Capitulo 23

1 0 0
                                    


Jack

Hoy es el gran día, no pensaba que iba a llegar a tener lo que he conseguido, pero la verdad es que Chris tiene razón al decir que estar con alguien que amas y respetas es la cosa más hermosa y espectacular del mundo.

Llevo exactamente dos semanas sin tener mis intentos asesinos por las nubes, por lo que significa que voy controlándome y recuperando "mi estado de tranquilidad" como lo hace las personas normales.

El día de hoy se ha compuesto de sorpresas, muestras de cariño, besos y sexo interminable mi parte favorita de la vida y todo por la mujer que duerme la siesta plácidamente en mi pecho sin haber terminado la misma película de siempre. En vez de ser yo el que prepararía la cena romántica para esta noche, quiso hacerlo ella por la idea de que quería cocinar y darme una sorpresa final antes del postre, nosotros no nos hemos opuesto a sus ideas y nos hemos dejado porque para una vez que teníamos todos los regalos no nos tocaría hacer la cena.

<<FLASHBACK>>

Habían pasado unos meses y otra vez era la fecha de nuestro aniversario, hacía tiempo que no me ponía tan nervioso por algo tan importante como una fecha

Nunca fueron lo tuyo

-Nena, tengo que decirte algo que no te va a gustar- me preparaba para decírselo

Se me había olvidado comprarle algo por nuestro aniversario y esta vez no podían cubrirme Chris y menos Alex, así que me tocaba decírselo yo. Nos encontrábamos en el salón los dos cómodamente hasta que me he sobresaltado al recordarlo.

-Adelante, cuéntame

No podía mentirle a los ojos, ella me pillaría y si me pongo nervioso después discutiré y me tendré que ir a matar a alguna mujer con características concretamente parecidas...

Respira

-Se me ha olvidado comprarte el regalo para nuestro aniversario, lo siento mucho, pero es que con lo del trabajo y las cosas que tenía en la cabeza no podía acordarme de todo, y ...

-Ey ey, ve más despacio que no puedo entenderte cuando vas rápido. Lo primero sí lo entendido, y te digo que no pasa nada, lo que vas a hacer es organizar tú la cena romántica de esta noche.

-Pero... ¿no estás cabreada ni nada? -niega con la cabeza- Tienes fiebre o algo por el estilo- tonteo con ella de juego aliviado por la situación

-No tonto, solo que lo he pensado y como sé que te pasa muchas veces me he inventado ahora una norma para todos que es que, si alguno de nosotros olvida el regalo o quiere hacerlo porque sí, tiene que organizar una cena romántica para compensárselo a los demás.

<<FIN FLASHBACK>>

Ya nos encontramos por la tarde noche y decido despertarla para que se empiece a preparar porque la conozco y va a tardar exactamente cronometrado por un servidor, una hora y media. También es verdad que últimamente está más dormilona y comilona que antes.

-Nena, despierta que tienes que empezar a prepararte- la muevo poco a poco para que no se sobresalte

Después de unos cinco minutos asimilando donde se encontraba, quién era yo y qué iba a hacer se levanta con la intención de meterse en la ducha, pero su intención llega más lejos cuando al pie de las escaleras se da media vuelta y me mira con esas intenciones nada inocentes para que me dé cuenta que quiere que la acompañe y "la ayude" en algo que necesita.

Las duchas con mi esposa cada vez son mejores si se treta de la dosis de sexo que ayuda también a mi asesino interno. Como costumbres que nos hemos hecho nos quedamos observándola por un tiempo antes de ponernos a vestirnos para darle ventaja, aunque en mi opinión es más para ver cómo se coloca la ropa interior y qué conjunto se pone de los que le compré hace unos días.

Mi propia muerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora