CAPITULO 12: UN BUEN DÍA

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31 de Agosto de 2016, Western High 

Mierda...

¿Es una jodida broma? Había otros cinco lugares vacíos... ¿Y de verdad tenía que elegir ese?

Respire profundamente y empecé a caminar hasta el lugar que el profesor me había indicado, sintiendo algunas miradas sobre mí, excepto la de aquella chica, en realidad ella parecía mucho más interesada en su lectura o al menos en fingir leer cualquier cosa con tal de evitar mirarme, pero incluso cuando mantenía la cabeza agachada podía notar el rubor en sus mejillas.

Me senté junto a ella, sintiendo como mi pulso empezaba a acelerarse por los nervios que me provocaba la incomodidad de la situación, saqué mi libro y ni si quiera me moleste en preguntar que página debía de leer o que era lo que estábamos haciendo, simplemente lo abrí en una página al azar dejando que el profesor continuara con la clase.

Me sentía mucho más extraña que antes, por un lado me sentía avergonzada de la forma tan estúpida en la que me había comportado con ella pero había algo más, era como...si el simple hecho de estar cerca de esta chica hiciera que todo en mi interior estuviera tranquilo pero...al mismo tiempo era todo un torbellino de emociones.

Trate de verla disimuladamente, ya que durante el incidente en la cafetería no había podido ver otra cosa que no fueran sus ojos y no recordaba mucho de más allá de eso. Mis ojos empezaron a recorrer cada detalle que podía de ella, no era muy difícil darse cuenta de que era una chica atractiva, de hecho...

De hecho...ella era realmente hermosa...

Su piel era blanca y tersa, tanto que parecía estar hecha de porcelana, sus labios eran carnosos con ese color rojo por el labial que llevaba puesto, haciéndolos aún más hermosos, su cabello negro, cayendo por sus hombros como una hermosa cascada... y esos ojos...

Los ojos más hermosos que hubiera visto en mi vida...

¿Cómo era posible que alguien pudiera ser tan hermosa como ella lo era?

Aquellos pensamientos se fueron cuando escuche la voz del profesor Adams llamándome.

Señorita Camila... – Mi vista se dirigió rápidamente al profesor, quien me miraba con los ojos entrecerrados.

¿Sí? – Respondí aun aturdida, me recompuse rápidamente en mi silla, al escuchar las risas y los murmullos de los demás estudiantes. Carajo... ¿Cuánto tiempo había estado como idiota observando a esa chica?

¿Podría decirme los años en los que se llevó acabo la revolución industrial de Reino Unido? – Preguntó el profesor. Parpadee rápidamente mientras mi mente procesaba lo que acababan de preguntarme.

Ahm...pues... – No tenía ni idea de cuál era la jodida respuesta, negué con mi cabeza, suplicando que la tierra me tragara de hacer el ridículo pero al escuchar que algunas rizas seguían aumentando solo me resigne a la idea de que no había manera de escapar de ahí. Justo cuando estaba lista para confesarle al profesor que ni siquiera había estado escuchando una sola palabra de la lectura la chica junto a mí levanto su mano lentamente.

¿Sí? Señorita Jauregui... – Dijo el profesor, cediéndole la palabra. La chica se acomodó mejor en su silla, aclarando su garganta antes de hablar.

Bueno...principalmente se llevó acabo en la segunda mitad del siglo XVIII, entre 1760 hasta 1840 – Respondió la chica, el profesor asintió complacido por su respuesta.

Correcto, señorita Jauregui – El profesor volvió a dirigir su vista hasta mí, frunciendo el ceño – Señorita Camila le sugiero que mantenga la vista en la lectura, continuemos... – Solté un suspiro enorme, e ignorando por completo la "sugerencia" del profesor en mantener la vista en el libro mis ojos volvieron a viajar al rostro sonrojado de la chica junto a mí.

All You Need Is Love (Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora