacar el tonto pensamientos que se le hizo al ver nuevamente los lunares característicos de Jungkook en Ye In y ni hablar de la cicatriz en la mejilla de éste, la cual había rozado con sus labios cuando le había susurrado en la oreja.

¿Y sí Jungkook está vestido de Ye In?.

Le dio una mirada rápida a Ye In, negó sus pensamientos pues si fuera Jungkook jamás podría haberse llevado bien con él como con ella, aunque muy en el fondo tenía la esperanza que así fuera.

❝ Todo por la Corona┊TaeKook ❞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora