Capítulo 11

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DEDICADO A TODOS LOS GRYFFINDOR

Pov. Harry

Salimos del gran comedor después de que Mcgonagall nos entregara los horarios y nos dirigimos al invernadero 3, cuando íbamos a ingresar vimos a la profesora Sprout que caminaba a la par de Lockhart; el cual quería tener una charla conmigo en privado

-¡Harry! Quería hablar contigo... Profesora Sprout, no le importa si retengo a Harry un par de minutos, ¿verdad?- A juzgar por la cara que puso la profesora Sprout, sí le importaba, pero Lockhart añadió: -Sólo un momento- y le cerró la puerta del invernadero en las narices. -Harry- dijo Lockhart. Sus grandes dientes blancos brillaban al sol cuando movía la cabeza -Harry, Harry, Harry.

No dije nada. Estaba completamente perplejo. No tenía ni idea de qué se trataba. Estaba a punto de decírselo, cuando Lockhart prosiguió:

-Nunca nada me había impresionado tanto como esto, ¡llegar a Hogwarts volando en un coche! Claro que enseguida supe por qué lo habías hecho. Se veía a la legua. Harry, Harry, Harry.-
Era increíble cómo se las arreglaba para enseñar todos los dientes incluso cuando
no estaba hablando.

-Te metí el gusanillo de la publicidad, ¿eh?- dijo Lockhart -Le has encontrado el gusto. Te viste compartiendo conmigo la primera página del periódico y no pudiste
resistir salir de nuevo.

-No, profesor, verá...- no me dejo continuar y siguió divagando acerca de lo bueno que es la fama y salir en las revistas, hasta que finalizó pude entrar al invernadero donde la profesora estaba lista para dar las indicaciones de la clase que se desarrollaría.

Se trataba de trasplantar mandrágoras solo hable un breve momento con un Hufflepuff nacido de muggles que se llama Justin después de esa charla nos toco colocarnos las ojeras para no escuchar el llanto de las mandrágoras bebes.

Cuando salimos de la clase de herbologia Ron no paraba de quejarse de su varita rota

-Pidele otra a tus padres- sugeri después de tantos reclamos.

-Y que me envíen otro hower no gracias, prefiero no humillarme más- me contesto de mal humor.

Bajamos a comer y nos encontramos con Hermione y el humor de Ron empeoró cuando ella le mostró todos los botones que pudo hacer en la clase de transformaciones.

-¿Qué hay esta tarde?- pregunte a nadie en específico , cambiando de tema rápidamente.

-Defensa Contra las Artes Oscuras- me contesto Hermione automáticamente.

-¿Por qué- preguntó Ron, cogiéndole el horario -has rodeado todas las clases de Lockhart con corazoncitos?- Hermione le quitó el horario, se había ruborizado tanto que su cara parecía el cabello de Ron. Terminamos de comer y salimos al patio, estaba nublado Hermione se sentó en un peldaño de piedra y volvió a hundir las narices en Viajes con los vampiros. Con Ron nos pusimos a charlar de quidditch, y pasaron varios minutos antes de que me diera cuenta de que alguien nos vigilaba estrechamente al principio pensé que podía ser Noah pero descarte esa idea tan rápido como llego ya que el nos hubiera hablado ¿verdad?. Al levantar la vista, vi a un muchacho pequeño de pelo castaño que la noche anterior se había puesto el sombrero
seleccionador me miraba como paralizado, tenía en las manos lo que parecía una cámara de fotos muggle normal y corriente, y cuando se dio cuenta que lo había descubierto se ruborizó en extremo.

-¿Me dejas, Harry? Soy... soy Colin Creevey- dijo entrecortadamente, dando un indeciso paso hacia delante -Estoy en Gryffindor también. ¿Podría..., me dejas... que te haga una foto?- pregunto levantando la cámara esperanzado.
-¿Una foto?- repeti sin comprender.

-Con ella podré demostrar que te he visto- dijo Colin Creevey con impaciencia, acercándose un poco más, como si no se atreviera -Lo sé todo sobre ti. Todos me lo han contado: cómo sobreviviste cuando Quien-tú-sabes intentó matarte y cómo desapareció él, y toda esa historia, y que conservas en la frente la cicatriz en forma de rayo (con los ojos recorrió la línea de mi cabello). Y me ha dicho un compañero del dormitorio que si revelo el negativo en la poción adecuada, la foto saldrá con
movimiento- Colin exhaló un soplido de emoción y continuó -Esto es estupendo, ¿verdad? Yo no tenía ni idea de que las cosas raras que hacía eran magia, hasta que
recibí la carta de Hogwarts. Mi padre es lechero y tampoco podía creérselo. Así que me dedico a tomar montones de fotos para enviárselas a casa. Y sería estupendo hacerte una- me miro casi rogándome -Tal vez tu amigo querría sacárnosla para que
pudiera salir yo a tu lado. ¿Y me la podrías firmar luego?

-¿Firmar fotos? ¿Te dedicas a firmar fotos, Potter?- En todo el patio resonó la voz potente y cáustica de Draco Malfoy. Se había puesto detrás de Colin, flanqueado, como siempre en Hogwarts, por Crabbe y Goyle, sus amigotes o más bien sus guardaespaldas

-¡Todo el mundo a la cola!- gritó Malfoy a la multitud -¡Harry Potter firma fotos!- me estaba exhasperando Malfoy tiene un don para hacerme perder la paciencia.

-No firmo fotos Malfoy, así que mejor cállate- me defendí.

-Vamos Potter de seguro tu amigo Weasley quiere una así podrá venderla y salir de la pobreza- dijo con una sonrisa burlona que le quedaría borrar.

-Lo que pasa es que le tienes envidia- dijo Colin, hasta se me había olvidado que estaba ahí.

-¿Envidia?- dijo Malfoy claramente divertido -¿De que? ¿De esa asquerosa cicatriz de la frente?- se notaba que la situación le divertía mucho -Vengan hagan fila el famoso Harry Potter firma fotos- estaba más ocupado deteniendo a Ron para que no se fuera conta Malfoy cuando Hermione nos susurró.

-Cuidado- no entendía el por que hasta que pude ver a Lockhart acercarse a nosotros por la gran multitud que nos rodeaba (la mayoría slytherin de cursos mayores que divertían de los comentarios despectivos de Malfoy).

-¿Que pasa aquí fue lo primero que pregunto Lockhart -¿Quien firma fotos?- tierra tragame y escupeme en Australia pensé al ver la sonrisa burlona de Malfoy, justo cuando iba a replicar el hombre volvió a hablar -¡No sé por qué lo he preguntado! ¡Volvemos a las andadas, Harry!- Lockhart me sujeto por los hombros y muerto de vergüenza, vi que Malfoy se mezclaba sonriente con la multitud -Vamos, señor Creevey- dijo Lockhart, sonriendo a Colin -Una foto de los dos será mucho mejor. Y te la firmaremos los dos.-

Después me dio una larga charla de la fama mientras caminábamos hacia el aula que por desgracia para mi y deleite de Lockhart era defensa contra las artes oscuras, al llegar al aula me senté al fondo para evitar más atención del profesor, cuando llegaron Ron y Hermione cada uno se sentó a un lado mío.

-Mas vale que Ginny y Colin no se conozcan o podrían crear el "Club de fans de Harry Potter"- me dijo Ron después de sentarse.

-O cállate- que espete eso era lo último que me faltaba.

Percy Jackson en hogwartsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora