Capitulo 8

253 16 2
                                    

—Con Kagome y Shippo—

Kagome y Shippo caían a gran velocidad del cielo, como pudo Kagome volteo a ver en que zona iba a caer pero cuando lo hizo noto que estaba por estrellarse contra el techo de un castillo, sin pensarlo mucho solo protegió al pequeño con su cuerpo y después de que traspasar un techo y unos cuantos pisos su descenso termino en el piso de un cuarto que a leguas se notaba que era de un niño. Mientras se encorvaba un poco por el dolor de la caída y verificaba que Shippo estuviera a salvo, un hombre de cabellos rubios entro siendo arrojado con fuerza para estamparse contra un lado de la cama, casi de inmediato otro hombre de cabellos negros y un poco mayor entro.

Kagome: (pensando) Se parece a mi padre.

El hombre de cabello negro se detuvo en el instante en que reconoció la habitación

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El hombre de cabello negro se detuvo en el instante en que reconoció la habitación.

Dracula: Es tu cuarto... Mi niño (empezando a lamentarse y acercándose a un cuadro) Lisa estoy asesinando a nuestro hijo. Pintamos este cuarto, hicimos estos juguetes, es nuestro niño Lisa.

Cuando Kagome lo escucho hablar así fue como si escuchara hablar a su padre y eso la entristeció así que sin pensarlo mucho dejo a Shippo sobre la cama y se arrojo a abrazar a Dracula.

Kagome: (Acariciando la cabeza de Dracula) Tranquilo, todo esta bien, no has asesinado a tu hijo todavía así que todavía tiene la oportunidad de remediar lo que hiciste.

Alucard: (impresionado)...

Dracula: ¿De verdad?... ¿Todavía tengo tiempo?

Kagome: (separándose de él y sonriéndole) Si, solo necesitas volver en ti.

Dracula: (mirando a la niña que le sonreía cálidamente para luego voltear a ver a su hijo) El regalo mas grande que me diste Lisa, nuestro hijo. Lo siento.

Alucard: (impactado, pero tomando un pedazo de la cama que tenia la forma de una estaca de madera)...

Dracula: (regresando su mirada a Kagome) Gracias. (dirigiendo su mirada devuelta a su hijo) Ya debo estar muerto.

Kagome vio como el joven rubio tomaba un pedazo de madera de la cama en forma de estaca y supo lo que iba a hacer.

Kagome vio como el joven rubio tomaba un pedazo de madera de la cama en forma de estaca y supo lo que iba a hacer

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
SANGRE INMORTALDonde viven las historias. Descúbrelo ahora