❝ Todo por la Corona┊TaeKook ❞

Capítulo 5

Taehyung es un hombre bastante calculador, astuto y un hijo de puta, sabía perfectamente como reconocer cuando le estaban viendo la cara no por algo pudo llevar el apellido Kim aún más arriba de lo que ya estaban. Miraba hacía la nada en aquella suite lujosa del resort más caro de la isla, lo mejor para el mejor, su asistente estaba ocupado en los asuntos del Kim mayor por lo cual su vista estaba sumergida en su ipad, carraspeó su garganta llamando la atención de la única persona en la que confiaba.

—¿Se le ofrece algo señor Kim? —Dejó el aparato sobre la mesa de café.

—Vigila a Jeon Ye In y quiero que encuentres el hospital en el que está internado Jeon Jungkook, avísame de cualquier detalle mínimo, estoy seguro que aquellos dos me están viendo la cara de idiota. —Tomó una de sus pelotas antiestrés, aplastandola una y otra vez.

—A todo esto, ¿por qué tan interesado en Jeon Ye In? Antes ni siquiera la tomaba en cuenta, señor Kim. —Jimin se sentó cruzando las piernas, viéndolo seriamente.

—Hay algo muy sospechoso alrededor de ella, ¿no la notaste cambiada?

—De hecho sí, cambio un poco en su actitud hacía usted, ella era respetuosa y cortés ahora actúa con usted como sí no lo soportará. —Ambos se miraron, por eso se llevaban muy bien, Jimin y él eran como una mente juntos, pensaban igual.

—Por eso quiero que la observes hasta que encuentres algo que pueda usar a mi favor y el de Jennie también.

—Señor Kim, ¿no se le hace curioso que no le allá afectado el "accidente" que tuvo? —Jimin había dado en el clavo, Taehyung sonrió.

—Obviamente que fue un milagro verla intacta, por eso es que siento que tiene algo en manos, no creerás que me quiero acercar a ella por enamoramiento, ¿verdad?

—No, no lo había pensado.

—Bien, ya sabes que hacer ahora. —Se levantó de su lugar para ir hacía su habitación para recostarse un momento.

Jimin tomó su celular para empezar con su nueva tarea, estaba por doblar la esquina del pasillo hasta que se topo con Yoongi, él amigo de Jungkook.

—Hola perrita faldera de los Kim. —Hay un pequeño detalle sobre la relación de estos dos y es que ambos no se soportan, desde que Park Jimin había reportado a Yoongi por faltar al trabajo unos días, contándole un ascenso a Min, no se toleran.

—Ay, perdón no te había visto, eres casi transparente. —Dijo con una sonrisa burlona.

—Deja de fingir, Jimin. Se que me deseas. —Decía el pálido con claro sarcasmo.

—¿Cómo lo supiste? Todo este tiempo lo he estado escondiendo. —Rodó los ojos, apartando de su camino a Yoongi.

—Oye, Jimin, la verdad tienes un trasero estupendo lástima que seas tan insoportable como una hemorroide.

—Deja de decir estupideces. —Se acercó peligrosamente al otro hombre. —¿Quieres qué haga que te despidan?

—¿Ya pediste las gerberas, perrita faldera? —Vio a Jimin cambiar su semblante a uno de preocupación y nerviosismo notable.

—Vete a la mierda. —Jimin se marchó.

Yoongi se dio la vuelta sonriendo triunfante, ya tenía a Jimin donde quería así se mantendría alejado por un momento. Entró a la suite en la que Jungkook o más bien "Ye In" se hospedaba, se tiro en uno de los sofás viendo a Jungkook que estaba cruzado de piernas mientras veía su móvil.

—Cómo que ya te estás tomando muy bien el papel de mujer, ¿no?. —Jungkook lo observó y rápidamente se acomodó diferente.

—Callate.

—Por cierto, la mascota de Kim estaba merodeando por aquí cerca, sospechoso.

—¿No viste que estaba haciendo antes? —Yoongi negó a la pregunta.

—Nada de nada pero al menos no molestará por un tiempo, le dije algunas cosas.

Antes de que Jungkook dijera alguna palabra, el timbre de la suite fue tocado, extrañados, Jungkook se levantó viendo por la mirilla de la puerta a Kim Taehyung parado con un traje muy elegante, se veía muy guapo eso lo admitía Jungkook.

—¿Quién es? —Yoongi le murmuró a su amigo.

—¡Es nuestro jefe! —Dijo en un tono bajo pero alterado.

—¡¿Pero qué hace aquí?!

—¡Yo que voy a saber! —Nuevamente el timbre fue tocado y Jungkook le hizo señas a Yoongi para que se escondiera.

Al verlo huir hacía la habitación principal, abrió la puerta viendo a su jefe sonriéndole, quiso cerrarle la puerta en la cara pero no lo hizo.

—Buenas tardes, señorita Jeon. —Tomó la mano de Jungkook, besando el dorso de ésta.

—Bu-buenas tarde, señor Kim. —Quitó su mano, perplejo por el comportamiento de su jefe, nunca lo había visto ser respetuoso y caballeroso.

—Lamento venir de forma inesperada, Ye In. Es sólo que quería visitarla, no estoy siendo irrespetuoso, ¿verdad?

—No, para nada, pasé, por favor. —Aún seguía sin palabras.

—Pensé que me dejarías afuera, como no me soportas. —Jungkook lo guió a la sala para que sentará.

—Reconozco que no me agrada pero soy respetuosa.

—Claro, después de decirme que prácticamente prefieres suicidarte a estar conmigo. —Rió ligeramente.

—¿Veniste a reclamarme? —Se sentó indicándole a su jefe que también lo hiciera.

—No, de hecho quería invitarte a salir un momento, debe ser estresante estar preocupada por todo esto, ¿no? —La sonrisa de su jefe era jodidamente atractiva, ya entendía a todas las personas que salieron con él.

—Un poco, sí y ¿Dónde planeas llevarme? —Arqueó su ceja un poco dudoso.

—Una caminata alrededor de la playa, nosotros dos y el atardecer.

—Que romántico, Taehyung.

—Lo soy, un poco.

—Acepto pero no quiero quedarme hasta tarde.

—Como usted diga, Ye In.