6. Mi mejor amigo.

211 9 2
                                    


Saqué mi celular del bolsillo y le mostré las entradas digitales para la película de los Minions. Sus ojos gigantes y azules se abrieron como platos, y luego se cubrió la boca con la mano en un gesto de sorpresa.

—Boludo, te adoro, te juro —dijo Ara, provocando que me sonrojara instantáneamente.

No pude evitar soltar una pequeña risa. —No es nada, linda —respondí mientras le guiñaba un ojo. Me encantaba ver su reacción. Quería que esta salida fuera especial para ella, aunque aún no lo dijéramos en voz alta, sabía que éramos más que amigos, y quería seguir compartiendo momentos así juntos.


-Narra Ara-

Una vez nos sentamos en la sala del cine, puse el balde de pochoclos sobre las piernas de Iván y  nos sacamos un par de fotos juntos sosteniendo las entradas, lo que hizo que nos cagaron a pedos los que estaban sentados atrás, nos miramos y soltamos una risita cómplice por lo bajo.

íbamos comentando ciertas cosas de la película y nos reíamos, pero por un momento no podía dejar de mirarlo a él. Su risa, su forma de reaccionar a las escenas, su expresión cuando algo le sorprendía. Cada detalle de Iván me parecía fascinante, y sin duda, estaba sintiendo algo especial por él. No podía creer lo que me pasaba, cuando lo miraba sentía algo que hace mucho no me pasaba. Además, no hace tanto que nos conocíamos, pero ahora que lo miro así, riéndose de la peli, con esos ojos hermosos que brillaban con la luz tenue de la pantalla del cine, pestañas tan largas, rizadas y oscuras que tiene, estaba embobada. No se que tipo de amarre hiciste conmigo Iván Buhajeruk, pero funciona.

—La parte donde Otto está con el triciclo pedaleando como loco me mató—Me reí a carcajadas.

—Si boluda fue un cago de risa. Estuvo buena la peli eh. — Dijo alzando las cejas y haciendo una mueca de aprobación con sus labios.

—¿Dudabas del poder de conquista de los Minions? —Levanté una ceja y lo miré fijo a los ojos.

—No, jamás —respondió Iván, apretando los labios y encogiendo los hombros, con un gesto divertido con las manos.

Sonreí como tonta mientras lo observaba. De repente, sonó su celular y, solo moviendo los labios, me pidió perdón por la interrupción.

—Amigooo, ¿qué pasa? —dijo Iván, haciendo una pausa para escuchar la respuesta del otro lado—. ¿Me estás jodiendo? ¡La puta madre, boludo! Me re olvidé, dame 20 y estoy ahí. —Cortó la llamada.

—¿Qué pasó? —pregunté curiosa.

—Soy un tarado, olvidé que hace un par de semanas con Carre arreglamos hacer un chupi-stream hoy.

—¿Carre?¿Chupi que? —Incliné la cabeza, mostrando que estaba confundida.

Iván se rió y pasó su mano por su nuca, explicando con paciencia: 

—Me olvido que hasta hace poco no tenías idea de los streams. Carre es Rodrigo, del que te hable antes. Uno de mis mejores amigos y también es streamer. Un "chupi-stream" es cuando hacemos retos en el stream y si perdes, tenes que tomar un chupito.

— Ah, ok ok, ahora entiendo. —Dije e hice una pausa— Entonces, ¿tenes que irte ya? 

—Perdón, si, es que le prometí y bueno...—dijo y lo interrumpí

—Eu, no pasa nada, la pasé re bien ya —Le sonreí y puse mi mano sobre su hombro

—Yo también, no quería terminar así la salida igual. —Dijo y pensó por un momento.— ¿Y si venís a casa de Carre y participas del stream?

ConexiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora